Fortalezcamos el Seguro Social y Medicare sin miedo
Estos programas han mejorado la vida de muchos adultos mayores.
Getty Images
Debemos ser valientes para encontrar soluciones innovadoras y responsables que fortalezcan el Seguro Social y Medicare.
In English | A medida que nos acercamos al final de 2014 dirigimos nuestra mirada al 2015 con gran anticipación y varias oportunidades de transformar el envejecimiento.
El próximo año es el 50.º (quincuagésimo) aniversario de Medicare y Medicaid y de la Ley de Protección de Estadounidenses de Edad Avanzada (en inglés). Es también el 80.º (octogésimo) aniversario del Seguro Social. Con eventos programados durante todo el año, la Conferencia de la Casa Blanca sobre el Envejecimiento, que se celebra cada década, abordará los problemas que los estadounidenses enfrentan a medida que envejecen.
Celebramos estos aniversarios debido a que estos programas han mejorado bastante las vidas de las personas mayores y, a su vez, han mejorado la vida de todos nosotros. Pero también los celebramos para dirigir atención a la necesidad de asegurar que permanezcan sólidos para generaciones futuras.
¿Te gusta lo que estás leyendo? Recibe contenido similar directo a tu email.
En mi primera columna en el AARP Bulletin de octubre, escribí que iba a ser implacable en la lucha por los deseos y necesidades de las personas mayores de 50 años, y que necesito que sean valientes y me acompañen. ¿Qué quiere decir esto?
Desde inicios del 2012, hemos entablado una conversación con el país acerca del futuro del Seguro Social y Medicare. Millones de ustedes han respondido diciéndonos que confían en el Seguro Social y Medicare para la seguridad financiera y de salud —y que les gustaría que estos programas continuaran sólidos, no solo para ustedes sino para sus hijos y nietos—.
Como dijo un socio de AARP en Georgia, "tengo 84 años, y tanto Medicare como el Seguro Social me han sido de gran utilidad. Quiero lo mismo para mis hijos. Debe haber alguna manera para que ambos programas los beneficien". Ahí radica el desafío: hacer que estos programas los beneficien.
Ser valiente significa plantarse frente a quienes simplemente desean recortar los beneficios del Seguro Social y Medicare, quienes se rehúsan a apoyar la reautorización de la Ley de Protección de Estadounidenses de Edad Avanzada y los servicios que proporciona, como Meals on Wheels, el cuidado en el hogar, transporte y prevención del abuso de personas mayores.
Ser valiente también significa reconocer que si nuestra meta es mantener estos programas sólidos, especialmente para nuestros hijos y nietos, debemos hacer cambios responsables a los mismos para garantizar que permanezcan sólidos.
Tanto el Seguro Social como Medicare enfrentan problemas de solvencia a largo plazo. Necesitamos ser dinámicos para encontrar soluciones innovadoras y responsables que aseguren que estos programas permanezcan solventes y proporcionen beneficios adecuados hoy y mañana.
El status quo no nos llevará a eso. Tenemos que hacer cambios, pero debemos cerciorarnos de que sean los correctos.
En AARP, pasamos cada día luchando por las personas y equipándolas para vivir sus vidas al máximo.
Queremos un país en el cual las personas mayores de 50 años tengan acceso a la atención, información y servicios que necesitan para llevar vidas más saludables. Eso significa un Medicare y Medicaid sólidos y sostenibles, y acceso a los servicios que proporciona la Ley de Protección de Estadounidenses de Edad Avanzada.
Queremos un país en el cual las personas mayores de 50 años se consideren un activo integral y que sirvan de inspiración para la sociedad. Qué mejor manera de hacerlo que transformar el envejecimiento volviéndonos parte de la solución para abordar estos problemas.
Este año, los últimos boomers cumplieron 50 años. El próximo mes, los de la generación X empiezan a cumplir 50 años. Cada día, diez mil personas cumplen 65 años, y esa tendencia continuará por los próximos 16 años. Estas son personas que han aportado al Seguro Social y a Medicare todas sus vidas productivas, y ahora están a punto de empezar a recibir los beneficios que se les han prometido y que merecen.
En la medida que celebramos aniversarios importantes de estos programas y dirigimos la atención a los problemas relacionados con el envejecimiento en el 2015, hagamos todo lo que podamos para garantizar que estos programas estén ahí para cumplir otros 50 u 80 años.
También te puede interesar: