Cómo hacerle mantenimiento a tu viejo automóvil

Irv Gordon, maestro jubilado de Long Island, Nueva York, ha conducido más de 3 millones de millas, un récord, en su Volvo P1800S del año 1966, principalmente siguiendo el manual. "Supongo que los que escribieron el manual del usuario y los que escribieron el manual de mantenimiento son los que hicieron las recomendaciones respecto al diseño de la vida útil de las piezas, y yo solo trato de seguir sus recomendaciones", le comentó a Hemmings Motor News.

A continuación presentamos una lista de cosas que debes hacer para mantener tu auto funcionando bien, según los consejos de profesionales con experiencia práctica. La lista podría parecerte complicada, pero no es necesario realizar todas las tareas al mismo tiempo, ni tampoco es necesario realizar la mayoría frecuentemente.

Condúcelo. Puedes oír y sentir si todo está bien. Un buen paseo por carretera cada una o dos semanas evapora la humedad dañina que se ha condensado en el aceite y el sistema de escape. Los paseos cortos no son adecuados. Estos paseos por carretera también ayudan a mantener los neumáticos libres de puntos planos y evitar que la batería se muera por el abandono. También deja que un amigo conduzca, mientras lo acompañas como pasajero. Otra persona oirá y sentirá cosas a las que te has acostumbrado y das por hecho. Otra ventaja de ser pasajero es que algunas veces se pueden oír ruidos o detectar problemas que no se notan cuando se está detrás del volante.

Lávalo. Si tu auto comienza a lucir como chatarra, lo tratarás como tal. Lavarlo con un mitón de microfibra y secarlo con una toalla de microfibra minimiza el daño a la pintura; además, verás que necesitan repararse los paneles de la carrocería. Si lo llevas a un autolavado público, selecciona uno que utilice personas, no cepillos, para lavarlo, aconseja Michael Stoops, especialista superior de capacitación y productos globales en Meguiar’s, que fabrica productos de primera calidad para el cuidado de automóviles.

Mantenlo. Justo antes de salir en esos paseos cada una o dos semanas, comprueba el nivel del aceite del motor con la varilla de aceite que se encuentra debajo del capó. Hazlo cuando el auto haya estado estacionado un par de horas o más en una superficie plana. "Nada destruye un motor más rápido que olvidarse de comprobar o cambiar el aceite", declara el sitio de asesoramiento y compras de autos Kelley Blue Book. El aceite de transmisión automática también necesita chequeos regulares, aunque menos frecuentemente, a través de una varilla por separado. "Se pasa por alto el aceite de transmisión", dice Danner. El manual del usuario te indicará cómo, y con qué frecuencia, deberías comprobar el de tu auto; esto varía entre vehículos.

Cambia el aceite. ¿Cuán frecuentemente? Consulta el manual del usuario. Según Danner: "Nunca te equivocarás si te guías por lo que dice la fábrica". Si en vez del aceite sintético deseas cambiar a utilizar aceite de motor regular, está bien, dice, siempre y cuando la fábrica del auto no exija el uso del aceite sintético. Solo recuerda, lo tendrás que cambiar más frecuentemente que el sintético. Pero cambiar al aceite sintético si por años has estado utilizando el aceite normal puede resultar en fugas de aceite y alto consumo de aceite, advierte Jeff Kaplon, que también es instructor automotriz en Rosedale Tech.

Mantenlo fresco. En la mayoría de los autos, puedes comprobar si el nivel de anticongelante está bajo mirando el depósito de llenado (un pequeño recipiente semitransparente debajo del capó, normalmente cerca del radiador). Pero no es posible verificar más nada; el color del refrigerante no indica su estado. "El anticongelante que tenemos en la actualidad dura bastante, pero aun así, con el tiempo se vuelve ácido si no lo vacías y lo limpias", dice Kaplon.

No ignores la regulación del encendido. "La correa de distribución es algo que la mayoría de las personas ignora hasta que se rompe", advierte Kaplon. Eso parará, y posiblemente arruine, el motor. El manual del usuario detalla los intervalos para el mantenimiento de la correa o cadena (por ejemplo cada 60,000 a 90,000 millas).

Ocúpate de los neumáticos. Comprueba la presión de los neumáticos regularmente. La presión adecuada está indicada en una calcomanía en el interior de la puerta del conductor. La presión indicada en el neumático es un máximo, no es una recomendación. Los neumáticos se deben rotar regularmente para igualar el desgaste y alargar su vida útil. Si necesitas reemplazarlos, compra neumáticos que se hayan fabricado recientemente, ya que a los cinco años el caucho puede comenzar a degradarse. La fecha se encuentra en el número largo estampado en la banda lateral. Si los últimos cuatro dígitos son, digamos, 1215, el neumático se fabricó en diciembre del 2015.

Arréglalo. Ahora, no después. "Que no se deteriore [nada]” para que luego “tengas un gasto considerable", dice Knox, el maestro técnico. "Tenemos clientes con vehículos que tienen más de 200,000 o 250,000 millas. Si algo se rompe, lo arreglan sin demora". Que así sea, dice Dan Kuendel, maestro técnico de Mercedes-Benz en el norte de Virginia, que cambió de carrera este año para trabajar en una empresa de consultoría. "He visto autos de 10 años de un solo dueño que nunca parecen necesitar mucho. Cuando necesitan reparaciones, los clientes no vacilan".

Ahorra tu dinero. Los autos más viejos de vez en cuando necesitan reparaciones costosas. Ahorra dinero mientras puedas, para no sentir la tentación de deshacerte del auto y comprar uno nuevo. El precio promedio de un vehículo nuevo es aproximadamente $34,000, lo suficiente para pagar por muchas reparaciones de tu automóvil viejo.