Lo que los cuidadores deberían saber sobre cómo administrar el dinero de un ser querido
Herramientas y leyes para encargarse de las finanzas de otra persona.
La edad y la mala salud —en particular la demencia y otras enfermedades que afectan la memoria y la cognición— pueden perjudicar la capacidad de una persona para manejar responsablemente una de las partes más importantes de su sustento: su dinero.
Por eso, es aún más importante que sostengamos una conversación difícil —pero esencial— con nuestros seres queridos sobre quién se encargará de sus finanzas y cómo, si ellos ya no pueden. Si necesitas encargarte de administrar el dinero o encontrar a alguien que lo haga, estas son algunas de las herramientas legales y financieras de importancia que deberías conocer y los posibles problemas para considerar.
Ahorra un 25% el primer año cuando te unes a AARP con opción de renovación automática. Obtén acceso al momento a descuentos, programas, servicios y toda la información que necesitas para mejorar tu calidad de vida.
Cuenta conjunta
Aunque tu ser querido todavía pueda hacer cosas como girar cheques y usar el cajero automático, habla del tema de agregar a su cuenta bancaria a un familiar o amigo de confianza.
Quizás nunca se llegue a necesitar esta precaución sensata. Pero es algo que solo se puede hacer mientras el titular de la cuenta conserve sus facultades mentales. Con esto, pueden asegurarse de que las cuentas se seguirán pagando si tu ser querido padece un derrame cerebral, una pérdida de la memoria a corto plazo u otra enfermedad que le impida efectuar pagos, entender cómo usar el dinero o ejercer buen criterio financiero.
Si tu ser querido tiene una enfermedad progresiva como la demencia o la esclerosis lateral amiotrófica en etapa inicial, es esencial tener una segunda persona que pueda hacer trámites en su cuenta bancaria. Cuando se necesite, esa persona podrá encargarse de administrar las finanzas al pagar las cuentas, hacer depósitos y retirar dinero, y monitorear el saldo para asegurarse de que a tu ser querido no lo están estafando ni está siendo víctima de explotación financiera.
Cuando el administrador empiece a encargarse de las finanzas, debe cancelar las tarjetas de crédito, las cuentas de PayPal y Venmo, las tarjetas de crédito de las tiendas por departamento, y otras líneas de crédito y métodos de pago que tenga tu ser querido.
Si tu ser querido se siente incómodo al combinar sus finanzas y la familia, existen programas de administración monetaria que pueden ayudar a realizar los pagos de las cuentas. Para encontrar uno, comunícate con una Agencia del Área sobre Envejecimiento (en inglés).
¿Qué puede fallar?
Para muchas personas, una cuenta conjunta es la manera más fácil de pagar las cuentas de un ser querido y hacer un seguimiento de los gastos. Pero conlleva riesgos:
- la segunda persona que aparece en la cuenta podría usar el privilegio de firmar o de usar el cajero automático para robar dinero de la cuenta de tu ser querido.
- Los acreedores de cualquiera de las dos personas podrían intentar cobrar deudas mediante esa cuenta.
- Si uno de los titulares de la cuenta muere, el dinero que esté en esa cuenta pertenecerá al sobreviviente. Esto puede crear conflictos entre hermanos u otros posibles herederos (ver a continuación).
Según el lugar donde viva tu ser querido, podrías evitar estas desventajas con una “cuenta de conveniencia”, que está disponible en casi la mitad de los estados. Con las cuentas de conveniencia, se puede nombrar a una segunda persona para que realice transacciones, pero solo a beneficio del titular original de la cuenta. Cuando el titular original muere, la segunda persona no puede usar el dinero ni heredarlo.
Sé transparente
Los administradores de dinero tienen la obligación de tomar decisiones que velen por los intereses de su cliente o su ser querido. Una política de “libros abiertos” establece transparencia y puede evitar crear sospechas.
- Mantén un registro escrito de los gastos pagados mediante la cuenta conjunta.
- Nunca tomes dinero prestado de la cuenta.
- Anota para qué es el cheque en el campo de “memo”.
- Nunca uses la cuenta para pagar por algo que los beneficie a ti o a un tercero, incluso si también beneficia a tu ser querido. Por ejemplo, comprar un auto para llevar a tu ser querido al médico, pero también usarlo para ir al trabajo.
- Si recibes compensación económica por ser el cuidador principal, según un acuerdo con tu ser querido, es buena idea que le pidan a otro familiar o amigo de confianza que sea la segunda persona en la cuenta. Así, no te estarás haciendo pagos a ti mismo.
Representante fiduciario
Mientras tu ser querido todavía tenga buena salud, debería elegir a un familiar o amigo de confianza para que sea su representante fiduciario (el tutor legal de sus bienes).
