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¿Qué es la hipertensión de bata blanca?

El estrés relacionado con las citas médicas puede aumentar la presión arterial en el consultorio, ¿pero se están descartando estos resultados con demasiada rapidez?


Torso de un médico sosteniendo un monitor de presión arterial.
Collage de fotos: AARP (Fuente: Shutterstock; Getty Images)

Te diriges a hacerte tu chequeo médico anual. Te encuentras bien en general pero no has tenido tiempo hasta ahora para pensar en tu cita y no sabes qué esperar de tu médico. Llegas algo estresado, y después de que te miden apresuradamente la presión arterial, tu médico te dice que está elevada. Nunca te han dicho antes que tienes la presión arterial alta. ¿Qué está pasando?

Puede que estés experimentando lo que se conoce como "hipertensión de bata blanca" o "síndrome de la bata blanca", el fenómeno que se produce cuando la presión arterial es más elevada cuando la toma un médico —o cualquier profesional médico que lleve una bata blanca— en comparación con tus niveles típicos de presión arterial. ¿Qué puedes hacer al respecto, y cómo puedes saber si la presión arterial alta en el consultorio médico es temporal o tiene implicaciones más amplias?

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Para los pacientes que controlan de cerca su presión arterial, estas son algunas cosas que hay que tener en cuenta sobre la hipertensión de bata blanca:

Tu cuerpo puede estar reaccionando de manera natural a una situación estresante

"Desde una perspectiva psicológica, inmediatamente pensamos en el estrés", dice Teresa Leyro, profesora asociada de Psicología del programa clínico de la Universidad de Rutgers–New Brunswick en Nueva Jersey. "La hipertensión de bata blanca suele presentarse cuando percibimos una amenaza potencial".

Irónicamente, la ansiedad que produce tomarse la presión arterial puede hacer que aumente. Leyro describe la "amenaza" que nuestras mentes perciben: "Una persona podría preocuparse por el resultado de su lectura, ¿será bueno? ¿será malo? ¿alguna vez he tenido un mal resultado? ¿Estoy preocupado por mi salud en este momento? ¿Tengo antecedentes familiares de hipertensión? Todos estos factores sin duda pueden influir, así como simplemente estar nervioso por estar en el consultorio médico o las razones por las que puedes haber acudido al médico ese día". Y cuando nuestros cuerpos responden a una amenaza, nuestro corazón se esfuerza más de lo normal para estimular la circulación sanguínea, señala Leyro. Nuestro gasto cardíaco, es decir, la cantidad de sangre que el corazón bombea en un minuto, podría aumentar. Lo mismo ocurre con la resistencia vascular periférica, que se refiere a la fuerza que se opone al flujo sanguíneo. Esto dificulta la circulación de la sangre por el organismo porque nuestras venas se contraen, lo que aumenta la presión en nuestras arterias, explica Leyro.

Algunas personas entienden mejor su ansiedad que otras. La autoreflexión y las preguntas adecuadas por parte del médico pueden ayudar a determinar la relevancia de la lectura de la presión arterial, sugiere Leyro. ¿Estoy preocupado por la ansiedad y las sensaciones de inquietud? ¿Me preocupa que otros noten mi ansiedad, que signifique que tengo un problema físico, que voy a desmayarme o algo aún peor? Estos podrían ser signos de un ataque de pánico, que aumenta la presión arterial, y no de hipertensión como una enfermedad en sí misma.

Hay factores externos que están fuera de tu control

También conocemos otros factores que contribuyen a la presión arterial alta en el consultorio médico que no se observaría en otros lugares, dice el Dr. Stephen Juraschek, profesor asociado de Medicina en la Facultad de Medicina de Harvard y voluntario de la Asociación Americana del Corazón. Piensa en las circunstancias de tu visita al consultorio médico. Quizá saliste de casa con tiempo de sobra pero el tráfico te hizo llegar tarde. Tal vez no tuviste la oportunidad de relajarte antes de que te tomaran la presión arterial.

Y la forma en que miden tu presión arterial en el consultorio podría ser apresurada, advierte Juraschek. Algunas clínicas toman una lectura de presión arterial de triaje rápidamente, en una sala de espera, sin siquiera subirte la manga.

Varios estudios han demostrado que volver a medir la presión arterial del paciente de nuevo más tarde durante la visita puede reducirla considerablemente, dice Juraschek.

