Todos los adultos deben tener una directiva anticipada en la que explican el tipo de atención médica que quieren —o no quieren recibir— cuando no puedan tomar decisiones por sí mismos. También deben designar a alguien que pueda hablar por ellos para asegurar que sus deseos se cumplan.
Los estados tienen formularios específicos para estos documentos, de modo que los profesionales de atención médica puedan reconocer el propósito del documento. Para confundir las cosas un poco más, los estados usan varios términos para describir sus formularios de directivas anticipadas.
El término directiva anticipada se refiere a los documentos que pueden incluir un testamento en vida, directiva de instrucciones, poder de atención médica o poder notarial para la atención médica.
- Un testamento en vida (o directiva de instrucciones) alerta a los profesionales médicos y a tu familia acerca de los tratamientos que quieres o no quieres recibir. En la mayoría de los estados, este documento solo tiene vigencia si cumples ciertos criterios médicos y eres incapaz de tomar decisiones.
- Mediante un poder notarial de atención médica (o un poder de atención médica) puedes elegir a un familiar o amigo en quien confíes para que tome decisiones de atención médica por ti cuando tú no puedas hacerlo. En este documento, debes darle instrucciones a la persona que elijas como tu portavoz (o agente o apoderado de atención médica) sobre el cuidado que deseas. Es muy importante que hables con esta persona acerca de tus deseos relativos al cuidado de salud.
Algunos estados combinan ambos formularios para que puedas registrar tus preferencias de tratamiento y el nombre de tu defensor de atención médica en un solo documento. Cuando descargues el formulario de tu estado, encontrarás lo que necesitas.