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¿Estamos ignorando la COVID esta temporada de fiestas?

Para muchos, el coronavirus está en un segundo plano a la hora de celebrar.


spinner image Familia brindando en la cena
FG TRADE/GETTY IMAGES

 

Eric Yanez y su esposa, Janet, de Nashville, Tennessee, esperan la visita de siete familiares de fuera del estado para el Día de Acción de Gracias.

Al principio de la pandemia de coronavirus, Yanez era cauteloso y solo socializaba con un pequeño círculo de vecinos. Si bien a veces todavía usa una mascarilla, cuando está con personas mayores, en aviones o cuando es requerido en una tienda o un lugar público, este año no tiene planes de preguntar a los invitados sobre su estado de vacunación para las fiestas.

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"No voy a ser la persona que interroga a todos para saber si se han vacunado", dice el gerente de desarrollo comercial de 54 años. "Estoy muy cansado de la COVID".

Igual que gran parte del país.

Según una encuesta de la Universidad de Monmouth (en inglés) de septiembre del 2022, solo 1 de cada 3 adultos dijo que era "muy probable" que recibiera el nuevo refuerzo bivalente contra las subvariantes BA.4 y BA.5 de ómicron, a pesar de que el 51% de los adultos recibieron los refuerzos anteriores.

La misma encuesta también encontró que solo el 25% de los adultos siguen las pautas de distanciamiento social y de uso de mascarillas. Hace un año, esta cifra era del 63%.

A pesar de eso, la COVID no ha desaparecido, ni mucho menos. Las variantes emergentes y la disminución de la inmunidad siguen siendo una preocupación este invierno. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) señalaron a principios de noviembre que los casos de la COVID-19 y las hospitalizaciones habían disminuido, pero que el descenso se había ralentizado. A principios de noviembre, los CDC informaron de más de 350 muertes semanales en el país a causa de la COVID-19. Además, la temporada de resfriados y gripe ha comenzado antes de lo habitual.

Por supuesto, hay personas que tienen enfermedades subyacentes o circunstancias especiales que no les permiten olvidar que la COVID sigue existiendo. Pero ¿está entrando ahora la mayor parte de la sociedad en una nueva etapa en la que aprendemos a vivir más libremente con el riesgo?

En una teleasamblea de AARP el 21 de octubre, el coordinador de respuesta contra la COVID-19 de la Casa Blanca, el Dr. Ashish Jah, señaló que "la COVID ya no es una prioridad para todos". Lo calificó como una buena noticia. "No necesitamos estar en la misma fase de emergencia de 'pensar en la COVID todo el tiempo'", dijo. "Y si las personas continúan protegiéndose con vacunas y tratamientos, podemos dejar atrás la COVID".

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Volver a la "normalidad"

Muchas personas están dejando de lado sus preocupaciones acerca del virus mientras celebran las fiestas, a pesar de que contraer la enfermedad sigue siendo muy común.

Los seres humanos no suelen demostrar una gran capacidad para evaluar riesgos cuando se trata de algo como la COVID-19, pero son muy hábiles en hallar justificaciones, dice Carisa Parrish, profesora adjunta de Psicología Clínica en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. "Eso se llama disonancia cognitiva", dice Parrish.

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A veces, cuando las personas no quieren que algo sea cierto, piensan y se comportan de maneras que refuerzan y justifican esa creencia. Por ejemplo, aquellos que antes usaban religiosamente una mascarilla debido a los riesgos asociados con la COVID-19, pero que ahora rara vez la usan porque están cansados del virus, pueden "tratar de inventar alguna justificación" de por qué ya no es necesaria, dice Parrish.

Además, Parrish comenta que podría haber un aumento de los comportamientos más arriesgados incluso si las fiestas desencadenan un repunte de los casos de COVID, teniendo en cuenta que las personas están muy ansiosas por volver a una vida lo más normal posible.

Jennifer Boettcher, de 71 años, está haciendo todo lo posible para volver a lo que se siente normal. La maestra de lectura jubilada de Wauwatosa, Wisconsin, que está completamente vacunada, dejó de usar una mascarilla y ha visitado a su hija no vacunada en Miami. Cuando su hijo la invitó a su casa en California para el Día de Acción de Gracias con otras 12 personas, el tema de COVID ni siquiera surgió.

