Skip to content
 

La inversión de AARP en la investigación sobre la demencia continúa dando sus frutos

Tres años después, el fondo Dementia Discovery Fund respalda a 18 compañías que buscan tratamientos.

Una mano con guante sostiene un tubo de ensayo, al fondo se ven radiografías cerebrales

WESTEND61/GETTY IMAGES

In English | En un laboratorio en el sur de San Francisco, no lejos del aeropuerto, un pequeño equipo de científicos trabaja en lo que podría ser un gran avance en el tratamiento de la demencia y otras enfermedades cerebrales. 

Están enfocados en la fibrina, una proteína que participa en la formación de coágulos de sangre. Es muy bueno tener fibrina en caso de sufrir un raspón en la rodilla, pero si la proteína se filtra a través de la barrera que separa la sangre del cerebro —como puede ocurrir en las personas con demencia—, genera un nivel tóxico de inflamación que destruye las conexiones entre las neuronas, las células responsables de enviar y recibir información. Esta catastrófica cascada de eventos lleva al deterioro cognitivo (pérdida de memoria, confusión, dificultad para pensar), que es una característica común en  las enfermedades neurodegenerativas, incluidas la enfermedad de Alzheimer y la esclerosis múltiple.

Pero la neurocientífica Katerina Akassoglou ha identificado una manera de detener las consecuencias de la fibrina: un anticuerpo que, sin comprometer las propiedades de coagulación de la fibrina, puede impedir que la proteína cause inflamación. 


Ahorra un 25% el primer año cuando te unes a AARP con opción de renovación automática. Obtén acceso al momento a descuentos, programas, servicios y toda la información que necesitas para mejorar tu calidad de vida. 


“No es esa estrategia de acabar con todo de un golpe. No se trata de un inmunosupresor global tal como se ve en muchas otras estrategias para tratar la inflamación”, dice Dan Burgess, presidente y director ejecutivo de Therini Bio, la pequeña empresa con sede en San Francisco que promueve el trabajo de Akassoglou.

Y, hasta ahora, las cosas parecen prometedoras. El anticuerpo de Akassoglou redujo la inflamación cerebral y la pérdida de memoria en las pruebas de la enfermedad de Alzheimer en ratones. Ahora, los científicos de Therini Bio están trabajando en una versión para humanos que pueda lograr los mismos resultados.

AARP invierte en el futuro de los tratamientos para la demencia

Therini Bio es una de varias empresas que se enfocan en la inflamación como objetivo para tratar la demencia, una enfermedad que afecta a 50 millones de personas en todo el mundo. El creciente interés en ese enfoque ha sido parte de un mayor esfuerzo de los investigadores por ampliar la red de búsqueda de terapias contra la demencia luego de décadas de ensayos de medicamentos que no tuvieron éxito. Si bien hay medicamentos en el mercado que pueden ayudar temporalmente con los síntomas de la demencia —y uno que potencialmente podría retrasar la progresión de la enfermedad de Alzheimer, la forma más común de demencia—, hasta ahora nada puede revertirla ni curarla.

El Dementia Discovery Fund (DDF) ha tomado en serio esta misión. El grupo transatlántico de capital de riesgo invierte y crea empresas de biotecnología en etapa inicial que exploran terapias potencialmente revolucionarias para la enfermedad de Alzheimer y otras demencias. En el 2018, AARP invirtió $60 millones en el DDF para apoyar la búsqueda de tratamientos para la demencia y, en última instancia, el hallazgo de una cura.

“La necesidad es urgente. Son demasiadas las personas que se ven afectadas por las cargas físicas, emocionales y financieras de la demencia. Y con casi 10 millones de casos nuevos cada año en todo el mundo, ese número seguirá creciendo a menos que podamos encontrar tratamientos seguros y eficaces”, dijo Scott Frisch, vicepresidente ejecutivo y director de operaciones de AARP. “La inversión de AARP ayuda a asegurar que no quede piedra sin remover en la búsqueda de una cura”. 

Financiación de la lucha contra la demencia

Estas 18 empresas en Estados Unidos y el Reino Unido reciben actualmente apoyo financiero y de otro tipo del Dementia Discovery Fund (DDF). AARP invirtió $60 millones en el DDF en el 2018.

