Playas paradisíacas en Latinoamérica

Playas paradisíacas en Latinoamérica

De México al sur de América, pasando por el Caribe, hay verdaderos santuarios naturales perfectos para pasar días de pura diversión o simplemente relajarse. Estos son algunos de nuestros lugares favoritos para vacacionar. 

Tulum, México

Además de la combinación de arena suave con un mar con tonos turquesa y brisa cálida, la costa de Tulum guarda entre sus encantos las imponentes ruinas de una ciudad maya que data del siglo XII. En medio de este mágico panorama, puedes bucear, visitar hermosos cenotes, conocer la reserva de la biósfera de Sian Ka’an y completar la jornada en las tiendas turísticas, restaurantes y terrazas de la calle principal del pueblo. Es un destino de fácil acceso, a solo una hora y 40 minutos en auto desde Cancún.

Malpaís, Costa Rica

Considerada una de las mejores playas de la costa pacífica, Malpaís es un lugar paradisíaco de arena blanca que alcanza franjas boscosas de palmeras y almendros. Si buscas un lugar tranquilo y sin grandes multitudes, esta playa es ideal. Y si entre tus pasatiempos está surfear, este es uno de los mejores lugares del país para hacerlo. Cada día llegan turistas de todo el mundo y por eso Malpaís tiene una amplia oferta de alojamiento en la playa o en las colinas, así como de restaurantes, spas y estudios de yoga.

Parque Nacional Natural Tayrona, Colombia

Ubicado en la costa atlántica de Colombia, este es uno de los parques naturales más populares del país. En sus enormes hectáreas de tierra y mar conviven bosques, humedales, litorales rocosos, formaciones coralinas, manglares, lagunas y playas de arena fina. Fue territorio de la población indígena Tayrona, por lo que aún reposan en él vestigios arqueológicos como el pueblito Chairama. El parque es ideal para el ecoturismo, bien sea que quieras relajarte entre la naturaleza, bucear en la profundidad o en la superficie (snorkeling) o emprender una caminata en su selva.

Punta del Este, Uruguay

Con un ambiente que suele compararse con St. Tropez (Francia), este es uno de los lugares turísticos más importantes de Uruguay. Punta del Este está conformada por Playa Mansa, una zona de aguas tranquilas que colinda con el Río de la Plata, y por Playa Brava, con mucho más oleaje y hogar de la famosa escultura La Mano, erigida en 1982. Además de disfrutar de las playas, puedes ver el atardecer en la plaza Artigas y caminar en las noches por la avenida Gorlero.

Cayo de Agua, Los Roques, Venezuela

Cayo de Agua es la isla más hermosa del archipiélago de Los Roques, un parque natural venezolano conformado por bancos de arena coralina, aguas cristalinas y arrecifes de coral. La calma y la soledad del lugar te invitan a la relajación total, aunque también puedes bucear y practicar snorkeling o kitesurf. Para llegar a Cayo de Agua, toma un vuelo desde Caracas hasta El Gran Roque, la isla más grande del archipiélago en donde están el aeropuerto, los restaurantes y las posadas. Desde allí, toma un bote.

Máncora, Perú

Máncora te ofrece descanso, entretenimiento y diversión, aunque espera toparte con multitudes en la temporada alta de Año Nuevo. La playa se extiende por varias millas en las que hay hoteles, complejos de lujo, restaurantes peruanos e internacionales, y bares que envuelven a los visitantes en una vibrante vida nocturna. Para llegar a Máncora toma un vuelo de aproximadamente una hora y 45 minutos de duración desde Lima, hasta las ciudades de Talara o Tumbes. Desde allí, un servicio de transporte privado te lleva hasta tu hospedaje.

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Fernando de Noronha, Brasil

Este archipiélago de aguas cristalinas, paisajes tropicales y vida marina, es uno de los lugares más hermosos de Brasil y es ideal para el descanso y el turismo ecológico. Para llegar allí es necesario tomar un vuelo desde Natal o Recife, o desde cualquiera de las principales ciudades del país. La recompensa será su paisaje sin comparación, donde tendrás el privilegio de avistar tiburones y delfines y, en noviembre, tortugas que llegan a sus costas para dar comienzo al período de reproducción. En este santuario ecológico también podrás montar a caballo, bucear o practicar surfing y snorkeling.

Corn Islands (Islas del Maíz), Nicaragua

Un lugar idílico para quienes no buscan hoteles de cinco estrellas, sino una experiencia auténtica con gente local, hosterías familiares y comidas típicas. Este lugar de paisajes vírgenes y bosques de cocoteros, está ubicado a 46 millas de la Bahía de Bluefields, en la costa caribeña. En Great Corn Island hay barrios y carreteras, mientras que en Little Corn Island solo hay playas y algunos de los arrecifes de coral más conservados del Caribe. A Great Corn Island se llega en avión desde Managua. A la pequeña isla se llega por bote desde la más grande.

Playa Blanca, Guatemala

A diferencia de la mayoría de las playas del país —de color oscuro debido a su origen volcánico— Playa Blanca le hace honor a su nombre. Es el escenario perfecto para leer o contemplar la naturaleza desde una hamaca. Por ser área protegida, aunque permite el acceso público, no tiene hoteles ni restaurantes, por lo que debes llevar tu propia comida y equipo de campaña si planeas pasar la noche. Ubicada en el departamento de Izabal, llegas allí recorriendo un tramo de cuatro horas en auto desde Ciudad de Guatemala y luego tomando una lancha desde Livingston o Río Dulce.

Roatán, Honduras

La isla de Roatán en el mar Caribe ha empezado a cobrar fama como un lugar ideal para jubilados. Este “escondite tropical” goza de un mar cálido de tonos azules que semeja una piscina natural. Además de sus lindas playas, la isla está rodeada por el segundo arrecife de coral más grande del mundo, por lo que vale la pena practicar el snorkeling. Cuenta con una amplia oferta de restaurantes y supermercados internacionales y con exclusivos proyectos residenciales para todos los gustos. El idioma principal es el inglés.

Bocas del Toro, Panamá

Este archipiélago paradisíaco está ubicado en la costa caribeña de Panamá, muy cerca de la frontera con Costa Rica. Sus bosques húmedos, pantanos, manglares, y selva albergan una impresionante biodiversidad de fauna y flora. Unos de sus grandes atractivos son las caminatas por sus parajes de vegetación tropical. En Pueblo de Bocas, su capital, puedes tomar un “taxi marino” para visitar las islas y playas vecinas donde, en las noches, afloran los ritmos del Caribe y los aromas de la cocina local. Un escenario ideal.

Playa del Carmen, México

Playa del Carmen dejó de ser una aldea de pescadores para convertirse en uno de los lugares más glamurosos del Caribe mexicano. Sus playas y mar de suave oleaje son perfectos para tomar el sol y descansar, así como para disfrutar de ese ambiente de encuentro entre residentes y turistas de muchas nacionalidades. Los spas y clubes privados se prestan para quienes buscan planes exclusivos, y en la Quinta Avenida, una calle paralela muy cercana a la playa, se vive el ambiente caribeño entre restaurantes, tiendas y cafés.

Ipanema, Brasil

Famosa en todo el mundo por la canción La chica de Ipanema, esta es una de las playas más bellas de Brasil y es punto de encuentro del jet–set carioca. Allí se puede practicar buceo y surfing pero, sobre todo, se puede sentir el ambiente festivo propio de Río de Janeiro. Cuando estés en Ipanema, no dejes de salir en las noches para disfrutar en sus bares, restaurantes y clubes, donde la música es todo un mundo por descubrir.

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