¿Deberías comprar acciones individuales o limitarte a fondos mutuos?

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In English | Tengo más de 10,000 acciones individuales con un solo fondo indexado de acciones de EE.UU. y un fondo indexado de acciones internacionales. Esa es la base de mi cartera de acciones, y ambos han tenido un buen año hasta ahora.

Pero por muy feliz que esté con mis fondos, no me permiten ejercitar la parte de mi cerebro que quiere divertirse eligiendo acciones individuales. Soy de la opinión de que está bien divertirse un poco con las inversiones y está bien elegir algunas acciones, siempre y cuando se sigan algunas reglas.

Emoción y escalofríos

Ciertamente sería bueno imaginar ser dueño de las acciones de solo las 10 mejores empresas de este año en el índice bursátil Standard & Poor’s 500 al 1.º de diciembre del 2020. Según S&P Capital IQ, son las que se detallan a continuación.

Aún mejor sería ser dueño de algunas de las mejores empresas que no están en el S&P 500, como Tesla (TSLA), con un aumento del 598.9%, y el fabricante de vacunas Moderna (MRNA), con un aumento del 620.9%. Tesla, por cierto, es la sexta acción más valiosa de EE.UU. Las acciones de la empresa entrarán en el S&P 500 el 21 de diciembre. Por supuesto, a principios de año, Corona se asociaba más con una cerveza que con una pandemia y Zoom era algo que hacías con tu cámara.

Además de muchas otras cosas, el 2020 ha sido sin duda el año modelo de la imprevisibilidad. Y la imprevisibilidad puede hacer que elegir acciones sea muy emocionante, un sentimiento al cual, sin duda, no soy inmune. Debajo de mi aburrido exterior de inversor late el corazón del apostador. Incluso tengo el impulso ocasional de comprar esas acciones arriesgadas y obtener esos retornos espectaculares, y a veces no puedo resistirme a actuar según mis impulsos de búsqueda de emociones.

Es por eso que saco una pequeña parte de mi cartera para quizás la única diversión que tengo al invertir. La llamo mi cartera de apuestas.

Mis reglas

Ahora bien, todo el mundo debería tener un sistema personal para vencer al mercado. Creo que comprar una de estas acciones después de una ganancia espectacular es seguir la manada, y no termina bien. Aunque no les digo a las personas qué comprar, sí les doy reglas.

Mi sistema es comprar acciones que han caído en desgracia y que creo que tienen un 50% de posibilidades de quebrar.

Las empresas rechazadas por Wall Street a menudo pueden terminar con mejor rendimiento del esperado, y el precio de las acciones sube si la empresa supera las bajas expectativas de Wall Street. Es muy arriesgado, lo admito, pero creo que es mejor que ser parte de la manada que sigue a los gurús de la televisión, o comprar una acción después de un rendimiento espectacular.

Siempre estoy feliz de hablar de mis ganadores, como Priceline (ahora Booking), IBM, y más recientemente GE (hasta ahora, al menos), aunque convenientemente bloqueo mis compras de United Airlines, Delta Airlines, Eastman Koda, y otras que no lo lograron o se ven con muy pocas perspectivas.

¿Cuál ha sido el resultado? En mi mente emocional, el apostador me convence de que he conseguido el botín del mercado con los retornos que he recibido. No me importa lo que diga mi mente lógica porque, ya sabes, se supone que esto sea divertido. Podría fácilmente volver y comparar mi rendimiento con el del mercado, pero ¿por qué hacer eso? Prefiero no arruinar mi fiesta.

¿Qué significa esto para el apostador que hay en ti?

Mi mente emocional está en el asiento del conductor de mi cartera de apuestas. Esa cartera se invierte en una estrategia que creo que ganará con la compra de acciones individuales de alto riesgo que Wall Street no quiere.

A mi cartera total la llamo "estrategia de base y casino". La parte de la base está en los fondos indexados lógicos, aburridos y que cubren todo el mercado. La parte del casino consiste en acciones de riesgo que escojo con el lado emocional de mi cerebro, o el enfoque del apostador. Viva Las Vegas.

Mark Twain comentó una vez que las reglas que lo llevaron a los 70 años matarían a cualquier otra persona. Estas son las reglas que funcionan para mí. Pueden ser demasiado arriesgadas para ti, o incluso no lo suficientemente arriesgadas. Pero la regla que siempre debes recordar es la regla número uno: apostar es apostar; ya sea en inversiones o en blackjack, solo apuesto lo que puedo permitirme perder, por lo general, menos del 5% de mi cartera.

Alan Roth es fundador de Wealth Logic, una empresa de planificación financiera por hora con sede en Colorado Springs, Colorado. Ha dado clases sobre inversiones y finanzas en universidades y ha escrito para la revista Money, el Wall Street Journal y otras publicaciones. Sus contribuciones no representan consejos específicos de inversión.

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