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¿Cómo puedo reducir la hipertensión de bata blanca?

Tu médico podría preguntarte si te apresuraste para llegar a la cita, pero también si has comido y te has mantenido hidratado. También puede preguntarte si consumiste alguna sustancia, ya sean medicamentos o sustancias recreativas como el alcohol. Todos estos factores pueden afectar tu presión arterial, explica Leyro.

Las citas médicas capturan un breve espacio de tiempo y la presión arterial puede reflejar el comportamiento más reciente. Juraschek cita como ejemplos los fines de semana ajetreados con fiestas de cumpleaños o los días feriados con una ingesta de sodio más alta de lo habitual. Evita programar visitas al médico en períodos de mucha actividad.

Incluso podemos controlar nuestro estrés antes de la cita. Leyro menciona la respiración lenta: inhala durante cuatro segundos y exhala durante seis, o respira solo seis veces por minuto con una duración de 10 segundos por respiración. La técnica, conocida formalmente como biorretroalimentación de la variabilidad de la frecuencia cardíaca, puede cambiar la frecuencia cardíaca, estimular el sistema parasimpático —que es importante para el descanso, la relajación y la recuperación— y lo más relevante, promover la sensibilidad en los barorreceptores, que se encuentran en los vasos sanguíneos y promueven cambios en la presión arterial.

Y en caso de que te lo preguntes, reducir la presión arterial a niveles "artificialmente bajos" no es probable que cause problemas, dice Leyro. El efecto seguramente no sea dramático, pero sí lo suficiente como para contrarrestar el síndrome de la bata blanca. Además, añade Leyro, la capacidad de reducir la presión arterial por nuestra cuenta nos proporciona una sensación de control.

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El monitoreo en casa es esencial para diagnosticar la hipertensión

Si tenemos en cuenta que la hipertensión afecta a la mayoría de los adultos mayores de 65 años, y que los estudios sugieren que el riesgo de desarrollar hipertensión a lo largo de la vida es del 90 al 100%, tiene sentido invertir eventualmente en un tensiómetro para medir la presión arterial en el hogar, señala Juraschek. También recomienda controlar la presión arterial en casa para la mayoría de los adultos de mediana edad con ciertos factores de riesgo cardiovascular.

El monitoreo a distintas horas del día también nos proporciona información sobre nuestros cuerpos, explica Leyro, y ese es un conocimiento que podemos compartir con nuestro médico para poner en contexto nuestra presión arterial. ¿Mi presión arterial suele ser más alta o más baja en la mañana o más tarde en el día? ¿Qué efecto tienen mis actividades diarias en mi presión arterial?

"Muchas veces conocemos nuestros cuerpos mejor que los médicos, y los médicos son los expertos en temas médicos", señala Leyro. "Cuando aunamos nuestros esfuerzos disponemos de más información y nos permite determinar un tratamiento más adecuado y una mejor intervención".

un médico tomando la presión arterial de un paciente
Getty Images

La Asociación Médica Estadounidense (AMA) mantiene un registro de tensiómetros para el hogar aprobados llamado U.S. Blood Pressure Validated Device Listing o VDL. (en inglés) Juraschek dice que revisan las solicitudes de las empresas para garantizar pruebas de precisión a nivel de laboratorio.

Tener un tensiómetro no significa que debas medirte la presión constantemente ya que las fluctuaciones normales pueden provocar ansiedad innecesaria. Juraschek recomienda comenzar con dos mediciones por la mañana y dos por la noche durante un período de tres a siete días, y después calcular el promedio. Esto ayuda a evitar el error de basar el tratamiento en lecturas aisladas que pueden ser inusualmente elevadas. Para obtener consejos más detallados sobre cómo medir tu presión arterial en casa, consulta la Guía de AARP para entender la hipertensión.

En cambio, dice Juraschek, si la lectura en el consultorio es significativamente más baja, puedes comentar esto con tu médico y sugerir que podrías tener hipertensión enmascarada —el efecto opuesto al síndrome de la bata blanca— y determinar cómo abordar el problema. La hipertensión enmascarada ocurre cuando la presión arterial es normal en el consultorio médico, pero alta en la vida diaria. Por ejemplo, si regularmente fumas pero evitas hacerlo antes de tu cita médica, tu presión arterial puede ser más baja de lo habitual.

