Javascript is not enabled.

Javascript must be enabled to use this site. Please enable Javascript in your browser and try again.

Skip to content
Content starts here
CLOSE ×

Buscar

Leaving AARP.org Website

You are now leaving AARP.org and going to a website that is not operated by AARP. A different privacy policy and terms of service will apply.

¿Puedes obtener vitamina D del sol en forma segura?

Unos pocos minutos al sol podrían ser beneficiosos, pero los riesgos incluyen cáncer de piel y arrugas.


spinner image Una mujer se pone protector solar
ALEKSEJ SARIFULIN / GETTY IMAGES

Si te alimentas bien, no es difícil obtener una cantidad suficiente de la mayoría de las vitaminas: puedes obtener mucha vitamina C de todo tipo de frutas y verduras, vitamina E de verduras de hojas verdes y frutos secos, y vitamina A de zanahorias y huevos.

“La vitamina D es diferente”, dice el Dr. Anastassios Pittas, profesor de Medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Tufts, en Boston. Explica que, como la vitamina es escasa en los alimentos comunes, la madre naturaleza nos da una solución: producimos nuestra propia vitamina D cuando la piel está expuesta al sol. Muchas personas podrían aumentar el nivel de vitamina D en la sangre — lo que potencialmente brinda protección a los huesos y aporta otros beneficios de salud— a través de la exposición regular de algo de piel al sol, sin protección.

spinner image Image Alt Attribute

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP

Pero decir que puedes obtener vitamina D de ese modo no quiere decir que debas hacerlo.

La mayoría de las autoridades de salud pública en Estados Unidos advierten que los riesgos de cáncer y envejecimiento de la piel son mayores que los beneficios de aumentar la exposición al sol para obtener vitamina D. Organizaciones como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) y la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD) dicen que las personas deben usar constantemente un protector solar, sombreros y gafas de sol y estar a la sombra para protegerse del sol, especialmente al mediodía.

“Si te expones al sol del mediodía sin protector solar, es cierto que puedes aumentar mucho el nivel de vitamina D en la sangre... pero no creo que valga la pena correr ese riesgo”, dice la Dra. JoAnn Manson, profesora de Medicina en la Facultad de Medicina de Harvard y directora de Medicina Preventiva en Brigham and Women’s Hospital en Boston. Cuando disfrutas de la naturaleza al aire libre en forma segura, también produces algo de vitamina D, explica, y puedes obtener lo que falta de los alimentos o con suplementos.

Manson colaboró en la redacción de las recomendaciones sobre la vitamina D de la Academia Nacional de Medicina (NAM) —conocida antes como Instituto de Medicina—, un grupo asesor sin fines de lucro. Las recomendaciones de la NAM dicen que la mayor parte de las personas obtienen algo de vitamina D con la exposición al sol, pero no recomiendan buscar esa exposición en forma intencional. En vez de eso, dicen que los adultos deben recurrir a alimentos y suplementos para obtener 600 UI (unidades internacionales) diarias de vitamina D hasta los 70 años y 800 UI diarias después de los 70. Las fuentes alimenticias incluyen salmón, atún claro enlatado y algunos hongos, junto con bebidas y alimentos fortificados, como leche o jugo de naranja. Si bien requiere un esfuerzo adquirir suficiente vitamina D de los alimentos, los suplementos son una solución simple para ese problema, dice Manson.

Algunos científicos opinan que la exposición intencional al sol debe incluirse entre las fuentes de vitamina D. Esa es la recomendación común en el Reino Unido, donde las agencias de salud pública respaldan la idea de que un poco de exposición regular al sol tiene beneficios que se equilibran con los riesgos, dice Ann Webb, profesora de Radiación Atmosférica en la Universidad de Manchester. “Solo se requiere una exposición breve para obtener la vitamina D”, explica.

Pittas dice que esa práctica se podría usar en forma segura en Estados Unidos. “Cuando pensamos en la exposición al sol, me temo que nos han lavado el cerebro para pensar solo en los efectos negativos”, dice. “Pero también tiene beneficios”. Esos beneficios, agrega, incluyen no solo la producción de vitamina D, sino también mejor estado de ánimo y mejor sueño.

“Creo que la forma evolucionaria apropiada de obtener vitamina D es a través de la piel”, dice Pittas.

Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) no promueven la exposición intencional al sol, pero dicen que los adultos mayores tienen mayor riesgo de presentar niveles bajos de vitamina D, particularmente porque la habilidad de la piel de producir esa vitamina disminuye con la edad y, además, las personas mayores pasan más tiempo en lugares cerrados.

