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La verdad sobre las cataratas y la cirugía de cataratas

Una encuesta reciente reveló que la mayoría de las personas están mal informadas.

In English l Una nueva encuesta realizada por AARP y Alcon revela que muchas personas están mal informadas acerca de la cirugía de cataratas. Si tú o alguno de tus padres deben someterse a este procedimiento, aquí encontrarás información exacta al respecto.

Cirujano con una jeringuilla

La cirugía de cataratas no es tan temible como crees.

Mito: La cirugía de cataratas es dolorosa.

Realidad: Puede ser incómoda pero no debería doler. Después de sedarte, el médico colocará anestesia en tu ojo, realizará una pequeña incisión a través de la cual podrá disolver la catarata con ultrasonido y reemplazará el cristalino opacado por otro sintético. Cuatro de cada cinco personas que participaron del nuevo Estudio sobre salud visual de AARP y Alcon informaron que la cirugía resultó más fácil de lo esperado.

Páginas sueltas de un calendario del mes de agosto.

No permitas que la visión borrosa afecte tu rutina diaria.

Mito: Podré darme cuenta cuando necesite la cirugía.

Realidad: La mayoría de las personas con cataratas no se da cuenta lo borrosa que se ha tornado su visión. Antes de la cirugía, la mayoría dice que las cataratas no interfieren con sus actividades diarias. Pero después del procedimiento, el 62% descubre que ahora disfruta más de la vida. A pesar de que la necesidad de la cirugía se da en personas de 60 a 70 y pico de años, las cataratas pueden desarrollarse mucho antes.

Dibujo de una mujer acostada en una cama de hospital recibiendo un suero.

Procura someterte a un examen oftalmológico si sufres cambios en la visión.

Mito: Las cataratas no tienen relación con la salud general.

Realidad: "Hay múltiples vínculos entre las enfermedades sistémicas y la formación de cataratas", dice Brian Proctor, Doctor en Optometría, oftalmólogo del Gottlieb Memorial Hospital en Melrose Park, Illinois. Las cataratas son un efecto secundario conocido de la diabetes y la presión alta, por ejemplo. La formación de cataratas también está asociada con el uso de medicamentos esteroides.

Automovil

¿Ves halos? Quizá tengas cataratas.

Mito: Es normal ver halos alrededor de las luces.

Realidad: Junto con la visión borrosa, los halos son un síntoma clásico de las cataratas, dice Proctor. A cuatro de cada cinco personas que participaron del estudio realizado por AARP y Alcon que se habían sometido a la cirugía de cataratas les resultó más fácil conducir después del procedimiento, tanto de día como de noche. (Los halos también pueden ser un síntoma de enfermedad de la córnea; si los ves, procura someterte a un examen oftalmológico).

Libro con unos lentes encima.

Quizá no necesites anteojos para leer después de la cirugía de cataratas.

Mito: Necesitaré anteojos para leer después de la cirugía de cataratas.

Realidad: No necesariamente. Los lentes sustitutos multifocales o monofocales corrigen la visión en varios puntos, de cerca y de lejos, y a veces pueden reducir la necesidad de anteojos. Sin embargo, Medicare considera que los lentes multifocales son una categoría superior a los lentes sustitutos estándar. Así que si quieres lentes especializados, piensa en que vas a pagar dinero adicional de tu bolsillo.

Hombre caminando.

La cirugía de cataratas puede ayudar a restablecer la visión.

Mito: La cirugía puede esperar, no me quedaré ciego.

Realidad: Las cataratas normalmente tardan años en desarrollarse pero pueden avanzar hasta un punto en el que ya no podrás ver personas ni objetos (quizá puedas percibir la luz). A pesar de que la cirugía de cataratas casi siempre restablece la visión, los médicos prefieren programar la cirugía antes de que los cristalinos se endurezcan, lo que sucede con la edad y hace que sea más difícil quitarlos y reemplazarlos.

Hombre levantando una caja.

¿La pérdida de la visión está afectando tu trabajo?

Mito: Las cataratas siempre requieren cirugía.

Realidad: La decisión de quitar las cataratas debe tomarse en función de cómo estén limitando tu visión y tu calidad de vida. "Para personas con ciertas ocupaciones, como un arquitecto o un conductor de camión, incluso una pequeña pérdida de visión interfiere con su actividad diaria", dice Proctor, "mientras que otras personas quizá prefieran esperar porque pueden ver todo lo que necesitan".

Mujer vestida de rojo en prueba de visión.

La recuperación de la cirugía de cataratas es más rápida de lo que piensas.

Mito: La recuperación de la cirugía de cataratas lleva semanas.

Realidad: La cirugía de cataratas es más sencilla de lo que solía ser. "Muchas personas tienen una visión 20/20 al día siguiente, mientras que otras necesitan hasta una semana para ver bien del ojo afectado", dice Proctor. "Depende de la potencia que usamos para romper los cristalinos". Cuanta más fuerza se necesite, más hinchazón vas a experimentar. "Dado que la mayoría de los médicos ya no usan suturas, no existe ninguna limitación física", afirma Proctor. Sin embargo, te advertirán que no debes frotarte ni presionar los ojos inmediatamente después de la cirugía.

Mujer vestida de rojo leyendo letras en prueba de visión.

El hecho de envejecer no significa que necesariamente vayas a tener cataratas.

Mito: Las cataratas son inevitables.

Realidad: No necesariamente. A los 80 años, más de la mitad de todos los estadounidenses tienen cataratas o han tenido una cirugía de cataratas, según el National Eye Institute (Instituto Nacional de la Visión). Eso significa que casi la mitad puede ver claramente. "Claramente hay un componente genético", dice McCartney. "Todos tenemos pacientes de 80 o 90 años que nunca necesitarán una cirugía de cataratas".

Mujer vestida de rojo con lentes oscuros.

¡Usa tus anteojos de sol! Puede ayudarte a desacelerar el crecimiento de las cataratas.

Mito: No hay nada que uno pueda hacer para desacelerar la formación de cataratas.

Realidad: Las cataratas son una parte natural del envejecimiento; sin embargo, puedes proteger tus ojos usando gafas de sol cuando estés al aire libre bajo el sol, tanto en verano como en invierno. "La exposición crónica a la radiación ultravioleta puede ayudar a que las cataratas crezcan más rápidamente", dice Proctor. Algunos datos sugieren que los complementos alimentarios que contienen zinc, luteína y zeaxantina —como aquellos formulados para reducir el riesgo de degeneración macular— también pueden ayudar a desacelerar el crecimiento de las cataratas. "Las pruebas son diversas, pero corres poco riesgo al probarlo", afirma McCartney.