¿Quieres un delineado de gato? ¿Pómulos esculpidos? ¿Cejas repobladas con maquillaje semipermanente? Las mujeres de más de 50 años recurren a los tutoriales de maquillaje de YouTube y TikTok para actualizar su aspecto. Pero ten cuidado: los videos de moda ignoran realidades como los párpados caídos y flácidos, las manchas marrones y las arrugas. ¿Confundida sobre qué hacer y qué no hacer? A continuación, encontrarás consejos de los maquilladores profesionales Sandy Linter (que trabaja con las glamurosas Christie Brinkley y Elizabeth Hurley) y Nick Lujan, director de arte y formación de Kevyn Aucoin Beauty, y, por supuesto, mis consejos como redactora de temas de belleza. Hazle un favor a tu cara y evita:
1. Unas cejas dramáticas repobladas con "Microblading"
Todo se trata de las cejas, ¿verdad? El "microblading", una forma de maquillaje tatuado semipermanente, crea unas cejas dignas de Instagram en dos horas. Sin embargo, estás a merced de la habilidad, el gusto y la experiencia del técnico. Muchas cejas tatuadas son demasiado oscuras, demasiado gruesas o muy arqueadas, por lo que les da un aspecto caricaturesco o teatral a los rostros maduros. "Las cejas demasiado oscuras envejecen, así que busca un estilo y un color naturales", dice Linter. "A veces, el técnico oscurece demasiado las cejas y afirma que así durarán más, pero cuando las nuevas cejas se desdibujan (y lo harán) es fácil retocarlas a diario con maquillaje para cejas porque la forma permanece como guía". Comprueba las fotos del antes y el después de los clientes de más de 50 años y pide que te marquen con un lápiz la forma y el color de las cejas que quieres para verlas antes de acceder a que te las tatúen con tinta.
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2. Elegir el color de base equivocado
A pesar de las amplias gamas de tonos, muchas mujeres mayores acaban con un maquillaje facial demasiado rosado o de un color que no combina bien con su tez. Los cuestionarios de tonos en línea, las muestras y las guías de subtonos no hacen más que aumentar la confusión, ya que los rostros maduros suelen tener varias tonalidades debido a la edad y a los daños causados por el sol. Hay dos trucos infalibles que te ayudarán a conseguir una combinación favorecedora para tu piel. En primer lugar, opta por un tono más cálido o más oscuro de lo que normalmente elegirías. (Los nombres de tonos que incluyen las palabras cálido, dorado, caramelo o miel son una pista). Esto contrarrestará inmediatamente cualquier enrojecimiento natural de la piel (desde la rosácea hasta los capilares rotos) y aporta un aspecto más saludable a la piel pálida, cenicienta, estresada o dañada por el sol. Si tu cuerpo es más oscuro que tu rostro (incluso un poco), aplica esa nueva base cálida en la parte superior del pecho, no en la línea de la mandíbula, para conseguir un tono uniforme y continuo que funcione con los escotes desnudos.
3. Usar demasiado corrector
El corrector es uno de esos productos esenciales de los que las mujeres no pueden prescindir. Puede eliminar eficazmente las ojeras y el aspecto de fatiga, pero el color o la aplicación incorrectos también pueden empeorar las cosas. "Usar demasiado corrector muestra lo que intentas ocultar", dice Linter. "No necesitas más corrector, sino la textura, la colocación y el matiz correctos". Opta por uno de textura sedosa y luminosa como el corrector e.l.f. Hydrating Camo Concealer ($7, target.com), el L’Oréal Paris Age Perfect Radiant con suero hidratante ($15, cvs.com) o el Kevyn Aucoin The Etherealist Super Natural Concealer ($30, kevynaucoinbeauty.com). Aplícalo poco a poco y difumínalo a medida que lo extiendes, comenzando por la parte interior del ojo, donde las decoloraciones son más oscuras (no en la forma habitual de media luna debajo el ojo). Puedes añadir más si lo necesitas. "Siempre debes aplicar primero la base de maquillaje", señala Lujan. "Verás que necesitas menos corrector".
4. Contornear el rostro
Sombrear el rostro para crear un aspecto más cincelado es algo nuevo en la era de los selfis y de Kim Kardashian, pero es algo muy conocido por las mujeres de más de 50 años que recuerdan los polvos moldeadores beige y marrones de los años 60, 70 y 80. Pero lo que se ve bien en las fotos y en las redes sociales, a menudo es excesivo en la vida real. En vez de contornearte la cara, usa el bronceador y el rubor para preparar la piel y realzar sutilmente tu estructura ósea. Linter dice que el bronceador "es muy valioso para quienes quieren conseguir un aspecto bronceado ahora que las mujeres usan un protector solar con un alto FPS a diario". Usa un bronceador como el Fenty Beauty by Rihanna Sun Stalk'r Instant Warmth Bronzer ($34, ulta.com) para conseguir un efecto soleado y bronceado en los pómulos, la frente y el puente de la nariz. Aplica un rubor como el Jones Road Beauty Lip and Cheek Stick ($34, jonesroadbeauty.com) o el Jaclyn Cosmetics Rouge Romance Cream Blush Stick ($22, ulta.com) en un tono claro rosa, coral o frambuesa para avivar tu rostro y darle un aspecto fresco y saludable. Y sí, puedes optar por uno u otro o poner el rubor sobre el bronceador. Sea cual sea tu elección, mantén el color en la parte alta del pómulo para conseguir una suave elevación visual.
5. Resaltar los ojos y los labios
Resístete a maquillarte la cara entera, los ojos con efecto ahumado y los labios demasiado coloridos como lo sugieren muchos tutoriales. Se ve exagerado y "pintarrajeado" en mujeres de 50 años o más. El maquillaje es una oportunidad para quererte a ti misma y encontrar lo positivo en tu belleza, así que elige los ojos o los labios... no ambos. "Cualquiera que elijas destacar con el maquillaje, ojos o labios, debe ser tu mejor rasgo", dice Linter. Si los labios rojos son tu punto focal, opta por un maquillaje de ojos neutro y discreto; si tus ojos son la "estrella", dramatízalos con delineado y sombra, y mantén el color de los labios tenue y neutro.
6. No difuminar lo suficiente
Casi cualquier mujer de más de 50 años que se maquille tiene (o debería tener) un espejo de aumento. Hay momentos en que el espejo es esencial, como al aplicarse el delineador de ojos, camuflar una mancha marrón o un granito, o depilarse un pelo aislado en la barbilla. Uno de los errores que cometen las mujeres es no comprobar su aspecto mirándose de perfil también en un espejo de mano donde pueda verse la cara completa. Incluso el maquillaje más espectacular fracasa cuando se descuida el difuminado de los bordes de la base de maquillaje en los límites del rostro, la línea de la mandíbula y las orejas. Tampoco se debe ver dónde termina el rubor, el bronceador, la sombra de ojos o el maquillaje de cejas. Difumina, comprueba, vuelve a difuminar y haz una última comprobación a la luz del día frente a una ventana.
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