Javascript is not enabled.

Javascript must be enabled to use this site. Please enable Javascript in your browser and try again.

Skip to content
Content starts here
CLOSE ×
Buscar
Leaving AARP.org Website

You are now leaving AARP.org and going to a website that is not operated by AARP. A different privacy policy and terms of service will apply.

¿Quién paga la cuenta en las citas románticas después de los 50?

El dinero puede ser un tema tabú y una fuente de tensión. Aquí te explicamos cómo decidir quién paga cuando te adentras de nuevo en el mundo de las citas.


Ilustración de una pareja mayor compartiendo un batido y los absorbentes forman un signo de dólar, contra un fondo rosado.
Kiersten Essenpreis

A los veintitantos años, es probable que tú y la persona con la que salías vivieran con ingresos limitados y no tuvieran problema en ir a una pizzería o hamburguesería cuando salían en una cita. Pero las citas después de los 50 años son otra historia. "Cuando las personas pasan de los 50, existe una gran división en los ingresos", dice Amy Morin, psicoterapeuta y autora de 13 Things Mentally Strong Couples Don't Do.

Algunas personas tienen todos sus ahorros de jubilación en orden, explica Morin, mientras que otras no han ahorrado nada; algunas están ayudando a sus hijos adultos económicamente, mientras que otras no tienen hijos ni muchas otras responsabilidades financieras.

spinner image Image Alt Attribute

Membresía de AARP: $15 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP

Y cuando se trata de ingresos discrecionales, cada persona es única en cómo (y con qué frecuencia) gasta su dinero, ya sea que le guste mimar a sus mascotas, salir a cenar varias veces a la semana o viajar por el mundo.

Esto no deja mucho espacio para incorporar cambios. "Las personas también son bastante inflexibles en cómo administran su dinero a esta edad", señala Morin. Es poco probable que un ahorrador, por ejemplo, se convierta de pronto en un derrochador y viceversa.

A continuación, cinco consejos para personas mayores sobre las conversaciones acerca de las finanzas en las citas románticas.

Aborden cuanto antes la decisión de quién pagará

Tradicionalmente, el hombre solía pagar en la primera cita, pero ese ya no es necesariamente el caso en la sociedad moderna. Las cosas cambian con cada generación, y las personas de 50 años en la actualidad podrían preferir pagar a medias", afirma el Dr. Stan Tatkin, un terapeuta matrimonial y familiar. Y mientras que algunas mujeres pueden sentirse halagadas si un hombre paga, Tatkin enfatiza que otras mujeres que han trabajado duro para establecerse en la vida pueden no querer que un hombre galante pague la cuenta a estas alturas de su vida.

¿Es una primera cita? Esto es lo que sugerimos. Si es una nueva relación o especialmente si se trata de una primera cita, la mejor manera de abordar la cuestión es ser directo y preguntarle a la otra persona qué es lo que prefiere. Cuando llegue la cuenta, pregunta, "¿Qué crees que deberíamos hacer?" o "¿Qué prefieres que hagamos?" sugiere Tatkin, quien también es el autor de Wired for Love.  

También puede ser una buena oportunidad para determinar tanto su generosidad como su posición económica, dice Holly Davis, una abogada especializada en derecho familiar y socia fundadora del bufete de abogados Kirker Davis. "Una buena manera de determinar cómo la otra persona aborda la equidad en una relación es viendo cómo se desenvuelven las negociaciones sobre 'quién paga la cuenta'".

Y si la persona dice, "Yo pagaré esta vez y tal vez tú puedas pagar la próxima", es probable que quiera que haya una próxima cita, añade Davis.

Si no quieres complicar las cosas y se trata de una cita casual, indica que quieres pagar la cuenta a medias, sugiere Davis.

Después de la tercera cita. Cuando una pareja lleva saliendo durante algún tiempo, no es raro que la persona que gana más dinero acabe pagando más a menudo. Y si la persona que gana más está acostumbrada a restaurantes de alto nivel, por ejemplo, entonces tiene sentido que cubra el costo, señala Katy Song, planificadora financiera principal en Domain Money, una empresa de planificación financiera con sede en Nueva York. Esto no ocurre solo al salir a cenar, añade, sino también al pagar por las vacaciones.

Otras parejas prefieren continuar dividiendo los costos a partes iguales o turnarse para pagar sin importar las diferencias financieras.

See more Salud y bienestar offers >

Saca el tema del pasado

Los hábitos monetarios pueden estar profundamente arraigados desde la infancia. Una buena manera de entender la filosofía financiera actual de alguien es preguntándole sobre su pasado.

