La mayoría de los conductores no piensan en los faros de su auto. Se suben al vehículo, lo encienden y empiezan a conducir.
Pero los faros son un elemento esencial para la seguridad, afirma David Aylor, vicepresidente de pruebas de seguridad activa en el Insurance Institute for Highway Safety (IIHS, Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras) en Ruckersville, Virginia. De hecho, aproximadamente la mitad de las muertes causadas por accidentes viales en Estados Unidos ocurren cuando está oscuro o a la hora del anochecer o amanecer.

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“Conducir un auto es aproximadamente tres veces más riesgoso de noche. Por eso los faros son sumamente importantes, para que los conductores puedan ver bien el camino y percatarse de situaciones peligrosas”, indica Aylor. “Si tus faros no ofrecen suficiente visibilidad, puede ser que no tengas suficiente tiempo para reaccionar ante una emergencia y aplicar los frenos”.
La visión nocturna se deteriora con la edad. Un conductor de 50 años, para poder ver bien, podría necesitar dos veces más luz que una persona de 30 años, según el National Safety Council. La percepción de profundidad, la visión periférica y el reconocimiento del color también pueden verse comprometidos cuando está oscuro. Por lo tanto, es esencial verificar que los faros de tu auto funcionen debidamente.
¿Funcionan adecuadamente los faros del auto?
En una investigación realizada en el 2021 por el Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS) se reveló que, aunque los faros de mayor calidad pueden ayudar a prevenir los accidentes automovilísticos por la noche, muchos autos no emiten suficiente luz sobre la vía, y la mayoría de los conductores ni siquiera lo notan. El Gobierno federal no ha actualizado sus normas sobre los faros desde fines de la década de 1970, cuando los autos estadounidenses tenían faros de vidrio de tamaño estándar y de forma redonda o cuadrada, según Aylor.
A mediados de los años ochenta, comenzaron a aparecer los faros personalizados con bombillas reemplazables. Desde entonces, la tecnología reflectante ha cambiado con la aparición de luces halógenas y LED. Hoy en día, la intensidad y dirección de los faros varían enormemente, porque los fabricantes emplean distintos tipos de bombillas y sistemas de direccionamiento diferentes.
Cuando el IIHS inició sus pruebas de faros en el 2015, los resultados fueron asombrosos: después de evaluar más de 80 sistemas de faros en 31 autos medianos, el IIHS calificó de “bueno” solo uno de ellos, según Aylor.
“Otorgamos calificaciones de bueno, aceptable, marginal y malo. En los primeros años de nuestras pruebas, más del 50% de los faros vehiculares recibieron una calificación de malo”, afirma.
En sus pruebas de la resistencia del auto en caso de choque, el IIHS también evalúa el rendimiento de los faros en tramos rectos y curvas. Se mide la distancia que los faros alcanzan a iluminar sobre el camino, y se determina si emiten un resplandor para los vehículos que se aproximan.
“Los ojos de los conductores mayores no se ajustan tan rápidamente cuando pasan desde un entorno de poca luz hasta otro de mucha luz. Por eso el resplandor puede ser más problemático para ellos y queremos asegurar que los faros ofrezcan una buena visibilidad sin causar resplandor”, dice Aylor.