Un fiduciario toma decisiones financieras para alguien que ya no puede manejar el dinero. Esto solo se puede hacer si tu ser querido está en plena posesión de sus facultades mentales. Consulta a un abogado para que prepare los documentos legales.
Hay varias maneras de convertirte en fiduciario de un ser querido.
Poder notarial
A veces conocido como poder notarial duradero, es un documento legal en el que una persona le asigna a otra un poder para tomar decisiones financieras en su nombre, en caso de que el cesionario no estuviese en condiciones de tomar decisiones sensatas. La persona a quien se le asigna el poder notarial se conoce como el “representante” o “apoderado”.
Sin un poder notarial o un fideicomiso, la familia corre el riesgo de tener que recurrir más adelante a un tribunal para solicitar la tutela de un ser querido que haya quedado incapacitado, un proceso que puede ser costoso, demorar demasiado tiempo y quizás resultar divisivo. Tu ser querido debe estar en pleno uso de sus facultades mentales para otorgar un poder notarial, y también para revocarlo.
Fideicomisario
Tu ser querido, mientras se encuentra en pleno uso de sus facultades mentales, transfiere los bienes a un fideicomiso activo revocable y nombra a un fideicomisario. Si en lo sucesivo, tu ser querido perdiera la capacidad de tomar decisiones financieras sensatas, el fideicomisario se encargará de proteger los bienes del fideicomiso.
Entre otras tareas, esto podría significar guardar objetos de valor en una caja de seguridad en un banco, mantener los seguros, pagar los impuestos y tomar decisiones prudentes sobre las inversiones. Siempre y cuando tu ser querido pueda tomar decisiones y los términos del fideicomiso lo permitan, esa persona puede modificar o revocar el fideicomiso.
Fiduciario profesional
Quizás les convenga contratar a un profesional con experiencia en el manejo del dinero para supervisar las decisiones financieras, en especial si los bienes que posee tu ser querido son considerables o complicados.
Recibe contenido similar, suscríbete a nuestro Boletín
Ayuda para los fiduciarios
La Office for Older Americans (Oficina para estadounidenses mayores) de la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor (CFPB) brinda recursos que guían a los fiduciarios en su labor, los enseña a detectar estafas y explotación financiera, y aconseja qué hacer si su ser querido es víctima.
La CFPB trabajó con la Comisión sobre leyes y envejecimiento de la American Bar Association para elaborar una serie de guías gratuitas en inglés sobre cómo administrar el dinero de un ser querido.
Un fiduciario profesional podría ser un contador público autorizado, un abogado o un funcionario de una compañía fiduciaria (un empleado de una compañía fiduciaria u otra empresa que gestione fideicomisos, como un banco o una empresa de inversiones).
“El fiduciario profesional puede garantizar que los bienes se manejen de manera fiscalmente responsable, y las leyes brindan protecciones si el fiduciario no cumple con sus deberes y responsabilidades de forma tal que vele por los intereses del adulto mayor”, dice Tina S. Nelson, abogada administradora de la Asesoría Legal para Adultos Mayores de AARP, una organización que proporciona asesoría jurídica a los residentes mayores de Washington D.C.
Un fiduciario profesional debería ser nombrado en un acuerdo de poder notarial, ya sea como la persona designada por el representante o como el representante mismo. El acuerdo debería detallar los honorarios del fiduciario, y puede incluir una disposición que otorgue a los familiares la autoridad legal para reemplazar a ese profesional si están descontentos con su desempeño. Un abogado especializado en derecho de adultos mayores puede ayudar a los cuidadores a encontrar un fiduciario adecuado.
Fiduciario gubernamental
Estos fiduciarios son designados por una agencia gubernamental para gestionar los pagos de beneficios emitidos por esa agencia, por lo general la Administración del Seguro Social (SSA) o el Departamento de Asuntos de Veteranos (VA).
Los fiduciarios gubernamentales normalmente son familiares o amigos cercanos del beneficiario, pero podría elegirse una organización calificada (por ejemplo, un hogar de ancianos). Tienen autorización para usar los pagos de beneficios para el cuidado y el bienestar de un ser querido, pero no pueden manejar otros bienes que pertenecen a esa persona; para eso, se necesita un poder notarial, un cargo de fideicomisario o la designación de un tribunal.
El Seguro Social. Las personas o entidades designadas para manejar los beneficios del Seguro Social de una persona se conocen como los representantes del beneficiario. Deben mantener registros sobre cómo se gastaron los fondos de los pagos mensuales y poner los registros a disposición de la SSA para revisión si se solicita. (Para algunos beneficiarios, estas revisiones son obligatorias).
Beneficios para veteranos. El VA designará a un fiduciario para un veterano al que se considere incapaz de manejar sus beneficios debido a su edad, una enfermedad o una lesión. Se exige una orden judicial o documentación médica sobre el estado de salud de la persona. El VA indagará sobre el fiduciario (por lo general, alguien elegido por el veterano), lo que incluye una verificación de antecedentes, una evaluación de crédito y entrevistas con el posible fiduciario y testigos de conducta y carácter.
