Vida Sana
Ha pasado alrededor de un año desde que la famosa cantante Céline Dion (en inglés) reveló que le diagnosticaron un trastorno neurológico poco común conocido como síndrome de la persona rígida. Y ahora, su hermana está dando una actualización sobre su salud.
En una entrevista (en inglés) reciente con la publicación francesa 7 Jours, Claudette Dion dijo que la artista ganadora de premios Grammy ya no tiene control de sus músculos. “Lo que me duele es que siempre ha sido disciplinada. Siempre trabajó duro”, dijo Claudette en la entrevista.
Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.
Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
En diciembre pasado, Dion habló de su diagnóstico en un video emocional publicado en Instagram, donde la cantante explicó que había estado luchando con problemas de salud durante un tiempo, incluidos espasmos musculares graves y persistentes que interferían en sus actuaciones.
“Lamentablemente, los espasmos afectan todos los aspectos de mi vida diaria; a veces causan dificultades cuando camino y no me permiten usar las cuerdas vocales para cantar como estoy acostumbrada”, dijo Dion en el video.
Según los Institutos Nacionales de la Salud (NIH), los espasmos musculares son un síntoma común del síndrome de la persona rígida, que también tiene características de una enfermedad autoinmunitaria, y se calcula que afecta a menos de 5,000 personas en el país.
“Por alguna razón, el cuerpo comienza a luchar contra sí mismo de forma similar a una respuesta autoinmunitaria y ataca los nervios en los músculos, lo que hace que [los músculos] se vuelvan más sensibles, hiperactivos y rígidos”, explica el Dr. Desimir Mijatovic, especialista en dolor de Cleveland Clinic.
Los músculos del tronco y el abdomen suelen ser los primeros en volverse rígidos, según Cleveland Clinic. Los músculos de las extremidades, incluso los de la cara, también pueden verse afectados. Según las áreas del cuerpo afligidas, “puede ser difícil desplazarse”, dice Mijatovic, “así que esto puede causar muchos problemas para las personas en su vida diaria”.
Los estímulos como el ruido, el estrés y el tacto pueden provocar un espasmo en los músculos rígidos. (Estos espasmos también pueden ocurrir sin motivo). Algunas personas experimentan espasmos tan graves que la fuerza generada puede fracturar un hueso o hacer que se caigan, dicen los NIH.