Shellie Layne

El momento que despertó mi pasión por este proyecto

Yo era una corredora de propiedades multimillonarias, pero el divorcio, la ejecución hipotecaria y la quiebra me llevaron al borde de la desesperación. Entonces, un día, mi aire acondicionado central dejó de funcionar y me faltaba el dinero y la capacidad de repararlo. De hecho, no sabía cómo hacer ninguna reparación en el hogar. En Walmart, miré las cajas de los acondicionadores de aire de las habitaciones, y el asociado de Walmart que me atendió me dijo, de forma amigable, “cuando llegues a casa, la persona que hace la instalación sabrá qué hacer”. Entonces caí en cuenta: estás sola, Shell. ¡Todo en mi vida había ido mal! Cuando el asociado regresó al mostrador de servicio, perdí el control y comencé a llorar, justo ahí en el pasillo. Y luego decidí respirar hondo en vez de tirarme al suelo y sentir pena por mí misma. Más tarde el mismo día, un amigo de la familia me ayudó a instalar el aire acondicionado adecuado, mi casa se enfrió y mi vida cambió.

Lo que desearía que otras personas supieran

Aunque mi vida se había desmoronado, las piezas rotas me impulsaron a donde estoy ahora. Por eso es importante para mí ayudar a otras mujeres a reconstruir sus vidas. Nuestras circunstancias y situaciones nos llevan al fracaso o al éxito. Es nuestra elección.

Por qué mi estrategia es única

La singularidad es importante para la Women Under Construction Network porque cada mujer con la que tratamos es única. Reconocemos que cada mujer que viene a nosotros tiene sus propias dificultades y circunstancias.

Todos nuestros programas tienen un componente de herramientas. Al principio del curso, a cada participante se le presenta una caja de herramientas vacía, que se llenará de herramientas reales y que simboliza lo que falta en su vida. En cada sesión le damos una herramienta completamente nueva y las habilidades para usarla. Por ejemplo, puede aprender a colgar una barra de cortina con un taladro, lo que también representa la persistencia. Un martillo pone un clavo, pero también puede sacarlo; la lección de vida podría ser que una mujer no tiene que quedarse atrapada. Les hemos dado desatascadores, con el paralelo de la vida sobre volverse imparable, y luces LED para restaurar su poder personal. Pueden usar sus habilidades en casa, pero junto con un consejero o un orador motivacional, son herramientas para reparar vidas.

Consejos para los que desean marcar la diferencia

Tu desorden es tu misión: lo que sea que hayas pasado, lo conoces bien, y serás el mejor en eso. Amar lo que haces y estar comprometido con eso es lo que hace posible mantener el impulso para realizar una labor importante y cambiar vidas.

He aprendido que aunque las herramientas han sido orientadas a los hombres, si le das una herramienta a una mujer y le dices que puede usarla, se expande su mente y ella nunca puede volver atrás. Al igual que al construir una casa, tomas un ladrillo a la vez, usas tus herramientas y, eventualmente, se convierte en un hogar. Un problema, una situación, un desafío, un milagro; uno a la vez. Si no hubiera hecho más que llorar en Walmart, nunca habría conocido mi propósito.