Medicare amplía sus servicios especiales para incluir a las personas con insuficiencia renal
Cubrirán la mayoría de los costos sin importar la edad, desde diálisis hasta trasplantes.
In English | Además de la cobertura tradicional que ofrece Medicare a la población de 65 años o más y a las personas con discapacidades, el programa extiende los servicios especiales para cubrir a quienes padecen de insuficiencia renal terminal, sin importar su edad.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se estima que 30 millones de personas tienen insuficiencia renal crónica, una enfermedad en la que los riñones están dañados y no pueden filtrar la sangre como deberían. Cuando la enfermedad progresa y fallan los riñones, los pacientes necesitan una de dos cosas para sobrevivir: una filtración por máquina (diálisis) o un trasplante de riñón.
Los pacientes de 65 años o más que cumplen con los requisitos de Medicare se inscriben automáticamente para recibir beneficios de cuidados del riñón. Los pacientes jóvenes necesitan suficientes créditos de historial laboral (en inglés) basados en su edad para poder recibir beneficios de Medicare ESRD (por enfermedad renal terminal). Si no cumplen con los requisitos, algunos estados ofrecen apoyo para ayudar a pagar los tratamientos de diálisis.
En el caso de los beneficiarios nuevos, los beneficios de Medicare ESRD empiezan durante los primeros meses de cuidados para insuficiencia renal y se basan en el plan de tratamiento de cada persona. Por ejemplo, la cobertura para diálisis en el hogar empieza antes de la diálisis en los hospitales o clínicas ambulatorias, y suele terminar unos 12 meses después de que se termine la diálisis. Las personas de nueva inscripción que reciban trasplantes de riñón obtienen beneficios de Medicare aproximadamente cuando ingresan al hospital para su cirugía, y la cobertura, que incluye medicamentos inmunodepresores, termina 36 meses después del trasplante.
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Como cada caso es único, Casey Schwarz, asesora sénior del Medicare Rights Center (MRC), recomienda que los pacientes con enfermedad renal terminal se comuniquen con su oficina local del Programa Estatal de Asistencia con el Seguro de Salud (SHIP). También pueden llamar a la línea nacional de ayuda del Medicare Rights Center al 800-333-4114 para comprender mejor cada opción de cobertura.
La insuficiencia renal crónica es más común entre adultos mayores, especialmente los que tienen diabetes o hipertensión, pero podría no detectarse por su ausencia de síntomas. De hecho, según los CDC, el 48% de las personas con función renal gravemente reducida, quienes no reciben diálisis, no saben que tienen una enfermedad renal.
Holly Mattix-Kramer, nefróloga y presidenta de la National Kidney Foundation, dice que "los costos suben y suben a medida que la insuficiencia renal empeora", por lo cual el Congreso introdujo Medicare ESRD hace casi 50 años, cuando la diálisis solo era una opción para quienes podían pagarla.
Hoy en día, unas 100,000 personas al año empiezan con la diálisis, un tratamiento que cuesta aproximadamente $90,000 anuales por paciente, según Mattix-Kramer.
Más del 90% de las personas con insuficiencia renal tienen Medicare. En el 2016, el tratamiento para los beneficiarios con insuficiencia renal en etapa terminal costó $35,000 millones.
Es importante diagnosticar la nefropatía pronto para poder evitar que progrese a insuficiencia renal, dice Mattix-Kramer, y para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, la causa más común de muerte entre las personas que reciben diálisis.
Dice que "los pacientes deben preguntarles a los médicos 'Oiga, doctor, ¿cómo están mis riñones?'". "Si se detecta pronto, podremos educar a los pacientes sobre cómo cambiar su dieta, cómo tomar su medicamento de manera correcta y cómo mantener su presión arterial bajo control (o mantener su diabetes bajo control, si padecen de esta enfermedad), y cómo evitar ciertos medicamentos de venta libre muy comunes que pueden empeorar las enfermedades renales".
Según el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales, más de 661,000 personas en el país tienen insuficiencia renal. Las enfermedades renales ocupan el noveno lugar entre las causas principales de muerte en Estados Unidos.