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¿Qué sucede con el Seguro Social en un cierre del Gobierno?

Sea que haya un acuerdo presupuestario o no, aún se pagarían los beneficios.


spinner image Compilacion de imagenes del Seguro Social, un abanido de billetes de 20 y la cúpula del Capitolio de Estados Unidos
BACKYARDPRODUCTION/GETTY IMAGES

La legislación de gastos aprobada por el Congreso el 22 de marzo, y firmada por el presidente Joe Biden al día siguiente, mantendrá operativa la parte del gobierno que incluye la Administración del Seguro Social (SSA) hasta el 30 de septiembre, poniendo fin a la amenaza de un cierre del gobierno durante al menos el año fiscal actual.

Pero incluso si una futura disputa presupuestaria en el Capitolio paralizara al gobierno, los beneficiarios del Seguro Social seguirían recibiendo sus pagos mensuales.

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En lenguaje federal, los beneficios del Seguro Social son “gastos obligatorios”. Tienen una fuente de financiamiento dedicada y permanente (principalmente, los impuestos sobre la nómina que la mayoría de nosotros pagamos sobre nuestros ingresos laborales) y no se ven afectados por el proceso federal de asignaciones.

Sin embargo, la SSA no es inmune a la amenaza de cierre. Su presupuesto administrativo está sujeto a la aprobación del Congreso, y los legisladores determinan cuánto de los ingresos del Seguro Social puede destinarse a gastos operativos, como procesar solicitudes de beneficios, alquilar espacio para oficinas y pagar los salarios de los empleados.

Plan para imprevistos

La amenaza de cierre surge de la incapacidad del Congreso de aprobar un presupuesto federal para el año fiscal 2024, que comenzó el 1.º de octubre de 2023. Los legisladores han mantenido al Gobierno en marcha al aprobar una serie de medidas, llamadas resoluciones continuas, que mantienen el financiamiento de agencias federales en niveles de gasto del 2023.

La medida más reciente de este tipo, firmada por el presidente Joe Biden el 9 de marzo, financia un conjunto de agencias federales hasta el 30 de septiembre, fecha en que finaliza el año fiscal actual. La última medida afecta al resto del gobierno, incluida la SSA. Una resolución continua anterior fijó como fecha límite el 22 de marzo para que los legisladores financien esas agencias y eviten un cierre parcial.

En caso de que se produjera un cierre, la SSA implementaría un plan de contingencia (en inglés) detallado, emitido en agosto del 2023. Esto es lo que dice el plan de la SSA sobre varias funciones y servicios del Seguro Social en caso de cierre.

Pagos de beneficios

“Continuaremos las actividades esenciales para nuestras operaciones de servicio directo y las necesarias para asegurar el pago preciso y oportuno de los beneficios”, indica el plan de la SSA.

Los ingresos por impuestos sobre la nómina continuarán dirigiéndose a los fondos fiduciarios que proporcionan dinero para cubrir los beneficios jubilatorios, los beneficios para sobrevivientes, los beneficios para familiares y el Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI), y la SSA dice que tiene autoridad legal para procesar los pagos incluso si las asignaciones del Congreso se agotan.

En caso de que se produjera un cierre, la SSA implementaría un plan de contingencia (en inglés) detallado, emitido en agosto del 2023. Esto es lo que dice el plan de la SSA sobre varias funciones y servicios del Seguro Social en caso de cierre.

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“Continuaremos las actividades esenciales para nuestras operaciones de servicio directo y las necesarias para asegurar el pago preciso y oportuno de los beneficios”, indica el plan de la SSA.

Los ingresos por impuestos sobre la nómina continuarán dirigiéndose a los fondos fiduciarios que proporcionan dinero para cubrir los beneficios jubilatorios, los beneficios para sobrevivientes, los beneficios para familiares y el Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI), y la SSA dice que tiene autoridad legal para procesar los pagos incluso si las asignaciones del Congreso se agotan.

La SSA también administra la Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI), un beneficio de red de seguridad para personas con ingresos muy bajos que tienen problemas visuales, tienen una discapacidad o tienen 65 años o más. Si bien la SSI se paga con ingresos generales del Gobierno, la SSA dice que tiene suficiente dinero previamente asignado para continuar haciendo pagos de la SSI durante los próximos tres meses, mucho más que cualquier cierre anterior.

Servicios que no se verán afectados

Si bien algunas oficinas federales despedirían temporalmente a la mayoría de sus trabajadores y, en esencia, dejarían de funcionar en caso de cierre, la SSA inicialmente mantendría trabajando a cerca del 85% de sus aproximadamente 62,000 empleados para continuar funciones y servicios esenciales. Además del pago de los beneficios, estos incluyen:

La SSA también administra la Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI), un beneficio de red de seguridad para personas con ingresos muy bajos que tienen problemas visuales, tienen una discapacidad o tienen 65 años o más. Si bien la SSI se paga con ingresos generales del Gobierno, la SSA dice que tiene suficiente dinero previamente asignado para continuar haciendo pagos de la SSI durante los próximos tres meses, mucho más que cualquier cierre anterior.

Servicios que no se verán afectados

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Si bien algunas oficinas federales despedirían temporalmente a la mayoría de sus trabajadores y, en esencia, dejarían de funcionar en caso de cierre, la SSA inicialmente mantendría trabajando a cerca del 85% de sus aproximadamente 62,000 empleados para continuar funciones y servicios esenciales. Además del pago de los beneficios, estos incluyen:

Servicios que se verían afectados

Estos son algunos de los servicios y actividades del Seguro Social que se suspenderían en caso de cierre de acuerdo al plan de la SSA:

La SSA dice que “reevaluaría” las cifras de los despidos temporales si se produce un cierre por más de cinco días, después del cual se podría enviar a más empleados a casa, como sucedió en los cierres anteriores. Pero incluso en ese caso, la agencia dice que retendría a los trabajadores “esenciales para nuestras operaciones de servicio directo”.

“Por lo general, los solicitantes y los beneficiarios deben recibir el mismo servicio de siempre”, dice Kathleen Romig, directora de Políticas del Seguro Social y Discapacidad en el Center on Budget and Policy Priorities.

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