Visita el Monumento y Museo del 11 de Septiembre y conmemora el 20.º aniversario de la tragedia
Rinde homenaje a los que perdieron la vida ese día en la ciudad de Nueva York, casi 3,000 personas.
In English | A solo dos minutos a pie de One World Trade Center en el Bajo Manhattan, en la ciudad de Nueva York, encontrarás una obra arquitectónica que conmemora los sucesos catastróficos ocurridos en ese sitio el 11 de septiembre del 2001 y que te conmoverá. Con el Monumento y Museo del 11 de Septiembre (en inglés) se recuerda aquel día aciago en que unos terroristas estrellaron —con 16 minutos de diferencia— el vuelo 11 de American Airlines y el vuelo 175 de United Airlines contra las Torres Norte y Sur del World Trade Center, lo que causó la muerte de 129 personas que iban a bordo de los aviones, casi 2,200 personas que trabajaban en las oficinas y más de 400 socorristas.
Información para las visitas
Ubicación: 180 Greenwich St., en la ciudad Nueva York
Horario: el monumento está abierto todos los días de 10 a.m. a 5 p.m., mientras que el museo abre de jueves a lunes en el mismo horario (10 a.m. a 5 p.m.). El próximo 10 de septiembre, la última entrada del público al museo será a las 3:30 p.m.; el recinto estará cerrado al público el 11 de septiembre. (A continuación se ofrece más información sobre los actos conmemorativos del 11 de Septiembre).
Costo: las visitas al monumento son gratuitas. La entrada al museo cuesta $26 para los adultos o $20 para los mayores de 65 años; es gratuita para los familiares de las víctimas y para los socorristas.
Lo último por la COVID-19: el uso de mascarillas es obligatorio, y las entradas con horario específico deben comprarse por adelantado. A partir del 13 se septiembre, tanto los habitantes de Nueva York como los visitantes deberán presentar un comprobante de su vacunación contra la COVID-19 para poder ingresar a restaurantes y otros espacios interiores abiertos al público. Para estar al tanto de las reglas vigentes, visita NYCgo.com (en inglés).
El monumento
La sencillez que caracteriza este monumento, inaugurado el 11 de septiembre del 2011, invita a reflexionar sobre los vacíos dejados por la destrucción de los edificios. El diseño ganador del concurso de licitación, presentado por el arquitecto Michael Arad y el arquitecto paisajista Peter Walker, lleva como título "Reflecting Absence" (reflejo de la ausencia).
En medio de un paisaje de más de 400 robles bicolores, dos piscinas reflectantes —cada una con una superficie de un acre— cubren los sitios precisos donde se erguían las Torres Gemelas. Las piscinas se enmarcan entre cascadas de 30 pies de altura, donde 52,000 galones de agua por minuto caen por unas paredes de granito negro. El sonido del agua, que se sobrepone al ruido de la ciudad, tiene como objetivo incitar a la reflexión en silencio.
Es especialmente conmovedor ver los 2,983 nombres, grabados en bronce alrededor de las piscinas, de quienes cayeron abatidos por el terrorismo en los tres siniestros aéreos de ese día —en las Torres Gemelas, en el Pentágono y en una zona rural de Pensilvania—, así como de las seis personas fallecidas en 1993 cuando estalló una bomba en el estacionamiento de la Torre Norte.
Cerca de la piscina sur se encuentra el 9/11 Memorial Glade (claro conmemorativo del 11 de Septiembre), que contiene seis monolitos creados con piezas metálicas rescatadas de los escombros del World Trade Center. Con este espacio se rinde homenaje a los socorristas, trabajadores y sobrevivientes que se vieron expuestos a las toxinas liberadas por la explosión.
El museo
Para entrar al museo subterráneo de 110,000 pies cuadrados, hay que pasar por un pabellón sobre el nivel del suelo. En el interior del museo, la exhibición "In Memoriam" (En memoria) resalta con sobriedad la magnitud de la tragedia; en su exterior se exhiben los nombres de las 2,983 víctimas. Esta exhibición permite conocer sus rostros: desde el piso hasta el techo, las cuatro paredes se cubren de los retratos de las víctimas, que tenían entre 2 y 85 años y provenían de 90 países.
En otras partes del museo verás las Escaleras de los Sobrevivientes —por las que cientos de personas lograron escapar el 11 de Septiembre— y las bases de las columnas de acero originales en que se sustentaban las Torres Gemelas, que aquí parecen unos fantasmas surgidos de los escombros. En total, el museo cuenta con más de 14,000 artefactos rescatados después de los atentados o donados por las familias de las víctimas, por los socorristas sobrevivientes o por los que trabajaron en el lugar de los hechos en los días posteriores al 11 de Septiembre.
Se exhibe la bandana roja que llevaba Welles Remy Crowther, de 24 años, un operador de bolsa convertido en héroe de la Torre Sur. A sus 16 años, Crowther había empezado a trabajar como bombero voluntario en su ciudad natal de Upper Nyack, Nueva York, y se valió de esa capacitación el 11 de Septiembre para guiar a los sobrevivientes hasta la única escalera por la que se podía escapar. Para protegerse del humo, se tapó la nariz y la boca con la bandana. Desgraciadamente, terminó perdiendo la vida en el atentado.
Podrás leer algunos de los emotivos mensajes que los socorristas escribieron con su puño y letra en el casco amarillo de Debora Jackson, voluntaria de Salvation Army y residente de Brooklyn. Después de sentirse convocada a prestar ayuda, Jackson atendió las carpas de socorro, en los alrededores del lugar de los hechos, durante varios meses después del 11 de Septiembre. "A una de las mejores mujeres que jamás he conocido", escribió un trabajador agradecido.
Tampoco debes perderte la exhibición "In the Hunt for Bin Laden" (A la caza de Bin Laden), abierta hasta fines de enero, en la cual se da cuenta de las extraordinarias medidas tomadas por el Gobierno estadounidense para dar con el hombre considerado el autor intelectual de los atentados.
Actividades con motivo del 20.º aniversario
Para conmemorar este emblemático aniversario, los familiares de las víctimas se reunirán en la plaza del monumento a las 8:30 a.m. para iniciar un ritual que se celebra cada año: la lectura en voz alta de los nombres de los fallecidos en los atentados del 11 de Septiembre y en la explosión ocurrida en 1993. A medida que se dé lectura a los nombres, se guardará silencio en seis momentos distintos, correspondientes a las horas en que ocurrieron los impactos contra las dos torres y su posterior derrumbe, así como el atentado contra el Pentágono y la caída del vuelo 93 en Pensilvania. Se invitará a los centros de culto a hacer sonar sus campanas a las 8:46 a.m. para marcar la hora del impacto del primer avión.
Si bien este acto será solo para los familiares de las víctimas, en toda la zona circundante se podrá presenciar el espectáculo anual de luz "Tribute to Light". En el Bajo Manhattan, cerca del monumento, se proyectarán dos rayos de luz como símbolos de las Torres Gemelas, que alcanzarán una altura de hasta cuatro millas en el cielo y podrán verse a una distancia de hasta 60 millas. Además, las fachadas y techos de edificios en todas partes de la ciudad se iluminarán con luces de color azul celeste.