Las estafas a los consumidores a través de mensajes de texto se han convertido en una epidemia. Y ahora el Gobierno está tomando medidas importantes para eliminar esta amenaza.
En una decisión unánime anunciada el 16 de marzo, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) adoptó sus primeras normativas que tienen como objetivo eliminar los mensajes de texto automatizados. En particular, quiere acabar con el tipo de mensajes que buscan engañar a los consumidores para que hagan clic en enlaces que pueden tener resultados tanto desastrosos como costosos.

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La agencia exige que las compañías de telefonía móvil bloqueen los mensajes de texto que provienen de números de teléfono ilegítimos, los cuales pueden aparecer como números inactivos móviles o fijos, e insta a las compañías a buscar otras maneras de acabar con ellos.
“Los estafadores han descubierto que enviarnos mensajes sobre un paquete que nunca pedimos o un pago que nunca se realizó, junto con un enlace a un sitio web sospechoso, es una manera rápida y fácil de que nuestros dispositivos nos llamen la atención y caigamos presa del fraude”, mencionó en un comunicado la presidenta de la FCC, Jessica Rosenworcel. “Estos mensajes de texto automatizados ocasionan un desastre en nuestros teléfonos; reducen la confianza que tenemos en una manera poderosa de comunicarse. Así que hoy damos nuestro primer paso para detener estos mensajes de texto no deseados a nivel red”, dijo.
En su propia declaración, Geoffrey Starks, comisionado de la FCC, señaló por qué estas estafas a través de mensajes de texto con frecuencia son eficaces.
“Los mensajes de texto automatizados son diferentes a las llamadas automatizadas”, dijo. “Los destinatarios de una llamada automatizada tienen la capacidad de decidir contestarla o no. Sin embargo, en la mayoría de los dispositivos, los destinatarios de un mensaje automatizado inmediatamente ven al menos parte del mensaje no deseado, lo que los expone —y potencialmente atrae— al peligro”.