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Una forma a menudo pasada por alto para reservar fondos para los gastos de atención médica en la jubilación es acumular dinero en una cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA).
Como sugiere el nombre, una HSA te permite reservar dinero para los costos de atención médica. Pero puede servir para otro propósito: Si dejas dinero en la cuenta para que crezca en lugar de usarlo para los gastos médicos actuales, puede funcionar como una cuenta de jubilación adicional, reforzando tus ahorros jubilatorios.

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"Soy un gran admirador de usar las HSA como una estrategia a largo plazo, no como una alcancía inmediata", dice Steven Jarvis, director ejecutivo de Retirement Tax Services en Spokane, Washington.
Una HSA ofrece un beneficio fiscal que no obtienes con una 401(k) o una cuenta de jubilación individual (IRA). Mientras que los retiros de cuentas de jubilación tradicionales se gravan a tu tasa regular de impuesto sobre los ingresos, no hay impuestos sobre el dinero que sacas de una HSA para pagar costos de atención médica admisibles.
Eso puede traducirse en ahorros significativos, considerando que una persona de 65 años que se jubile en el 2025 puede esperar gastar un promedio de $172,500 en gastos médicos durante su jubilación, según el último estudio de Fidelity, la Estimación de costos de salud para jubilados (en inglés). Aquí está lo que necesitas saber para hacer de una HSA parte de tu estrategia de planificación de jubilación.
Cómo funcionan las HSA
Puedes ahorrar dinero en una HSA si tienes una póliza de seguro de salud con un deducible alto. En el 2025, el deducible de tu plan debe ser al menos de $1,650 para la cobertura individual o de $3,300 para la cobertura familiar para cumplir con los requisitos. Los deducibles aumentan en el 2026 a $1,700 para la cobertura individual y $3,400 para la cobertura familiar.
Usar una HSA para ahorrar para los gastos médicos no cubiertos ofrece tres beneficios fiscales:
- Puedes hacer contribuciones antes de impuestos a una HSA a través de deducciones de nómina si tienes un plan de seguro médico con deducible alto a través del trabajo. Si trabajas por cuenta propia, puedes abrir una HSA por tu cuenta y reclamar una deducción de impuestos por tus contribuciones.
- Las ganancias en las inversiones de tu HSA crecen libres de impuestos.
- Tus retiros no son gravados si el dinero se usa para pagar gastos médicos calificados, como deducibles de seguro de salud, medicamentos recetados, trabajos dentales, audífonos y cuidado de la vista.
El dinero que retiras para gastos médicos calificados no se incluye en los cálculos de ingresos que determinan si estás sujeto al recargo de la prima de Medicare para beneficiarios de ingresos más altos o si tienes que pagar impuestos sobre tus beneficios del Seguro Social.
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