Consejos de cuidado de cosméticos para ojos hermosos y sanos

No te dejes engañar por la terminología tranquilizadora. El hecho de que una etiqueta diga "hipoalergénico" no significa que un producto sea bueno. Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA), las empresas de cosméticos pueden utilizar ese término sin cumplir ninguna norma o definición federal. Y solo porque algo se denomine natural, botánico u orgánico no significa que sea mejor para nuestra piel. "Los aceites esenciales naturales son mezclas complejas de diferentes compuestos químicos", dice la química cosmética de Cincinnati Kelly Dobos, "por lo que puede haber algunos componentes que son potencialmente irritantes".

Michelle Andreoli, oftalmóloga y portavoz clínica de la American Academy of Ophthalmology, dice que ve "tanta dermatitis alérgica por cosméticos comprados en tiendas de alimentos naturales como por cosas compradas en el mostrador de maquillaje de una tienda de departamentos".

Las reacciones relativamente leves suelen desaparecer por sí solas. Mientras tanto, trata los síntomas con un régimen de cuidado de la piel en casa. Primero, deja de usar el producto irritante para permitir que la piel se cure. Calma la irritación con compresas frías y húmedas aplicadas sobre la piel durante 15 a 30 minutos varias veces al día, según sea necesario. Un humectante suave y no irritante que contenga pocos alérgenos potenciales (como Aveeno) también puede ayudar. Considera un antihistamínico oral de venta sin receta, como Benadryl, si te pican o se te hinchan los ojos. "Si has tenido un sarpullido durante más de unas pocas semanas, o si la picazón es tan grave que interfiere con el sueño o la concentración", dice Nedorost, consulta a un especialista en alergias o a un dermatólogo para que te haga una prueba de parche para ayudar a identificar lo que podría estar causando esa reacción. El profesional también te puede recetar medicamentos para ayudar a sanar la piel.

Para prevenir brotes en el futuro, Wada sugiere:

• Prueba los productos antes de aplicarlos en tus párpados o pestañas. "Aplica una pequeña cantidad del producto en la parte interior de tu muñeca y espera unos días para ver si tu piel puede tolerarlo", dice. Y sé un consumidor inteligente.
• Entra en la página web del Environmental Working Group (ewg.org) y echa un vistazo a "EWG's Skin Deep Guide to Cosmetics" (ambos enlaces en inglés). Escribe un ingrediente, marca o producto específico, y la guía mostrará los alérgenos potenciales y otros ingredientes perjudiciales.
• Incorpora un nuevo producto de maquillaje de ojos a la vez, y espera una semana para asegurarte de que no estás reaccionando a él antes de sumar otro a tu régimen. Eso hará que sea más fácil identificar al culpable.

Productos vencidos

Claro, queremos sacar hasta la última gota (y centavo) de nuestro maquillaje. Pero si lo guardas mucho tiempo, los conservantes se pueden descomponer, lo que permite el crecimiento de las bacterias que causan irritación o, peor aún, una infección desagradable. "Nuestra película lagrimal tiene propiedades antibacterianas y antivíricas, y algunos maquillajes pueden contener conservantes que pueden evitar la acumulación de bacterias", dice la oftalmóloga Melissa (Wen-Jeng) Yao, profesora adjunta del Departamento de Oftalmología y Ciencias Visuales de Montefiore Medical Center en la ciudad de Nueva York. "Pero las bacterias de un maquillaje de ojos demasiado viejo o mal almacenado pueden afectar esa inmunidad natural". Un estudio realizado en el 2019 en la revista Journal of Applied Microbiology encontró que entre el 79 y el 90% de los productos cosméticos abiertos —incluidos el rímel y el delineador— estaban contaminados con bacterias potencialmente peligrosas, como E. coli y estafilococos.

Muchos cosméticos tienen una fecha de vencimiento o un pequeño símbolo PAO (período posterior a la apertura) que indica el tiempo que es seguro usar el producto después de abierto. Pero según la FDA, "las fechas de vencimiento son simplemente reglas generales". Además, un producto se puede estropear antes de esa fecha. Si algo parece fuera de lugar con la fórmula —por ejemplo, tiene un olor raro o notas un cambio en la consistencia o el color—, deshazte del producto inmediatamente.

Algunas pautas sobre el tiempo que se debe mantener el maquillaje para ojos:

Rímel: tres meses. El propósito de las pestañas es evitar que la suciedad, el polen y las bacterias entren en los ojos. Cada vez que sacas el aplicador del tubo y lo pasas por tus pestañas, estás recogiendo esas partículas, que luego introduces en el interior del tubo. El interior húmedo de ese tubo delgado ofrece un ambiente ideal para que las bacterias crezcan. Resiste la necesidad de bombear el cepillo o añadir agua al rímel para humedecerlo, dice Dobos: "Le estás dando a la bacteria lo que necesita para crecer: aire y agua".