  • Alchemab Therapeutics
  • Alector
  • Amathus Therapeutics
  • AstronauTx
  • Autifony Therapeutics
  • Bicycle Therapeutics
  • Caraway Therapeutics
  • Cerevance
  • Cumulus Neuroscience
  • Evelo Biosciences
  • LoQus23 Therapeutics
  • Nitrome Biosciences
  • QurAlis
  • Ribometrix
  • Therini Bio
  • Tiaki Therapeutics
  • Transine Therapeutics
  • Transposon

Fuente: Dementia Discovery Fund (en inglés)

La cartera del DDF ha aumentado desde la creación del fondo en el 2015. Se ha invertido dinero para crear ahora una cartera que cuenta con 18 empresas —algunas de las cuales han sido creadas desde cero por el DDF, como Therini Bio— que están trabajando en 40 estrategias diferentes de tratamiento para la enfermedad de Alzheimer, la demencia frontotemporal, la enfermedad de Parkinson y otras formas de demencia.

“Pienso que debemos recordar que la demencia no es solo una enfermedad, sino un término que describe una gran variedad de enfermedades con deterioro cognitivo”, dice Laurence Barker, asociado con el DDF. Y el tratamiento de estas enfermedades “requerirá estrategias que se enfoquen en múltiples áreas diferentes de la biología”, agrega.

Por ejemplo, las empresas bajo el paraguas del DDF están trabajando en nuevos tratamientos terapéuticos que tienen como objetivo eliminar componentes tóxicos en el cerebro que causan neurodegeneración, o atacar las enzimas que participan en la progresión de la demencia. Una estrategia espera cambiar el curso de las enfermedades manipulando el ARN (ácido ribonucleico), una molécula involucrada en la producción de proteínas. Cualquiera de las estrategias, o todas ellas, podrían contener las respuestas para acabar con la enfermedad de Alzheimer y otras demencias.

“En el espacio de la enfermedad de Alzheimer, no se trata de un proceso de una sola enfermedad; es una serie de enfermedades diferentes, similar a los cánceres. Por eso es poco probable que haya un solo agente que vaya a resolver la enfermedad de Alzheimer. Van a ser terapias individualizadas, o al menos una serie de terapias para diferentes segmentos de la población”, dice Burgess, de Therini Bio. 


Recibe contenido similar, suscríbete a nuestro Boletín


El progreso estimula a los investigadores de la demencia

Ha habido un aumento del interés en las investigaciones sobre la demencia últimamente. Los resultados positivos, si bien preliminares, de los ensayos clínicos han aumentado el entusiasmo, y también lo ha hecho la reciente aprobación por parte de la FDA de un fármaco antiamiloide. Las placas amiloides son un sello distintivo de la enfermedad de Alzheimer; algunos expertos predicen (en inglés) que limpiar las pegajosas placas que se forman podría ser una manera de mantener intacta la cognición.

Y Barker ha visto este entusiasmo directamente: varias compañías farmacéuticas —entre ellas AbbVie, un gigante de la industria—, han dado pasos este último año para colaborar con las empresas de biotecnología más pequeñas que integran la cartera del DDF. 

“Creo que es un reconocimiento de que la ciencia en esta parte de la neurodegeneración está madurando, y aquí podría haber estrategias mejor validadas que podrían mostrar beneficios” en ensayos clínicos y más allá, dice Barker, quien, como muchos en el equipo de inversión del DDF, tiene experiencia en ciencias médicas.

Burgess anticipa que el anticuerpo de Therini Bio estará en ensayos clínicos para finales del 2022. Si resulta eficaz para frenar el daño cerebral causado por la demencia, podría convertirse en una herramienta más en la caja de herramientas de tratamientos prometedores.

“Creo que es un momento emocionante para trabajar en esta área, y ha sido maravilloso ver el mayor interés y entusiasmo por la neuroinflamación”, dice Burgess. “Y creemos que esta es una manera novedosa de abordar la neuroinflamación que podría ser no solo muy importante por sí misma, sino también un buen complemento para otras estrategias, dada la naturaleza única del mecanismo”. 

Rachel Nania se incorporó en el 2019 a AARP como reportera sobre temas de salud, después de trabajar varios años como periodista y editora radial en Washington D.C. Recibió los galardones "Gracie Award" en el 2018 y "Edward R. Murrow Award" (a nivel regional) en el 2019, y fue becaria de la National Press Foundation en el 2019 para realizar labores de información sobre la demencia.