Además, se recomienda que el diagnóstico de hipertensión se base en dos visitas al consultorio, dice Juraschek, porque la diferencia en la presión arterial es mayor entre visitas que durante una sola visita.

¿Qué tan grave es la hipertensión de bata blanca?

Sabemos que las lecturas normales de la presión arterial, tanto en casa como en el consultorio, son la situación ideal y representan el menor riesgo de hipertensión, y que los resultados de presión arterial elevada en ambos entornos representan el mayor riesgo, dice Juraschek. Por lo tanto, ¿cómo debemos interpretar las categorías intermedias de síndrome de la bata blanca e hipertensión enmascarada?

Los datos publicados sobre epidemiología y los estudios observacionales sugieren que quienes padecen hipertensión enmascarada tienen un "nivel de riesgo de segundo nivel", indica Juraschek. Están en mejor situación que quienes tienen hipertensión o hipotensión sostenida, que es la presión arterial baja que conlleva sus propios riesgos, como desmayarse. Pero parte de lo que coloca a las personas con hipertensión enmascarada en una categoría de riesgo potencialmente más alta es que un problema que no se detecta en un entorno clínico puede no recibir el tratamiento adecuado, advierte. Y el debate sobre la hipertensión de bata blanca se complica aún más.

Algunos geriatras afirman que cualquier medición de la presión arterial es significativa, sin importar que se realice en un consultorio médico o cuál sea el motivo de la presión arterial alta, y señalan que de cualquier modo es perjudicial y deberíamos reconocer ese riesgo ligeramente mayor, agrega Juraschek. Otros profesionales médicos podrían dar importancia solo a las mediciones de la presión arterial en casa, para evitar someter a las personas a tratamientos innecesarios. Juraschek cree que se deben considerar distintos factores para tomar la decisión sobre el tratamiento, bajo el asesoramiento de un médico.

Los adultos mayores merecen recibir tratamiento para la hipertensión

Los adultos mayores tienden a tener una presión arterial más alta en general, así como más variable, dice Juraschek. Él reconoce que es necesario un debate más amplio para determinar si el tratamiento es beneficioso a edades avanzadas cuando prácticamente toda la población es propensa a la hipertensión.

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en los adultos mayores, un riesgo que aumenta con la edad. Juraschek cita "evidencia sólida" entre adultos de 80 a 85 años que muestra cómo los medicamentos para la presión arterial reducen el riesgo de derrame cerebral, eventos cardiovasculares e incluso demencia. Los pacientes mayores deberían desempeñar un papel activo en las decisiones sobre su tratamiento, y se debe incluir a familiares y otros recursos de apoyo social según sea necesario.

"Creo que más que ningún otro grupo, los adultos mayores requieren atención especial y un enfoque individualizado basado en las circunstancias de cada paciente", afirma Juraschek.

Leyro recalca la importancia de obtener datos adicionales sobre la presión arterial elevada para entender mejor lo que está sucediendo. Y, así como la hipertensión debe tomarse en serio, no se debe descartar el síndrome de la bata blanca como si no se tratase realmente de hipertensión. Si no se trata, los pacientes con hipertensión de bata blanca tienen un mayor riesgo de sufrir cardiopatías, incluso con consecuencias mortales.

"Mi opinión es que no debemos simplemente ignorar y descartar la presión arterial alta, incluso si existe una buena explicación", dice Juraschek. "Creo que debemos tomar nota de ella y trazar un plan de seguimiento". 

Consejos para ayudar a relajarte antes de medir la presión arterial

La presión arterial tiende a ser bastante variable, dice Stephen Juraschek de la Facultad de Medicina de Harvard. Y con cada latido del corazón, puedes tener una lectura diferente. Por lo tanto, conviene medirse la presión arterial de la misma manera cada vez: descansa durante un período de tres a cinco minutos sentado y con la espalda apoyada, mantén los pies en el suelo o elevados, apoya el brazo, coloca el manguito del tensiómetro sobre la piel desnuda para que tu ropa no interfiera con la compresión. Evita medir tu presión arterial después de una comida, de consumir cafeína o hacer ejercicio, y vacía tu vejiga primero.

Juraschek recomienda tomar varias mediciones, idealmente tres, y calcular el promedio.

"Lo que intento decirles a mis pacientes es que no se obsesionen con las lecturas individuales", dice Juraschek.

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