Vida Sana
Mis hermanas y yo fuimos afortunadas con respecto a la etapa final de mis padres. Cuando la enfermedad de Alzheimer de mi padre aún no era evidente para nadie excepto para mi madre, se trasladaron de la costa oeste para estar cerca de sus tres hijas y eligieron un centro para adultos mayores con evolución de cuidados. El centro tenía una unidad de cuidado de la memoria que les permitió permanecer en el mismo lugar sin inconvenientes, incluso cuando mi padre empezó a desmejorar.
Aunque nuestra situación era idílica, la vida no brinda soluciones tan perfectas para todas las familias. Hay muchas más historias de frustración y desesperación, historias de padres que se niegan a dejar su hogar y de hijos adultos que se sienten presionados a definir los pasos de prestación de cuidado siguientes mientras trabajan y crían a sus propios hijos. Una amiga me dijo recientemente que sus padres, de 91 años, habían vendido por fin su vivienda. Pero no pudieron deshacerse de la mayoría de sus posesiones, así que se mudaron a un condominio para “pensar en el siguiente paso lógico”. Esa amiga ahora está desesperada.
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Considera tus opciones
Se deben considerar un gran número de factores a la hora de elegir la situación de vivienda más adecuada para los padres mayores. Y cuando hay varios hermanos de por medio, la situación puede complicarse. Aquellos que han descartado la opción del cuidado en el hogar o de vivir con familiares deben considerar un desconcertante número de factores a la hora de elegir un centro para adultos mayores.
Y aunque no hay una solución ideal para todos, hay ciertas preguntas importantes para hacer que pueden ayudar a acortar el proceso de toma de decisiones para todas las personas involucradas. Algunas son tan básicas como averiguar el tamaño del centro y el número de camas, la estructura de precios y la proximidad a un hospital y a la familia. Otras son más sutiles y requieren prestar atención. Por ejemplo, ¿cuánta luz recibe el establecimiento o la habitación? ¿Los residentes parecen felices y activos?
Servicios como el transporte a citas médicas o la disponibilidad de un enfermero que pueda realizar tareas como cambiar vendas pueden marcar la diferencia en el bienestar de un ser querido y en la tranquilidad de la familia. Los servicios de comidas y las opciones de alimentos saludables son tan importantes como la política sobre el horario de visitas. “¿Cómo huele?”, es una pregunta que muchas personas me instaron a considerar al sugerir que un olor penetrante a orina podría requerir que investigara más a fondo.
Uno de los consejos más universales es que debes hacer preguntas sobre los cuidados continuos durante tu visita al centro. Muchas personas lamentaron no haber llevado a su ser querido a un centro donde pudiera “evolucionar” a una atención más integral, incluido el cuidado en un hogar de ancianos que ofrezca cuidados paliativos. Varias de las personas a las que entrevisté compartieron el dolor de la familia y del ser querido al tener que hacer la transición a una situación nueva cuando estaban enfermos o incluso a punto de morir.
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