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7 consejos para mejorar tu salud dental y bucal

La edad puede afectar las encías, las caries e incluso cómo debes cepillarte. Es hora de mejorar tu higiene dental.


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JOSH DICKINSON

¿Con qué frecuencia debo ir al dentista?

No existe una fórmula universal, dice Judith Jones, dentista y portavoz de la ADA. Si tienes una higiene bucal y unos hábitos óptimos, tu dentista puede darte luz verde para que lo visites una vez cada nueve o doce meses. Pero si tienes problemas de encías, diabetes o enfermedades cardiovasculares, te sugerirá que vayas más a menudo, quizá tres o cuatro veces al año. "Una mayor carga bacteriana en la placa que recubre los dientes causa inflamación, lo cual es perjudicial en caso de padecer enfermedades crónicas", dice.

La pandemia ha sido mala para nuestros dientes. Según una encuesta del 2021 realizada por la American Dental Association (ADA), más del 30% de los dentistas dijeron que sus pacientes tenían más caries y enfermedades de las encías que antes de la pandemia. Eso significa que muchos de nosotros tratamos de compensar en casa la falta de consultas al dentista. Por eso, les pedimos a varios expertos que revelaran sus mejores consejos para cuidar los dientes de los adultos mayores y tratar los problemas dentales más comunes.

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1. Problema: artritis o problemas de hombros

La solución: usa un cepillo de dientes eléctrico

Si tienes problemas de movilidad o destreza que te dificultan el cepillado de los dientes, la solución puede ser tan sencilla como cambiar tu cepillo por uno eléctrico, que tiene un mango más ancho y hace gran parte del trabajo por ti. Pero si te sientes más cómodo con un cepillo tradicional, prueba este truco del dentista Joseph M. Calabrese, profesor clínico y director de Medicina Dental Geriátrica en Boston University: "Haz dos incisiones en los extremos opuestos de una pelota de tenis e introduce el mango del cepillo de dientes. Para cepillarte, sujeta la pelota de tenis", dice. (Envolver el mango con un paño o cualquier otro objeto que ensanche la base de agarre también puede funcionar).

2. Problema: encías que sangran

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La respuesta: cepíllate durante más tiempo

Si te sangran las encías mientras te cepillas, seguramente es por una acumulación de placa en los dientes que inflama las encías. El sangrado de las encías no solo implica una posible pérdida de los dientes, sino que la inflamación subyacente también aumenta el riesgo de padecer otros problemas de salud, como enfermedades cardíacas y Alzheimer. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), un 68% de los adultos mayores de 65 años padecen enfermedades de las encías. La solución: cepíllate los dientes al menos dos veces al día durante al menos dos minutos (el tiempo que dura "We Will Rock You", de Queen). Usa hilo dental o un cepillito interdental una vez al día para llegar al espacio entre los dientes y utiliza un enjuague antibacteriano después de limpiarte los dientes.

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3. Problema: retracción de las encías

La respuesta: date un masaje dental

Si tus dientes parecen más largos de lo que eran, eso puede deberse en parte a que te los cepillas demasiado fuerte. "A veces, cuando uno siente que tiene los dientes sucios o hace tiempo que no va al dentista, se cepilla con más fuerza, lo que provoca una inflamación y hace que las encías empiecen a retraerse", explica Lisa Thompson, dentista y directora del programa de becas de Odontología Geriátrica de la Facultad de Odontología de Harvard. Usa un cepillo de dientes con cerdas suaves y masajea las encías sin restregarlas.

4. Problema: el retorno de las caries

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La solución: usa más flúor

Aunque hayas sobrevivido a la etapa de mayor propensión a las caries, es posible que aún no puedas cantar victoria. Casi uno de cada cinco adultos de más de 65 años tiene caries sin tratar a causa de problemas como la sequedad bucal o la retracción de las encías. ¿La solución? El flúor, un ingrediente que ha demostrado sistemáticamente que protege contra las caries. "El flúor es un recurso muy útil, y no es solo para los niños, es también para los adultos mayores", asegura Calabrese. Además de una pasta de dientes con flúor, él también recomienda un enjuague con flúor (que encontrarás en cualquier farmacia), o una pasta, un enjuague o un barniz de flúor de alta concentración, que debes aplicar según las indicaciones de tu dentista para un efecto más duradero.

5. Problema: una nueva afición a los dulces

La respuesta: limita tus antojos

A partir de los 50, empezamos a perder algunas de nuestras 10,000 papilas gustativas, y eso puede hacer que se nos antojen sabores más intensos, como los dulces. Si quieres "ayudar" a tus nietos con su botín de Halloween, permítete solo una golosina al día. Cuantas más veces al día expones los dientes al azúcar, más oportunidades hay para alimentar las bacterias, advierte Jones, de la ADA.

6. Problema: boca seca

La solución: haz como los jugadores de béisbol

La causa más común de la sequedad bucal son los medicamentos, dice Calabrese. Hay muchos medicamentos que pueden tener este efecto, entre ellos los antidepresivos, los anticolinérgicos, los antihistamínicos y los fármacos para la hipertensión. Pero la sequedad bucal va más allá de la simple molestia: la saliva desempeña un papel fundamental en la reducción del riesgo de varias enfermedades dentales y de las encías. Así pues, haz como los jugadores de béisbol: ten agua siempre a mano para tomar regularmente a lo largo del día y abastécete de chicles sin azúcar. Ambas cosas favorecen tanto la limpieza de partículas de comida como el flujo de saliva.

7. Problema: mal aliento

La solución: límpiate la lengua

Lo primero es incorporar la limpieza de la lengua a tu rutina matutina y nocturna, sugiere la dentista Elisa Chávez, directora del Pacific Center for Equity in Oral Health Care de University of the Pacific. Los raspadores linguales son dispositivos baratos en forma de U que eliminan la capa blanca y pegajosa donde se acumulan las bacterias que causan el mal aliento. También puedes cepillarte simplemente la lengua con el cepillo de dientes después de lavarte los dientes. Pero ten en cuenta que el mal aliento crónico puede deberse a algún problema más grave, como las caries.

Jessica Migala ha escrito para Marie Claire, Prevention y más de otras treinta publicaciones.

Nota de redacción: este artículo, que originalmente se publicó el 1.º de octubre del 2021, se ha actualizado para incluir nueva información.

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