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El Congreso amplía las protecciones financieras para los cónyuges en Medicaid

Los beneficios para servicios ​​en el hogar podrán continuar sin que representen la ruina económica de los cónyuges de los beneficiarios.

Pareja de adultos mayores luce preocupada

Getty Images

In English | Los beneficiarios de Medicaid que desean permanecer en sus hogares y comunidades, y obtener beneficios que los ayuden con sus necesidades básicas como comer, bañarse y vestirse podrán continuar recibiendo estos servicios sin la preocupación del impacto económico que esto pueda representar para sus cónyuges, según un proyecto de ley que el Congreso ha enviado para la firma del presidente.


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Sin la medida que aprobó el Senado por unanimidad recientemente, estos cónyuges de beneficiarios de Medicaid no podrían proteger sus ingresos y activos moderados. Con la ampliación, en el 2019 los estados deben permitir a los cónyuges mantener por lo menos $2,057.50 en ingresos mensuales y pueden permitir hasta $3,160.50 sin poner en riesgo los servicios que sus esposos o esposas reciben en el hogar o la comunidad. Asimismo, los estados deberán permitir que los cónyuges protejan entre $25,284 y $126,420 en activos. El proyecto de ley, que la Cámara de Representantes aprobó la semana pasada, extiende estas protecciones hasta septiembre.

"Esta ampliación garantiza que las personas puedan continuar recibiendo los beneficios de Medicaid que necesitan para permanecer en sus hogares y comunidades donde quieren estar y que sus cónyuges estén protegidos contra el empobrecimiento", dijo Rhonda Richards, representante legislativa sénior de AARP.

Medicaid ya protege algunos activos e ingresos de los cónyuges de las personas que reciben cuidados en hogares de ancianos y otras instituciones. En el 2014, el Congreso amplió esa protección a los cónyuges de los beneficiarios de Medicaid que reciben servicios que los ayudan a vivir de manera independiente en sus hogares y comunidades. Estas protecciones están diseñadas para garantizar que las familias puedan permanecer juntas en el hogar y en la comunidad, y que puedan mantener suficientes recursos para pagar por artículos esenciales como comida, medicamentos, el alquiler y las reparaciones del hogar.