Nicola Griffin: nuestra heroína talla 16

P: ¿De dónde proviene tu marca de pensamiento progresista?

R: Cuando era niña, mi madre nunca hablaba del peso o de las dietas, solo comíamos lo que se ponía en la mesa. Hoy en día, estoy muy feliz con mi peso. Nunca he tenido una balanza en casa.

P: ¿Tu visión ha influenciado a tus hijas?

R: Me gustaría pensar que siguen mi ejemplo. Y de hecho, no hablamos del peso cuando nos reunimos. Todas comemos de manera saludable, nos sentimos a gusto con nuestra apariencia y vivimos ocupadas con nuestras vidas. Sí camino mucho y permanezco activa, y agrego muchas publicaciones en Instagram para animar a otras mujeres a hacer lo mismo.

P: No creo haber conocido nunca a una modelo que no estuviera a dieta. ¿Qué comes en un día normal?

R: Desayuno bien: avena con nueces, una banana en rodajas, ciruelas pasas y un poquito de miel por encima. Me satisface y me da energía. Para el almuerzo, a menudo es aguacate untado sobre una tostada con pimientos picantes. La cena es pescado o carne con vegetales y papas. Tal vez un poco de yogur más tarde como merienda.

P: ¿Alguna vez usas Spanx?

R: Oh, tengo todo un arsenal de prendas moldeadoras. Permiten que la ropa se vea lisa y parecen retener todo muy bien. El otro artículo esencial es un sostén de muy buena calidad; uno que te levante y sostenga, no uno de esos pequeñitos.

P: Posaste para una publicidad de ropa interior. ¿Lo harías de nuevo?

R: Esa publicidad fue para una promoción de 50 Shades of Grey el día de San Valentín, y fue muy divertido, así que probablemente lo haría. La ropa interior adecuada puede marcar una gran diferencia en cómo te queda y te luce la ropa.

P: Tu pelo largo canoso; ¡una actitud fabulosa!

R: Mi pelo natural es marrón y me había venido tiñendo el pelo de ese color a medida que me salían las canas, pero se veía horrible. Un día decidí, suficiente; ¡me las voy a dejar crecer!

Después de dos años de una horrible transición —mitad blanco, mitad negro— logré mi color auténtico, que es un blanco platinado. ¿Y sabes qué? Esa decisión lanzó mi carrera de modelaje. Estaba en la fila del banco hace unos tres años, cuando alguien se me acercó respecto a hacer una publicidad para White Hot Hair, una línea de productos en Inglaterra para cabelleras grises y blancas.

P: Muchas mujeres mayores usan autobronceadores para camuflar las venas y adquieren un resplandor como si hubieran estado al aire libre. ¿Te empaparon con ese producto, o es ese un bronceado natural?

R: No, tengo la tez muy clara, por lo que usaron un bronceador de salón en spray para darme un aspecto soleado, color bronce. Después de todo, ¡estábamos en una playa en el Caribe! El bikini dorado me hace verme mucho más bronceada en foto que en persona, pero no le hicieron ningún retoque para la publicidad.

P: Mientras las modelos más jóvenes consiguen los anuncios para maquillaje y ropa de moda, las modelos mayores a menudo tienen que conformarse con anuncios para la disfunción sexual, la depresión o el síndrome del intestino irritable. ¿Eso está a punto de cambiar?

R: ¿Quién sabe? Aunque sí parece que esta publicidad de trajes de baño en Sports Illustrated sea el inicio de un movimiento. Las mujeres vienen en todas las formas y tamaños, y muy pocas de nosotras tienen cuerpos que pueden considerarse perfectos. La publicidad ha creado una ola de autoaceptación acerca de la edad e imagen corporal entre las mujeres que se sienten identificadas.

Pero creo que va más allá de eso. Pienso que ahora estamos viendo el surgimiento de la diversidad en edades y tallas en todas las áreas de la belleza y la moda. Espero inspirar a otras mujeres —no solo a las de mi edad, sino a las más jóvenes también— a creer que no hay límites de edad.