Javascript is not enabled.

Javascript must be enabled to use this site. Please enable Javascript in your browser and try again.

Skip to content
Content starts here
CLOSE ×

Buscar

Leaving AARP.org Website

You are now leaving AARP.org and going to a website that is not operated by AARP. A different privacy policy and terms of service will apply.

Cómo hacer que los adolescentes participen en el cuidado familiar

Los hijos pueden aprender lecciones de vida valiosas al ayudar, pero sus necesidades también importan.


spinner image Un adolescente ayuda a su abuelo a usar un teléfono inteligente.
SALLY ANSCOMBE

 

Según las respuestas a la Encuesta de preferencias de AARP 2021 sobre hogar y comunidad, cerca de tres cuartas partes de los adultos de 50 años o más dicen que prefieren quedarse en sus casas o comunidades el mayor tiempo posible. Sin embargo, cuando requieren un mayor nivel de cuidados, la mayoría de estos adultos mayores se mudan con sus hijos adultos (o viceversa) para recibir los cuidados que necesitan.

spinner image Image Alt Attribute

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP

Si tienen nietos, hay maneras de involucrarlos en el cuidado en el hogar, y los adolescentes pueden contribuir de manera especial. Las siguientes son algunas formas de hacer que tus adolescentes participen en el cuidado familiar mientras respetas sus necesidades.

Conducir

Los adolescentes que tienen una licencia de conducir y acceso a un auto pueden ser de gran ayuda como conductores. Aunque un adulto tal vez tenga que acompañar a los abuelos a las citas médicas, los adolescentes pueden ayudar a los padres al hacer otros trámites como ir al supermercado, recoger los medicamentos o el pedido para llevar de un restaurante.

Maribel Jimenez, peluquera de Milwaukee, mudó a su familia a vivir con su madre hace dos años, ya que era poco prudente que esta siguiera viviendo sola por su demencia. La hija de 17 años de Jimenez la ayuda llevando y recogiendo a sus hermanos menores (de 9 y 15 años) a la escuela y las clases de baile y fútbol. Jimenez explica lo esencial que ha sido su hija desde que obtuvo su licencia de conducir el año pasado: "He tenido que trabajar horas adicionales en el trabajo, y soy la única que puede llevar a mi madre a sus citas, por lo que necesito que mi hija me ayude con la transportación".

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

Cocinar

Los adolescentes pueden ayudar en la cocina al preparar comidas simples para ellos, sus hermanos y abuelos. Jimenez dice que cuando trabaja por las noches, sus dos adolescentes se encargan de cocinar y les preparan cenas simples como espaguetis, huevos revueltos, arroz instantáneo y sándwiches de queso a la parrilla a su abuela y hermano menor.

Trabajo y empleos

Lista de empleos, de AARP

Busca oportunidades de empleo para trabajadores con experiencia

See more Trabajo y empleos offers >

Un preadolescente que aún no se sienta cómodo usando la estufa solo, puede ayudar al preparar sándwiches, cereales, batidos y copas de yogur, o calentar sopas y comidas congeladas en el microondas. Si los abuelos pueden preparar sus propios sándwiches o servirse el cereal, pero tienen dificultad al moverse en la cocina, los nietos pueden llevarles los ingredientes a la mesa, lo cual minimiza su trabajo mientras ayudan a mantener la independencia del abuelo.

Hacer tareas domésticas

Para que el cuidador adulto tenga tiempo de realizar las tareas de cuidado más largas, complicadas o íntimas que no son apropiadas para los ayudantes menores, los adolescentes pueden hacer una mayor parte de las tareas domésticas. Por ejemplo, la mayoría de los adolescentes pueden ayudar a barrer, pasar la aspiradora, sacar la basura, caminar al perro, vaciar el lavaplatos, doblar la ropa recién lavada, palear la nieve, y cortar el césped o rastrillar las hojas. Al principio, los adolescentes de Jimenez se quejaban de tener que hacer tareas adicionales en la casa. Sin embargo, "cuando crecieron y comenzaron a darse cuenta de lo mucho que sufría su abuela", dejaron de quejarse sobre prepararle las comidas y ayudarla a vestirse, dice.

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

Ayudar con la tecnología

A menudo, los adolescentes son un gran recurso para usar la tecnología de prestación de cuidados como las aplicaciones móviles, los monitores y los altavoces inteligentes. Si se toma en cuenta que los adolescentes suelen ser más diestros con la tecnología que las personas mayores, hacer que estos cuidadores menores monten, controlen y vigilen estos dispositivos es una gran manera de involucrarlos. Si no quieres que supervisen los recordatorios digitales de medicamentos, deja que ayuden a un abuelo a escoger y escuchar un pódcast, iniciar sesión en un grupo de conversación virtual, o buscar y unirse a una clase de acondicionamiento físico en línea.

Incluso cuando los abuelos saben usar sus teléfonos inteligentes y tabletas, los botones pequeños o los temblores de manos podrían ser un obstáculo. Si ese es el caso, los adolescentes pueden ayudar al abuelo a buscar un contacto, enviar un mensaje de texto, escuchar un mensaje de voz o verificar un evento en el calendario. Jimenez dice que regularmente, "mis dos hijas ayudan a su abuela a hacer y contestar llamadas, y leer y responder mensajes de texto en su celular".

Hacer que los adolescentes se sientan apreciados

Algunos adolescentes podrían comenzar a resentir la atención que reciben los abuelos y el tiempo dedicado a las tareas de cuidado. Por tal razón, los padres deberían dedicarle tiempo a cada hijo y conservar las tradiciones familiares, dice Barry Jacobs, columnista de aarp.org y psicólogo clínico. Las costumbres de la familia deberían conservarse incluso luego de que un abuelo se muda al hogar, no importa si se trata de comer tacos los martes en tu restaurante favorito, ir al cine un viernes en la noche o ver el partido de fútbol americano un domingo en el hogar.

Es natural y de esperarse que los adolescentes tengan responsabilidades del hogar y la familia, dice Mayra Mendez, una psicoterapeuta con licencia y coordinadora del programa para personas con discapacidades intelectuales y del desarrollo y servicios de salud mental del Providence Saint John's Child and Family Development Center en Santa Mónica, California. Según Mendez, si un adolescente recibe acceso al auto familiar a cambio de hacer mandados o dinero por ayudar en la casa, esto no es una recompensa por asumir responsabilidades familiares. Los adolescentes, dice, deben entender la importancia de "brindar cuidados, comportarse de forma cívica y ser serviciales hacia los demás sin la expectativa subyacente de una recompensa o algún beneficio".

Cassandra Brooklyn es una escritora colaboradora que se especializa en temas de viajes, la prestación de cuidados e historias de interés humano. Sus trabajos han aparecido en The New York Times, Wall Street Journal, TIME y National Geographic, entre otros.

Discover AARP Members Only Access

Join AARP to Continue

Already a Member?

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.