"Hablen de cómo fueron sus vidas y de cómo se criaron, y sobre lo que aprendieron acerca del dinero", sugiere Sharon Lechter, coautora de Rich Dad, Poor Dad y How Money Works for Women. Esta es una excelente manera de iniciar el diálogo y hablar sobre los hábitos de gasto y ahorro, así como sobre la actitud general hacia el dinero de ambos. No es necesario tener exactamente los mismos hábitos monetarios para que una relación funcione, pero sí deben respetar y entender a su pareja, añade Song.

Planea una cena agradable, comparte una copa de vino con la otra persona y pregúntale: "¿Cómo administraban el dinero tus padres?".

Antes de comenzar esta conversación, dice Song, reflexiona sobre cómo manejas tus propias finanzas.

"Al entender los hábitos y la situación económica de tu pareja sin juzgar, disfrutarás más al explorar la novedad de compartir tu vida con otra persona en esta etapa, cuando te conoces mucho mejor que hace 20 años".

Compartan lo que les gusta hacer a ambos para divertirse

Pregúntale a tu posible pareja cómo pasa su tiempo libre y aprovecha esa oportunidad para obtener pistas sobre su estilo de vida. Esta puede ser una buena manera de evaluar cómo gasta su dinero y si tus prioridades monetarias son compatibles con las suyas, sugiere Lechter.

Por ejemplo, si alguien dice que va mucho a bares o que se toma una copa de vino todas las noches, puedes asumir que prioriza el gasto en alcohol. Si menciona pasatiempos costosos, como el golf, sabrás que le gusta invertir su dinero en jugar y quizás en membresías en clubs de golf. Y si habla de hacer viajes, entonces cabe suponer que viajar es una de sus formas favoritas de gastar.

Más allá del dinero, esta es también una oportunidad para ver si tienen intereses similares. Si tu posible pareja está obsesionada con el golf y tú no lo soportas, u odia viajar y esa es tu prioridad principal en la jubilación, entonces es posible que no sean compatibles. "Ser adaptable es una habilidad esencial en una relación, pero después de cumplir los 50, algunas personas se vuelven inflexibles", agrega Davis. "Las personas de más de 50 años pueden tener claro lo que les gusta y lo que no les gusta".

Discutan su futuro financiero, incluida la jubilación

Cuando eras más joven, no hubieras permitido que la relación se volviera más seria sin preguntar: "¿Quieres tener hijos?". Lo mismo ocurre con el dinero. En algún momento, si la relación avanza y consideran la posibilidad de vivir juntos o casarse, asegúrate de que tienen las mismas expectativas financieras.

"La mayoría de mis clientes en esta etapa de la vida están menos interesados en combinar finanzas si ambos trabajan", dice Song. Sin embargo, otros pueden querer seguir el camino tradicional. En cualquier caso, si la relación se vuelve seria, conviene saber lo que ambos opinan al respecto. "Decidir vivir juntos es un paso importante y puede ser más fácil si mantienen una discusión franca sobre las finanzas y se aseguran mutuamente de que cada uno tiene su situación financiera bajo control", agrega Song.

Y la mayor diferencia entre las conversaciones sobre dinero de los mayores de 50 años y las personas más jóvenes se reduce a un tema dominante: la jubilación, explica Davis. "No querrás estar en camino a cumplir los 60 con planes de recorrer el mundo y luego descubrir que tu pareja no quiere dejar de trabajar", advierte Song. "Este podría ser un gran obstáculo".

Hablen abiertamente sobre sus activos financieros y sus deudas

Todas las personas que se embarcan en una relación tienen una cartera financiera, y su situación económica puede ser buena, mala o intermedia. Es importante entender ese panorama financiero a medida que la relación progresa.

"Cada miembro de la pareja tendrá ciertos activos o deudas, puede que reciba una pensión, tal vez esté divorciado y tenga obligaciones, como la manutención de los niños", explica ella. Todos estos temas pueden causar estrés en una relación si no se discuten de antemano, señala Davis. Así que es importante hablar sobre ello y elaborar un plan para enfrentar esos obstáculos.  

Lechter comparte el siguiente ejemplo: si sales con alguien y recibes manutención conyugal y decides casarte, es muy probable que dejes de recibirla. En algunos casos la manutención puede terminar incluso si vives con alguien.

"Es muy importante entender la carga que cada uno trae a la relación, tanto en cuanto a los activos, las deudas y las restricciones causadas por las deudas, las obligaciones, las responsabilidades continuas y los matrimonios anteriores, dependiendo de la situación", explica Davis. El dinero, agrega, es una de las principales razones por las que las personas se divorcian, por eso es realmente importante ser abierto al respecto.

Unlock Access to AARP Members Edition

Join AARP to Continue

Already a Member?

spinner image Red AARP membership card displayed at an angle

Membresía de AARP: $15 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

spinner image Red AARP membership card displayed at an angle

Membresía de AARP: $15 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.