Guía sobre la gripe: lo que debes saber esta temporada
¿Qué tan mala será la temporada de gripe este año?
Los expertos advierten de un otoño y un invierno difíciles, por lo que vacunarse contra la gripe es aún más esencial.
Las autoridades de salud pública de EE.UU. por lo general se fijan en el hemisferio sur para obtener indicios de lo que se puede esperar, y Australia está concluyendo su peor temporada de gripe en cinco años. La temporada de gripe australiana también llegó significativamente antes de lo normal, y los casos aumentaron dos o tres meses antes de su pico típico.
“Nunca puedes predecirlo con una precisión del 100%, pero todos los signos apuntan a que la gripe regresará este año, y los datos de Australia sugieren que será una temporada de gripe fuerte”, dice Andrew Pekosz, virólogo y profesor de Microbiología en la Facultad de Salud Pública de Johns Hopkins University.
Además, las autoridades de salud pública anticipan otro aumento en los casos de COVID-19 a medida que comienza el año escolar, el clima se enfría y las personas pasan más tiempo en espacios cerrados. Esos pacientes podrían competir potencialmente por camas de hospital con pacientes que tienen complicaciones de la gripe.
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También es posible contraer la gripe y la COVID-19 al mismo tiempo. Un estudio reciente (en inglés), publicado en The Lancet, halló que los adultos que tienen una doble infección de gripe y COVID-19 tienen un mayor riesgo de enfermar gravemente y morir que los pacientes que solo se enferman de COVID-19 o de otros virus.
Pero hay una manera de reducir el impacto previsto del virus: vacunarse contra la gripe. La vacuna es especialmente importante para los adultos mayores, que sufren un deterioro natural de la función inmunitaria con la edad y corren un mayor riesgo de desarrollar complicaciones de la gripe. Los adultos mayores también tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones por la COVID-19.
Las personas en el país pueden ser más susceptibles a la gripe este año
Las últimas dos temporadas de gripe han sido más leves de lo habitual, con un número bajo de casos y pocas hospitalizaciones y muertes. Los expertos atribuyen la disminución a las precauciones contra la COVID-19, como usar mascarillas y mantener el distanciamiento social. Las personas también viajaron menos durante el apogeo de la pandemia.
“Ahora que las personas salen de casa sin mascarillas, viajan mucho y van nuevamente de vacaciones, acuden a restaurantes y servicios religiosos, y regresan a la escuela y a la oficina, hay más oportunidades de que el virus [de la gripe] circule”, dice William Schaffner, director médico de la National Foundation for Infectious Diseases y profesor de Enfermedades Infecciosas en el Vanderbilt University Medical Center en Nashville, Tennessee.
Las personas en el país también tienen menos inmunidad natural a la gripe porque pocas personas se infectaron en el 2020 y el 2021, dice Pekosz.
En años típicos, “un buen porcentaje de la población se infecta con la gripe, y su inmunidad después de la infección dura más de la que obtenemos con la vacuna”, señala Pekosz. “Lo que estamos viendo es un par de años en los que no ha habido infecciones. Así que más personas pueden ser susceptibles a la gripe durante esta próxima temporada”.
Añade que una temporada temprana suele ser una señal de que las personas en una población son más susceptibles. Eso explicaría lo que sucedió en Australia, y podría predecir una temporada temprana en nuestro país.
Programa tu vacuna contra la gripe
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan vacunarse contra la gripe en septiembre u octubre. “Lo ideal es que todas las personas estén vacunadas antes de finales de octubre”, dice la agencia. (Pero siempre es mejor hacerlo tarde que nunca).
Dado que es posible una temporada temprana de gripe este año, algunos expertos dicen que debes intentar vacunarte antes, en septiembre, en vez de octubre.
“Debes vacunarte un mes antes de que llegue la gripe, porque toma alrededor de un mes obtener los anticuerpos que necesitas para protegerte”, dice Adolfo García-Sastre, director del Global Health and Emerging Pathogens Institute de la Facultad de Medicina Icahn en Mount Sinai, en la ciudad de Nueva York.
