Las olas de calor pueden ser perjudiciales para el corazón

“Y, lamentablemente, en estos días es mucho más común cuando tienes la confluencia de incendios forestales y altas temperaturas”, dice el Dr. Sanjay Rajagopalan, profesor en la Facultad de Medicina de la Universidad Case Western y jefe de Medicina Cardiovascular en University Hospitals Harrington Heart & Vascular Institute.

Cuando se trata de un derrame cerebral, los estudios sugieren que las temperaturas extremas —tanto calientes como frías— pueden aumentar el riesgo. Además, la investigación presentada en la Conferencia Internacional sobre Accidentes Cerebrales del 2020 de la American Stroke Association encontró que los picos de temperatura pueden influir en la gravedad de los derrames cerebrales. Los investigadores descubrieron (en inglés) que por cada aumento de 9 grados en el rango de temperatura promedio durante tres días, la gravedad de los derrames cerebrales aumentó un 67%.

Los riesgos de estos eventos cardiovasculares relacionados con el calor no son los mismos para todos. Las precauciones son especialmente importantes para las personas con una enfermedad cardíaca subyacente, presión arterial alta u obesidad. Las personas que no tienen acceso a aire acondicionado y a un refugio durante los días de mucho calor también corren un mayor riesgo, dice Rajagopalan.

Mantente seguro cuando hace calor

La conclusión, dice Rajagopalan, es ser consciente del riesgo para poder minimizarlo. “Muchas personas no reconocen que esto podría poner en peligro la vida”, dice.

Encuentra un lugar fresco para pasar los días calurosos, ya sea en casa o en un refugio frío cercano. (Encuéntralos en el National Center for Health Housing —en inglés, según el estado.

“Estar en un entorno donde las temperaturas están reguladas es de suma importancia”, dice Rajagopalan. Además, hacer funcionar el aire acondicionado durante días de calidad del aire poco saludables puede ayudar a filtrar los contaminantes y reducir la cantidad de partículas dañinas en el aire que respiras.

Algunos consejos adicionales:

Controla el tiempo. Si tienes que salir en el calor, intenta salir temprano o tarde del día cuando el sol no sea tan fuerte. Y no tengas miedo de tomar descansos regulares: Encuentra algo de sombra y descansa un poco. En algunas zonas del país, las temperaturas son altas incluso por la noche. En esos días, minimiza todo tu tiempo afuera, dice Best.

Mantente hidratado. Algunas personas con enfermedades cardiovasculares están acostumbradas a que les digan que vigilen su ingesta de líquidos y no lo exageren, dice Harzand. “Pero la hidratación es importante”, agrega. Las personas con presión arterial alta e insuficiencia cardíaca que son sensibles a los líquidos deben hablar con sus médicos sobre las mejores maneras de mantenerse hidratadas en los días calurosos.

Vístete para el calor. Usa ropa ligera y de color claro, dice Harzand. Y no te olvides de las gafas de sol, un sombrero y protector solar.

No dejes de tomar tus medicamentos. “No intentes hacer cambios en tus medicamentos porque crees que es mejor o más seguro no tomar ciertas medicinas cuando sales”, dice Harzand. Si tienes alguna preocupación sobre tu régimen de medicamentos y el calor, habla con tu médico.

Presta atención a las señales de advertencia de enfermedades causadas por el calor. Los adultos mayores se encuentran entre quienes tienen un mayor riesgo de contraer enfermedades relacionadas con el calor. Los signos de agotamiento por calor incluyen sudor intenso, piel fría y pegajosa y debilidad, entre otros. Los síntomas de la insolación incluyen piel roja, caliente y seca (sin sudoración); un pulso rápido y fuerte; confusión, mareos y náuseas; y un dolor de cabeza punzante.