Qué son las unidades de vivienda accesorias

En el país, unos 1.5 millones de propietarios de casa han colocado unidades de vivienda accesorias (ADU) en sus patios. Las viviendas —conocidas también como “suites para la suegra”, “apartamentos para los abuelos” y “bungalós de patio”— se han vuelto populares como espacios donde uno puede envejecer con tranquilidad o lugares que pueden ayudar a que estén juntos los abuelos, padres e hijos.

La pandemia también ha inspirado nuevos usos para estos espacios, como por ejemplo oficinas residenciales y alojamiento de alquiler a corto plazo. Las nuevas ADU se están añadiendo a una tasa de casi el 9% al año conforme las comunidades adaptan sus reglamentos para permitir su instalación, según un estudio reciente del sitio web para mejoras del hogar Porch.com.

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ABC de las unidades de vivienda accesorias

Existen dos opciones básicas para una vivienda de patio. Puedes elegir una estructura convencional, construida en la propiedad y de diseño personalizado, o puedes comprar una ADU que se elabora en una fábrica, se transporta a tu propiedad en un camión —a veces en una sola pieza— y es instalada por una de las numerosas empresas expertas. Según los constructores de viviendas, la decisión depende enormemente de tu situación y tus necesidades en particular.

Prepárate para gastar unos $180,000 por una ADU. Ese es el precio promedio según Porch.com, aunque los gastos varían según la región y el proyecto. Los constructores de ambos tipos de ADU están de acuerdo en que las estructuras construidas en fábrica suelen costar menos.

Bill Smith, cofundador de Backyard Bungalows, una empresa con sede en California que vende e instala ADU construidas en fábrica, dice que la construcción en fábrica suele ser menos laboriosa. Una vez que una ADU construida en fábrica se entrega por camión y se coloca en un patio —un proceso que puede requerir el uso de una grúa—, terminar el proyecto puede tardar menos de 30 días. En comparación, completar una estructura construida en la propiedad podría tardar seis meses o más.

“Va a ser del 30 al 40% menos cara que una que se construye en la propiedad”, dice Smith.