El 'sexting' no sólo ocurre entre jóvenes
Muchos adultos mayores envían mensajes subidos de tono a través de sus teléfonos, pero por lo general es un asunto privado.
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Un celular o teléfono inteligente se presta como el medio perfecto para el 'sexting'.
Nota del redactor: algunos de los entrevistados se identifican sólo por su nombre de pila para proteger su privacidad.
El "sexting" se ha convertido una vez más en la ruina del exrepresentante Anthony Weiner. El demócrata de Nueva York renunció a su escaño y descarriló su carrera política hace cinco años por cometer el hecho, y repitió el uso imprudente de enviar una imagen sexualmente sugerente de su entrepierna a una mujer no identificada a través de un celular el 31 de julio de 2015, según el Correo de Nueva York. Esta vez, le está costando su matrimonio. Según los informes, su esposa, Huma Abedin, asistente de Hillary Clinton desde hace mucho tiempo, solicitó el divorcio.
“Después de una larga y dolorosa consideración y trabajo en mi matrimonio, tomé la decisión de separarme de mi esposo”, dijo Abedin en un comunicado. “Anthony y yo seguimos dedicados a hacer lo mejor para nuestro hijo, quien es la luz de nuestra vida. Durante este momento difícil, pido respeto por nuestra privacidad”.
El "sexting" es una práctica que normalmente se relaciona con los adolescentes. Pero la realidad es que cada vez más personas de más de 50 años, tanto solteros como casados, usan mensajes de texto para enviar imágenes tentadoras y palabras provocativas a su pareja, según los expertos en relaciones.
La mayoría de estos no manda mensajes de texto de manera muy pública e "inapropiada", como admitió haberlo hecho Weiner. Más bien, lo usan como una forma divertida, fácil y generalmente inofensiva de darle vida a su vida sexual.
La asesora de relaciones Suzanne Blake lo ha visto y oído todo en lo que respecta al sexting, como una esposa que disfruta sextear a su esposo cuando viaja por negocios, diciéndole (y mostrándole) lo que se está perdiendo en casa. Si bien esto puede sorprender a algunos, Blake no está sorprendida en absoluto.
"Es un nombre inapropiado que los cambios biológicos del envejecimiento tengan que conducir a una disminución de la sexualidad y la experiencia sexual", dijo Blake.
No importa que estén solteros o tengan citas casuales, o estén casados o en relaciones a largo plazo, "los boomers quieren actividad sexual", explica Blake. "Quieren coquetear. Los hace sentir animados y jóvenes".
Jill se siente fresca y vital cuando hace "sexting". "Te da un poco más de valor", dice. "Te quita el miedo, las inhibiciones. Puedo ser un poco más atrevida en un mensaje de texto de lo que sería por teléfono o en persona".
Según la enfermera —residente de Carolina del Sur que lleva muchos años divorciada y sale informalmente con otros solteros— el "sexting" la hace sentir "pícara".
"Si estás sentada en un restaurante esperando la comida, puedes hablar de sexo con alguien y nadie se da cuenta de lo que te traes", dice Jill. "Preferiría hablar por teléfono. Pero también me siento cómoda cuando me escondo detrás del texting para decir algo atrevido".
Ese es exactamente el atractivo del sexting, según el Dr. Jonathan Alpert, psicoterapeuta y columnista que vive en Nueva York.
Porque uno no espera una respuesta verbal directa, no se arriesga tanto como si le hablara a alguien "a la antigua", cara a cara, explica Alpert. "Cuando corremos menos riesgo de que nos critiquen o juzguen, podemos expresarnos de una manera más sexual".
También encaja bien en la agenda de las parejas atareadas que han estado juntas mucho tiempo y quieren conservar el aspecto erótico de su relación, explica Genie James, experta en relaciones y sexualidad. James recomienda el "sexting" a las parejas que viajan por trabajo o a las que les resulta difícil conectarse durante el día. "Es barato", dice. "Es rápido. Está ahí mismo. Y nadie los puede oír".
"Se trata de preparar el terreno para el sexo y mantener viva la pasión. Tienes un teléfono celular en la mano todos los días. Ya estás enviando mensajes", dice James.
Pero cuidado, advierten los expertos. El sexting también conlleva peligros, especialmente en la esfera de las citas románticas.
¿El mayor peligro? La publicidad engañosa, dice la Dra. Gilda Carle, experta en relaciones. Es algo que bien conocen los que han concertado citas por internet, pues a veces la persona que se aparece se ve 30 años mayor que la foto que acompaña su perfil.
"Exageran sus atractivos y prometen demasiado", dice la Dra. Carle de los que envían "sextexts" inflados. "Creo que en una relación ofrecer demasiado, y demasiado pronto, no es bueno. Les sugiero a todos que desarrollen la relación fuera de la cama, de modo que cuando se metan en la cama esta les sirva de patio de juego, un sitio donde divertirse".
Además está el "factor confort". A muchas personas no les gusta recibir textos o fotos de contenido sexual por teléfono, o no tanto como inicialmente supusieron.
Richard recibió por su teléfono celular una foto "no apta para menores" de una mujer que había conocido en internet, y él mismo se sorprendió al descubrir que no le entusiasmaba.
"Me dio un poco de vergüenza", dijo el residente de Iowa. "En realidad me dio bastante vergüenza".
El hecho de que en ese momento se encontrara en un restaurante con un grupo de colegas no ayudó mucho.
"El sexting podría ser un experimento interesante", dice con un suspiro, pero después de esa experiencia, "no sé, ya no me pareció tan divertido".
Nota de redacción: este artículo se publicó originalmente el 9 de noviembre de 2009. Ha sido actualizado.