Vida Sana

| Considerando que las autoridades de salud siguen exhortando a cubrirse la cara en público para frenar la propagación de la COVID-19, estamos familiarizados con los pequeños inconvenientes de usar mascarillas: orejas irritadas, anteojos empañados y ataduras rotas. La llegada del verano aumenta el nivel de incomodidad, ya que las coberturas faciales atrapan el sudor y el calor.
"Cuando los médicos usamos mascarillas durante mucho tiempo —por ejemplo, durante una operación o procedimiento—, notarás que mantenemos las salas a una temperatura que los pacientes llaman 'incómodamente fría'", dice Gregory Poland, médico e investigador de vacunas de Mayo Clinic. "Hay una razón para ello".

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
Mantener la cara cubierta al salir del hogar sigue siendo un arma crucial en la lucha contra el coronavirus, tal como recomiendan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y como requieren algunos Gobiernos estatales y locales.
Por suerte, hay modos de no sufrir tanto el calor al usar mascarilla. Aquí presentamos cinco consejos de expertos para mantener contenidas tus gotitas respiratorias con más comodidad.
No sufras con el calor usando una mascarilla durante el verano. Expertos ofrecen consejos para mantenerse seguros, frescos y secos usando una máscara.
1. Elige la tela adecuada
Una tela respirable ligera, como el algodón, probablemente te mantenga la cara más fresca que las mascarillas médicas y las N95 fabricadas con materiales sintéticos. Además, con la configuración acertada, pueden ser eficaces para prevenir el contagio, según nuevas investigaciones realizadas por Taher Saif, un profesor de ciencias mecánicas e ingeniería de University of Illinois (en inglés).
El equipo de Saif analizó 10 telas comunes, desde las de 100% de algodón hasta las de poliéster y mezclas de seda, para ver cuál combinaba mejor el confort con la impermeabilidad que bloquea las gotitas. Él dice que el punto óptimo es una mascarilla de dos capas fabricada de una camiseta de algodón, que es lo que más se asemeja a la eficacia de una mascarilla quirúrgica en detener gotitas potencialmente infecciosas provenientes de la tos y los estornudos y, además, es el doble de respirable.
Las telas totalmente de algodón produjeron los mejores resultados, pero las que contienen hasta un 40% de poliéster también funcionarán, dice Saif. "No soy un experto en telas. Solo compro cosas de Walmart y Target", añade riéndose. "Nuestro estudio demostró que si tienes esas capas sobre la nariz y la boca, no es necesario tener una mascarilla oficial que va con las ataduras detrás de las orejas. Simplemente te la puedes colocar sobre la nariz y la boca, como un pañuelo".
Las cubiertas de algodón más liviano y suave también ayudan a evitar la irritación, la miliaria o la inflamación de problemas de la piel como el eccema o la dermatitis, dice Carrie Kovarik, profesora adjunta de dermatología de la Facultad de Medicina Perelman de University of Pennsylvania e integrante del grupo de trabajo sobre la COVID-19 de la American Academy of Dermatology.
También te puede interesar