Vida Sana
| Es casi imposible encontrar algo bueno en una pandemia mundial. Pero la COVID-19 nos ha dado una lección importante que deberíamos reconocer: nuestro sistema inmunitario está en aprietos. No es “más débil” que el de las personas de hace varias generaciones. Pero está más “desregulado”, el término médico para un proceso o función biológica que no funciona como debería. Por ejemplo, tu sistema inmunitario tiene menos capacidad para distinguir entre un invasor mortífero y uno inofensivo, y más probabilidades que en el pasado de atacar los tejidos sanos de tu cuerpo por error. Además, siempre está en funcionamiento y trabaja de maneras contraproducentes que antes eran mucho menos comunes. Estos son indicadores de trastornos en el funcionamiento inmunitario y en conjunto agotan recursos que deberían usarse para otros fines.
La inflamación dificulta la lucha de nuestro cuerpo contra el coronavirus y la gripe.
“Definitivamente hay más desregulación entre nuestra población ahora”, dice Mark Ansel, profesor de Microbiología e Inmunología en University of California, San Francisco. “Y se relaciona con la manera cambiante en la que interactuamos con nuestro medioambiente; todo, desde lo que comemos hasta lo que hacemos”. Esta es una noticia inquietante para todos nosotros, a medida que nos adentramos en la situación perfecta con factores simultáneos de este invierno: el posible resurgimiento del nuevo coronavirus que todavía ocasiona caos en todo el país y los meses iniciales de nuestra temporada anual de influenza o gripe. Pero no estamos indefensos, ni mucho menos, y a continuación encontrarás lo que necesitas saber.
¡ÚLTIMA OPORTUNIDAD! - Únete a AARP a precios del 2024; las tarifas aumentan en el 2025.
Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
Cómo se equivoca el sistema inmunitario
Existen muchas maneras en las que nuestros cuerpos manifiestan los problemas inmunitarios. Pero tres de ellas se destacan, y la prevalencia de cada una va en aumento entre nuestra población.
Inflamación crónica. Según un estudio publicado en la revista JAMA en abril, entre quienes estuvieron hospitalizados debido a la COVID-19, el 34% tenían diabetes, el 42% eran obesos y el 57% tenían la presión alta. Un factor común de estos tres problemas de salud es la inflamación crónica. Hace que el sistema inmunitario produzca glóbulos blancos y mensajeros químicos que mantienen tus defensas activas las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
“Es casi como si usaras todos los recursos del sistema inmunitario solo para mantener ardiente ese fuego”, dice Helen Messier, inmunóloga y directora de Altum Medical, quien vive en California. “Cuando aparece una infección vírica mientras tienes inflamación crónica, el sistema inmunitario es incapaz de lograr una respuesta inmunitaria adecuada o, como en el caso de COVID-19, al principio no tiene una buena respuesta, pero luego intenta vencerlo. La inflamación subyacente puede llevar a una respuesta abrumadora, o una ‘tormenta de citocinas’”.
Enfermedades autoinmunitarias. Los investigadores han identificado más de 80 trastornos autoinmunitarios distintos. Si bien algunos, como la artritis reumatoide, el lupus y la diabetes tipo 1, son muy conocidos, muchos son difíciles de clasificar. Pero todos comparten el problema común subyacente de que el sistema inmunitario del organismo se ataca a sí mismo.
También te puede interesar
¿Podría la reducción de la inflamación ser la cura de todo?
Controlar las respuestas inmunes de nuestro cuerpo es clave para las enfermedades del envejecimiento.Inmunidad al coronavirus: ¿cómo influye tu edad?
La COVID-19 nos hace ver la importancia de mantener nuestro sistema inmunitario fuerte.5 maneras de reforzar tu sistema inmunológico
Consejos respaldados por la ciencia para fortalecer tu respuesta inmunológica de manera rápida y efectiva.