Sombra de ojos en polvo: un año, tal vez un poco más. Dado que el polvo no proporciona un entorno favorable para que las bacterias prosperen, las sombras en polvo tienden a tener una vida útil más larga que las cremosas (que duran unos seis meses). "Cada vez que se sumerge el dedo en un producto se le pueden estar agregando bacterias", dice Dobos, quien sugiere usar una brocha o un aplicador limpio para aplicar el color. O mejor aún, compra aplicadores de sombra de ojos desechables.

Delineadores de ojos: de seis a doce meses. Como están compuestos de ceras, los delineadores de lápiz son menos propensos a desarrollar bacterias. Además, si se afila el delineador antes de cada uso, se elimina la capa superior del lápiz, que es donde probablemente estén los gérmenes, dice Dobos. Conserva los delineadores líquidos durante tres o cuatro meses.

Malos hábitos

Es fácil ser negligente con el cuidado de los cosméticos, pero una mala higiene puede causar una infección o irritación de los ojos. Aquí hay más consejos de expertos para el mantenimiento y el uso seguro del maquillaje:

• Ten cuidado con la aplicación del delineador. Mantén el delineador alejado de la línea de agua (el espacio entre las pestañas y el globo ocular). "Las glándulas sebáceas, que ponen aceite en nuestras lágrimas, se encuentran allí", dice Andreoli. "Acercarse demasiado a la apertura de esas glándulas puede taparlas y predisponerte a un crecimiento excesivo de bacterias que puede provocar orzuelos, que son básicamente protuberancias inflamadas y llenas de aceite que aparecen a lo largo de la línea de las pestañas". Otra forma de evitar los bloqueos: aplica esa primera capa de rímel en los extremos de las pestañas primero, y luego regresa a la base.
• No hagas una capa demasiado gruesa. Cuanto más densas o voluminosas sean tus pestañas con capas de rímel, más probabilidades hay de que atrapen polvo e impurezas y se conviertan en un refugio para las bacterias. Y a veces demasiada sombra de ojos puede hacer que las partículas migren a la película lagrimal y obstruyan las diminutas glándulas sebáceas que recubren los bordes de los párpados superiores e inferiores. Esto les impide liberar suficiente aceite en la película lagrimal. "Si tienes menos aceite en las lágrimas, la película lagrimal se evapora más rápido, lo que deja los ojos más secos", dice Ilyse Haberman, oftalmóloga afiliada a NYU Langone Health, en la ciudad de Nueva York. "Puede que experimentes ardor y a veces picazón". Además, cuando los ojos se secan, otras glándulas alrededor del ojo se estimulan y producen más del componente de agua de las lágrimas, lo que resulta en un exceso de lagrimeo.
• No compartas. La conjuntivitis bacteriana o viral (también conocida como conjuntivitis aguda) es altamente contagiosa y puede pasar de una persona a otra cuando ambas usan el mismo maquillaje, advierte Yao.
• Lávate la cara antes de acostarte. No importa lo cansada que estés, quítate todos los restos de maquillaje —incluido el de los ojos— antes de acostarte para evitar la irritación a la mañana siguiente. Haberman recomienda un desmaquillador para ojos sensibles con un componente híbrido de agua y aceite. "Ayudará a disolver el maquillaje y a lavarlo para no tener que frotar con tanta fuerza la piel de los párpados, que es muy delicada", dice. (Otra opción: lavar los párpados y el área alrededor de los ojos con champú para bebés "tear-free" que no irrite los ojos). No utilices exfoliantes en los ojos. "Nada que esté diseñado para exfoliar la piel debe acercarse al ojo", dice Andreoli. "Si esas partículas arenosas entran en el ojo, pueden irritar la superficie e incluso incrustarse mecánicamente en la estructura del ojo, y será necesario removerlas con una aguja".
• Tira el tubo si tienes una infección en el ojo. Tómate un descanso del maquillaje de ojos si tienes una infección ocular para evitar contaminar el producto. Si usaste un producto antes de darte cuenta de que tenías la infección, tíralo para no volver a infectarte. Una vez que la infección desaparezca, invierte en algunas cosas nuevas.
• Guarda el maquillaje en un lugar fresco y seco, como un cajón del dormitorio. El baño puede parecer un lugar conveniente para guardar el maquillaje, pero el calor y la humedad de las duchas calientes pueden convertir esos productos en placas de cultivo de bacterias y hacer que los conservantes se descompongan más rápido.