5 tendencias gastronómicas para el 2013

Los jugos

Los vegetales también se están tomando a sorbos. El accesorio más popular en las cocinas de la actualidad es el extractor de jugos —un electrodoméstico que separa los líquidos de la pulpa viscosa de las frutas y los vegetales, con la idea de que, a través de esta manera potable, el organismo pueda absorber más vitaminas de los alimentos—. Hay muchísimas recetas para usar con los extractores, incluso una de nuestras favoritas para elaborar un "Jugo energizante", una mezcla de zanahorias, manzanas, pepinos, remolachas y jengibre. ¡Qué rico!

Semillas antiguas como alternativas al trigo

A medida que un mayor número de personas sigue una dieta sin gluten, consumen semillas cuyo sabor recuerda el de los granos (denominadas los "seudocereales"), especialmente la quínoa: con un sabor un poco amargo, repleta de proteínas y adorada por los aztecas antiguos, la quínoa se usa cada vez más en lugar del arroz o como ingrediente principal de las comidas. La chía, mientras tanto, anteriormente famosa solo por la "piel" verde de las cómicas mascotas Chia Pets, tiene semillas que se valoran por los antioxidantes, las proteínas y los ácidos grasos omega 3 que aportan. Ahora es posible comprar pasta de chía, barras de chía y bebidas de semillas de chía —tanto como elaborar sus propias galletas de chía con trocitos de chocolate—.

Palomitas de maíz: una merienda estupenda

Todos los seguidores de tendencias alimenticias en el país se vuelven locos por las palomitas de maíz: los estadounidenses ya consumen aproximadamente 16 mil millones de cuartos de galón al año de esta delicia, que ahora se considera mucho más que un grasoso bocado para disfrutar en el cine. Las palomitas de maíz se pueden encontrar en bufets de postres en las recepciones de bodas, en tiendas gourmet (con sabores tales como wasabi, cerveza y curry) y en tiendas de alimentos naturales. Después de todo, es un grano integral, y una vez reventados, los granos aportan solo 31 calorías por taza. (Por supuesto, eso es antes de que se cubran con tocino y salsa de queso roquefort).