Tutor asignado por un tribunal
Si un tribunal determina que una persona que no tenga un fiduciario ya no puede manejar por su cuenta el dinero o los bienes, se realiza una audiencia para nombrar a un tutor o curador. Como tutor, estás obligado a actuar de forma que vele por los intereses de la persona protegida y entregar al tribunal con regularidad registros contables detallados de los ingresos y los bienes de tu ser querido, y de cómo se está gastando su dinero.
Explotación financiera
A veces la mejor persona para el trabajo... no lo es. El apoderado con poder notarial, la persona en la cuenta corriente conjunta, el cuidador o el tutor podrían estarle quitando dinero a una persona incapacitada. Esto se conoce como abuso financiero contra adultos mayores.
La CFPB calculó que las pérdidas reales e intentadas causadas por estafas financieras dirigidas a adultos mayores superaron $6,000 millones entre el 2013 y el 2017. En el caso promedio, la víctima perdió $34,200; quienes fueron estafados por un fiduciario perdieron un promedio de $83,600.
Los indicios comunes de que un ser querido está siendo víctima de explotación financiera incluyen:
- dinero o bienes faltantes
- cambios abruptos en los hábitos de gastos o ahorros
- explicaciones enrevesadas sobre actividades financieras
- uso frecuente de cajeros automáticos
- retiros bancarios de gran cuantía y sin explicación
- entrega de regalos repentinos y excesivos
- un fiduciario, administrador de finanzas u otra persona intercepta a los visitantes o las llamadas, y no permite que el ser querido hable por sí mismo
Si crees que un pariente está siendo o ha sido víctima de explotación financiera, comunícate con las autoridades del orden público y tu agencia local de servicios de protección de adultos (en inglés). También puedes alertar al banco o a la compañía de tarjeta de crédito de tu ser querido. Si tu ser querido está en un hogar de ancianos, llama a la defensoría del pueblo en asuntos relacionados con el cuidado a largo plazo de tu estado (en inglés); tal vez también te convenga consultar a un abogado.
Conflictos familiares
El dinero, incluso el de otra persona, puede sacar a relucir lo peor en las familias, especialmente entre hermanos que empiezan a prever la inminencia de la muerte de uno de sus padres o, en el caso de alguien que padece demencia o la enfermedad de Alzheimer, lidian con una pena profunda porque su ser querido va dejando de ser la persona que era.
Jo McCord, una gerontóloga y asesora familiar de la Family Caregiver Alliance (en inglés), menciona estos asuntos comunes que causan discusiones:
- El familiar que es el cuidador principal no es quien tiene el poder notarial, y tiene que pedirle dinero a la otra persona.
- Los familiares creen que las responsabilidades están repartidas de manera injusta o demuestran favoritismo.
- Un familiar solo se presenta cuando el ser querido está hospitalizado.
- El cuidador principal desea que le paguen. ¿Qué cantidad es apropiada? ¿Deberían pagarles también, de forma proporcional, a los familiares que ayudan de vez en cuando?
Aborda estos problemas antes de que se agraven. La Family Caregiver Alliance sugiere estos pasos para minimizar o lidiar con los conflictos familiares:
Elaboren juntos los planes de cuidado y para encargarse de las finanzas, antes de que el ser querido se enferme.
Mantén registros detallados si eres el apoderado de uno de tus padres, y envíaselos a tus hermanos. Estás obligado por ley a mantener este tipo de registros, y actuar de manera transparente con la familia puede disminuir la desconfianza y evitar las disputas legales.
Piensa en lo que en realidad deseas de tus hermanos. Si necesitas ayuda con el tiempo o el dinero, pídela. No des por sentado que tus hermanos saben que estás pasando apuros.
Reúnanse en familia con regularidad para hablar sobre asuntos financieros y de cuidados.
Busquen un asesor imparcial si persiste un conflicto; por ejemplo, incluyan en la conversación a un terapeuta de familia, mediador, trabajador social o clérigo de confianza.
Consulta el directorio de miembros (en inglés) de la Association for Conflict Resolution para buscar profesionales en tu estado; algunos quizás se especialicen en asuntos relacionados con el cuidado de los adultos mayores. Un grupo de apoyo para cuidadores puede ser una opción para desahogarte.
No permitas que las disputas sobre la herencia dividan a la familia. Habla sobre la planificación patrimonial con tus padres mientras estén vivos.
Si los bienes se dividen de una manera que te parece desigual o injusta, recuerda que fue una decisión de tus padres, no de tus hermanos. Si sospechas que alguien ejerció una influencia indebida o cometió un crimen, consulta a un abogado o a un representante de los servicios de protección de adultos.