"La vida es corta", dice Boettcher. "Quiero pasar tiempo con las personas que son importantes para mí en lugar de estar sola. Eso es más importante".

Según el índice de coronavirus Axios-Ipsos de septiembre (la publicación final de una encuesta que comenzó en marzo del 2020 cuando los primeros casos de la COVID-19 azotaron el país), poco más de la mitad de las personas en el país (el 57%) informaron estar preocupadas por el virus. Ese es el número más bajo registrado desde el inicio de la pandemia. Alrededor de 2 de cada 3 personas dicen que el riesgo de volver a su vida anterior a la COVID es pequeño o ninguno.

Pero ese no es el caso para todos. Beth Cole, de Leawood, Kansas, pasará el Día de Acción de Gracias en Denver con 15 personas. Una de ellas es su madre de 84 años que tiene problemas de salud, por lo que todos los invitados deben vacunarse.

Lo que ella dice que diferencia este día festivo de los últimos dos Días de Acción de Gracias es que, mientras continúa tomando medidas preventivas contra la infección, Cole aborda el tema de la COVID-19 con aceptación en lugar de pánico.

"Siempre estamos un poco pendientes de ello, pero ahora podemos estar juntos sin tener miedo", dice la exejecutiva de comunicaciones y mercadeo, de 58 años, que se ha vacunado contra la COVID cuatro veces.

"Es algo con lo que todos tenemos que aprender a vivir", dice Cole. "No hay garantías, pero vamos a tomar todas las precauciones posibles. Tenemos que vivir nuestras vidas".

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Las precauciones pueden ayudar

La buena noticia es que, en este punto de la pandemia, "casi todos los que salen fuera de casa se han vacunado o han tenido la COVID, por lo que estamos entrando en un momento en el que las personas, en general, han tenido algún tipo de exposición inmunitaria y es menos probable que se enfermen gravemente si contraen el virus", dice Del DeHart, especialista en enfermedades infecciosas y director médico del Departamento de Prevención de Enfermedades de Unversity of Michigan Health–West en Wyoming, Míchigan.

DeHart sugiere seguir las últimas pautas de los CDC, que incluyen recomendaciones para vacunarse y recibir el refuerzo. Además, si presentas síntomas de COVID, hazte la prueba y quédate en casa.

Los CDC también sugieren reunirse en espacios con buena ventilación y abrir puertas y ventanas si el clima lo permite. Además, la agencia federal aconseja usar una mascarilla bien ajustada sobre la nariz y la boca en interiores si no estás completamente vacunado o si tienes un sistema inmunitario debilitado; los que están completamente vacunados deben usar una mascarilla en interiores en áreas con tasas de transmisión de la COVID-19 considerables o altas.

Pero mucho dependerá de las decisiones individuales, dice DeHart. "Es difícil para las personas tener que tomar decisiones subjetivas en las reuniones familiares", dice. "Tenemos que pensar en quiénes son especialmente vulnerables y cómo protegerlos".

Ginger Williams está tomando más precauciones que la mayoría. La profesora universitaria de Historia de Rock Hill, Carolina del Sur, está completamente vacunada, todavía usa una mascarilla para trabajar todos los días y aún no ha contraído la COVID-19.

"El virus todavía persiste porque las personas no están siendo lo suficientemente cuidadosas", dice Williams, de 58 años. "Estoy adoptando esa postura conservadora".

Para el Día de Acción de Gracias, Williams irá a la casa de su hermana, donde no usará una mascarilla, dado que todos menos uno de los invitados están completamente vacunados y han recibido el refuerzo. Ese invitado, su sobrino, solo ha recibido una vacuna.

"Probablemente me sentaré en el otro extremo de la mesa", dice, "y cruzaré los dedos".

Robin L. Flanigan es una escritora que colabora con artículos sobre salud mental, educación y temas de interés humano para varias publicaciones nacionales. Trabajó como reportera para diversos periódicos y sus escritos también se han publicado en People, USA Today Education Week. Es autora del libro infantil M is for Mindful.

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