“Lo que hemos visto en Australia sería el equivalente a [la temporada de gripe] que sucede a partir de octubre aquí”, agrega.
Si el virus no sigue el mismo trayecto que en Australia y alcanza su auge en febrero en lugar de ahora, como lo ha hecho en otros años, tu inmunidad, si recibiste la vacuna en septiembre, podría haberse debilitado ligeramente para entonces, dice García-Sastre. Eso ha impulsado el debate entre los expertos en salud sobre si recomendar un refuerzo contra la gripe para los grupos de alto riesgo, agrega. En este momento, sin embargo, no hay recomendación para una segunda dosis.
Los adultos mayores deben recibir la vacuna de alta dosis o adyuvante
Todas las vacunas contra la gripe aprobadas este año son tetravalentes, lo que significa que contienen cuatro cepas diferentes del virus. Hasta ahora, parece que la vacuna está bien adaptada a las cepas circulantes.
“Incluso en años en los que no hay una buena coincidencia entre la vacuna y el virus circulante, la vacuna siempre brinda una cierta protección”, dice Schaffner.
Los adultos de 65 años o más deben recibir la vacuna contra la gripe de dosis alta o adyuvante, dicen los CDC; ambas han demostrado suscitar una respuesta inmunitaria más fuerte entre los adultos mayores y pueden ofrecer una mayor protección contra la enfermedad.
“Las personas de 65 años o más representan más del 85% de las hospitalizaciones y muertes causadas por la gripe, así que necesitamos toda la ayuda que podamos conseguir”, agrega Schaffner.
Según datos de los CDC, la gripe causó alrededor de 380,000 hospitalizaciones y 20,000 muertes en la temporada de gripe 2019-2020. Las temporadas anteriores de gripe fueron más graves: en la temporada 2017–2018, por ejemplo, se calcula que 710,000 personas en el país fueron hospitalizadas y 52,000 murieron a causa de la enfermedad, según los CDC.
Sin embargo, aproximadamente un tercio de los adultos mayores no recibieron la vacuna contra la gripe el año pasado, según datos federales.
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¿Una dosis en cada brazo?
Hay un nuevo lote de vacunas de refuerzo contra la COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna que se han adaptado para combatir mejor la variante ómicron y sus subvariantes, y las autoridades de salud pública recomiendan que todos los adultos completamente vacunados reciban una de estas vacunas este otoño. (Las personas de 12 años o más pueden recibir la vacuna de Pfizer actualizada; los adultos de 18 años o más pueden optar por la de Moderna). Y un buen momento para recibir el nuevo refuerzo, dicen los expertos, es cuando vayas a vacunarte contra la gripe.
“Vacúnate contra la gripe en un brazo y contra la COVID en el otro”, sugiere Schaffner.
Ashish Jha, coordinador de respuesta contra la COVID-19 de la Casa Blanca, incluso dijo: “Realmente creo que es por eso que Dios nos dio dos brazos: uno para la vacuna contra la gripe y el otro para la vacuna contra la COVID”.
Las autoridades de salud pública reconocen que las personas en el país que están hartas de vacunas pueden sentir la tentación de renunciar a una o ambas dosis, pero advierten que hacerlo podría aumentar significativamente el riesgo de hospitalización o muerte.
“Mi preocupación es que no hemos visto una buena aceptación de la vacuna de refuerzo contra la COVID, en particular entre las poblaciones vulnerables”, dice Pekosz. “La misma población con alto riesgo de enfermar gravemente por COVID es la que tiene un alto riesgo de contraer un caso de gripe grave. Ahora es el momento de tomar conciencia de ello y hacer algo al respecto. Sabemos que las vacunas son la mejor protección”.
Michelle Crouch es una escritora colaboradora que ha cubierto temas de salud y finanzas personales para algunas de las principales publicaciones para consumidores del país. Su trabajo se publicó en Reader's Digest, Real Simple, Prevention, The Washington Post y The New York Times.