Skip to content
 

Los asesores financieros y profesionales: Lo que ellos saben y tú no

La verdad lisa y llana de un planificador financiero, una asesora profesional y una especialista en recursos humanos.

Un asesor financiero dando una asesoría a una pareja mayor en su hogar

Istock

Un asesor financiero puede ayudarte a manejar tu dinero.

In English |

El planificador financiero

Allan Roth, de 58 años

Fundador de Wealth Logic, Colorado Springs, Colorado

Eres demasiado mesurado. Es difícil lograr que las personas frugales de pronto comiencen a gastar el dinero invertido en su cartera de acciones. Aunque todos sabemos que no nos podemos llevar nuestras riquezas con nosotros al morir, la frugalidad es algo innato en estas personas. Intenta considerar una compra como algo práctico: vale la pena gastar en un masaje si reduce el estrés y mejora la salud, no solo porque es placentero.

Eres demasiado generoso. Muchas veces he visto a clientes regalarles muchísimo dinero a sus hijos, sin embargo, no estoy seguro de que esto los ayude. Algunos de estos hijos han dejado sus trabajos para vivir vidas de privilegios. De hecho, esta generosidad a veces parece realmente perjudicar las relaciones, en las que los hijos exigen cada vez más.

Todos estamos programados a ser malos inversionistas. Actuamos irracionalmente, por ejemplo, cuando compramos activos después de haber subido su valor, solo para venderlos cuando lo pierden. Una señal que indica que estás dando un paso en falso es que te hace sentir bien, y en general, te sientes mal al dar un paso acertado. Es mucho más lógico comprar cuando los precios están bajos y vender cuando suben que lo contrario, pero para lograrlo tenemos que luchar contra nuestros instintos.

Ya no eres tan perspicaz económicamente como antes. Después de los 60 años, la agudeza financiera disminuye un promedio de un punto porcentual al año. Para protegerte mejor contra el fraude y los estafadores, ejercítate regularmente para mantener más aguda tu mente al mismo tiempo que te mantienes en buena forma física. Solicita los consejos de familiares en los que confías. Considera consolidar tus cuentas para simplificar tu vida financiera. Muéstrate escéptico si algo aparenta ser demasiado bueno para ser cierto.

Podrías no saber cuán cómodo te sientes con tu plan hasta que la bolsa de valores caiga. Mis clientes que pasaron por las caídas de los años 2000-2002 y de nuevo en los años 2008-2009 saben a qué me refiero. Y ellos saben que, durante los mercados en baja, lo que define a un buen inversionista es no entrar en pánico.

La especialista en recursos humanos

Suzanne Lucas, de 43 años

Especialista en recursos humanos corporativos por 10 años y bloguera conocida como Evil HR Lady, Basel, Suiza

La discriminación y el temor van en ambos sentidos. Algunos gerentes no se sienten cómodos como jefes de personas mayores que ellos —al igual que algunas personas no se sienten cómodas con jefes menores que ellas—.

Elimina de tu currículum ese trabajo que desempeñaste hace 30 años. No tiene relevancia con lo que puedes hacer en la actualidad. Y te hace lucir mayor. La discriminación por edad es real.

Los adultos jóvenes de hoy en día no son peores de lo que tú eras cuando comenzaste a trabajar. La generación mayor siempre piensa que la generación más joven es un problema. No juzgues a las personas por su generación para luego asombrarte cuando ellas te juzgan por la tuya.

No nos importa cuánto tiempo tienes trabajando aquí. Los ascensos y los aumentos no se ganan por longevidad. Casi todos los trabajos tienen un nivel en el que la experiencia adicional no ayuda.

No eres suficientemente ambicioso. No nos importa qué edad tienes; nos importa a dónde vas. Una persona de 25 años casi siempre tiene planes para ascender, pero muchas de 50 años o más no los tienen. Aclara que te interesa mejorar tus conocimientos, destrezas y habilidades.

La asesora profesional

Beverly Jones, de 69 años

Autora de Think Like an Entrepreneur, Act Like a CEO (Piensa como un empresario, actúa como un director ejecutivo), Washington

Deja de preocuparte tanto sobre el prestigio y de utilizar sus adornos como medidas de tu éxito. Preocuparte sobre si perderás prestigio o aparentarás ser un novato puede cegarte a las oportunidades e impedirte encontrar el próximo trabajo interesante.

Las personas te tratan como alguien demasiado viejo si actúas y hablas como si fueras demasiado viejo. Si te resientes cuando se efectúan cambios y te quejas sin cesar, estás comunicando que no estás exactamente capacitado para el trabajo. Puedes transformar la forma en que las personas te perciben.

Cómo saber si no te están diciendo toda la verdad

Bryn Joyce, de 69 años, detective jubilado de homicidios de Baltimore, aprendió a reconocer la pura verdad interrogando a víctimas, testigos y delincuentes.

  • Se mueven nerviosamente. Se tocan la nariz. Se halan una oreja. Es como los signos hechos por los jugadores de póquer.
  • Hablan muy rápidamente. Casi ni puedes entender lo que dicen. Es como si verdaderamente no quisieran que los oigas.
  • Intentan cambiar el tema. Están intentando distraerte.
  • Repiten la pregunta cuando sabes bien que ellos la oyeron alta y claramente. "Espera un minuto. Déjame entenderlo bien. En serio, me estás preguntado..." Es una táctica para demorar mientras intentan formular una respuesta convincente.
  • No te miran a los ojos. O si no, te miran a los ojos. Ayuda saber cómo la persona se comporta normalmente. Si en general siempre te miran a los ojos y de pronto no lo hacen, probablemente no te están diciendo toda la verdad. Y viceversa.