'The Gunman', mucho más que una película de acción
Sean Penn sorprende con un largometraje que combina acción y profundidad.
DIRECTOR: Pierre Morel
GUIÓN: Don MacPherson, Pete Travis, Sean Penn (adaptado de la novela La Position du Tireur Couché de Jean-Patrick Manchette)
ELENCO: Sean Penn, Jasmine Trinca, Javier Bardem, Mark Rylance, Idris Elba y Ray Winstone
DURACIÓN: 115 minutos
Confundir The Gunman con otras películas de acción del director Pierre Morel como Taken (2008), es un error. Para apreciar su valor, hay que tener como principal referencia al autor del libro en la que se basa: Jean-Patrick Manchette (1942-1995). El escritor francés es reconocido por haber revitalizado el género noir en los años 70 y 80. Lo que Manchette hizo por la literatura “detectivesca” se equipara con lo que en cine realizaron algunos realizadores de la Nueva Ola; en especial Jean-Pierre Melville en filmes como Le Samouraï (1967) y Le Cercle Rouge (1969), junto a actores como Alain Delon y Jean-Paul Belmondo como los antihéroes solitarios que luchan contra un sistema corrupto. Las novelas de Manchette utilizaban el bajo mundo para analizar la condición humana desde un punto de vista existencialista y político. La Position du Tireur Couché (1981), publicado en inglés en 2002 como The Prone Gunman, fue considerado como uno de los mejores libros del año por The New York Times Book Review.
La adaptación cinematográfica, The Gunman, traslada la historia original de Francia a la Republica Democrática del Congo y al tiempo presente. En el 2006, después de diez años de una cruenta guerra civil, el Congo es un caos que compañías trasnacionales aprovechan para sus propios intereses. Jim Terrier (Sean Penn) trabaja supuestamente para proteger la seguridad de una organización sin fines de lucro, pero en realidad es parte de un grupo de mercenarios que sirve a empresas extranjeras que explotan los ricos minerales del país. Cuando el ministro de minas del Congo anuncia la expropiación de las mismas por sospechas de que sus dueños secretamente incitan la subversión, Terrier recibe el encargo de asesinarlo. La orden viene de Félix (Javier Bardem), quien al parecer tenía en mente también sacar a Russel del paso para quitarle a la novia, Annie (doctora de una ONG). Terrier tiene que desaparecer del continente africano sin poder despedirse de Annie.
Ocho años después, Terrier está de regreso en el Congo. Atormentado por sus acciones del pasado y por haber perdido a Annie, coopera en la reconstrucción del país, utilizando sus dotes de ingeniería para cavar pozos de agua potable. Todo va bien, hasta que un día sufre un atentado que lo obliga a viajar a Europa y tratar de descubrir quien buscaría venganza de los hechos del pasado. Terrier descubre a sus excolegas mercenarios, que ahora viven como millonarios en Londres y Barcelona. Además se reencuentra con Annie, quien está casada con Félix. Varios críticos se han concentrado en el hecho de que The Gunman es una película de acción con un improbable héroe cincuentón cazando enemigos en escenarios exóticos. Tal vez porque en Taken, Morrel hizo lo mismo por Liam Neeson; cuando, en realidad, Morel solo dirigió la única buena película de esa serie: la primera.
Por otra parte, tanto Morel, como los guionistas (entre los que se incluye el mismo Penn), respetaron los elementos principales de la obra de Manchette. Terrier es un héroe atormentado que busca redimirse y exponer los intereses oscuros de la sociedad. Como todo personaje de la corriente existencialista, Terriel trata de seguir su propia moral en un mundo corrupto. Penn no solo está en plena forma a sus 53 años, sino que es un excelente actor de carácter (al igual que Neeson). Mientras que otros críticos han dicho que The Gunman es solo un vehículo para lucir sus bíceps, el trasfondo político de la historia está mucho más en sintonía con los intereses humanitarios del actor, conocido por su labor filantrópica en países como Haití. Además, si bien Terrier despliega, como todo héroe de acción de Hollywood, una fuerza sobrehumana que arrasa con sus enemigos a punto de metralla bomba y patadas, también muestra un lado vulnerable. El personaje se nos muestra atormentado por la culpa, por el amor imposible de Annie y por terribles dolores de cabeza que lo aquejan (¿un malestar moral?) desde su último asesinato en el Congo.
Si en algo “falla” The Gunman, es en meter más elementos del cine de acción de los que una película del género negro requeriría, pero eso no hace sino poner en relieve que las explosiones y los balazos no son su verdadera esencia. En todo caso, introducir las persecuciones de autos y peleas, contribuye a que también pueda satisfacer a los que no esperan más que eso del cine. Para los que tenemos otras expectativas, The Gunman, las cumple.
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