¿Qué debe hacer una persona consciente de la salud? Estos son algunas cosas para tener en cuenta:

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

1. No hay una prescripción de exposición al sol que se adapte a todos

Incluso los científicos que promueven la exposición solar no pueden ofrecer un consejo general sobre cuánto sol tomar. Eso se debe a que el tono de la piel, el lugar geográfico, la época del año, la hora del día, la presencia de nubes, la ropa y otros factores influyen en la ecuación. En general, cuanto más clara es la piel y más cerca se está del ecuador, más rápida es la producción de vitamina D.

Webb dice que su investigación en el Reino Unido —ubicado más al norte que cualquier punto de Estados Unidos— sugiere que, en la mayoría de los días de primavera y verano, las personas de piel clara que llevan pantalones cortos y camiseta y no se ponen protector solar pueden obtener una cantidad suficiente de vitamina D con 10 o 15 minutos de exposición al sol del mediodía. Las personas con piel más oscura necesitan entre 25 y 40 minutos, dice, porque la melanina adicional que hace que la piel sea más oscura actúa como un “protector solar natural”.

Para las personas de piel clara, el problema está en recordar aplicarse un protector solar o cubrirse la piel después de unos minutos, comenta. Para quienes tienen piel más oscura, la cantidad de tiempo necesario puede resultar un desafío. El beneficio para muchos, dice, podría ser el almacenamiento de suficiente vitamina D para poder evitar los suplementos, incluso en invierno, cuando la luz solar del norte es débil y no puede activar la producción.

Los estudios sugieren que hay una gran variación en la velocidad a la que disminuye el nivel de vitamina D en la sangre en distintas personas, a lo largo de semanas y meses, luego de la exposición efectiva al sol.

Seguro

Planes de seguro de la vista de VSP™, de AARP®

Planes de seguro de la vista exclusivos para los socios y sus familias

See more Seguro offers >

2. Los protectores solares no bloquean completamente la producción de vitamina D, pero las ventanas sí lo hacen

Hay estudios que demuestran que el uso de un protector solar no está asociado con niveles bajos de vitamina D, dice el Dr. Henry Lim, dermatólogo en Henry Ford Health en Detroit y expresidente de la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD) y de la Asociación Americana de Dermatología (ADA). Probablemente eso se debe a que la mayoría de las personas no utilizan suficiente cantidad de protector solar para bloquear los rayos ultravioletas B (UVB) que activan la producción de vitamina D, dice.

El uso estricto de las cantidades recomendadas de un protector solar con alto factor de protección (FPS) —una onza completa (suficiente para llenar un vasito de licor) aplicada al menos 15 minutos antes de salir al aire libre— y otras medidas de protección solar podrían limitar considerablemente la producción de vitamina D, reconoce Lim. Pero, agrega, la mayoría de las personas que pasan tiempo al aire libre obtienen al menos algo de vitamina D, incluso si siguen generalmente los consejos de seguridad para la exposición al sol. Por cierto, no producirás vitamina D si te sientas frente a una ventana. Los rayos UVB no pasan a través del vidrio.

3. El daño del sol es acumulativo

Los dermatólogos que se oponen a la exposición al sol sin protección subrayan que el daño que puede conducir a un cáncer de piel es acumulativo. “Las pequeñas cantidades se suman”, dice la Dra. Elizabeth Hale, profesora clínica adjunta de Dermatología en el Centro Médico Langone de NYU y vicepresidenta sénior de la Skin Cancer Foundation, una organización sin fines de lucro.

Lim dice que la exposición acumulativa al sol está directamente asociada con los cánceres de piel más comunes: el carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas. Si no se detectan a tiempo y se extirpan temprano, esos cánceres pueden ser desfigurantes o causar otros problemas.

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

La conexión entre la exposición al sol a lo largo de la vida y el melanoma, un cáncer de piel con mayor mortalidad, no está tan clara, dice Lim. Pero, agrega, en las personas con piel clara, el melanoma está claramente relacionado con múltiples quemaduras causadas por el sol.

De acuerdo con la Academia Estadounidense de Dermatología, aproximadamente 1 de cada 5 personas en EE.UU. padecerá cáncer de piel a lo largo de la vida; 1 de cada 27 hombres y 1 de cada 40 mujeres está en riesgo de padecer melanoma.

El cáncer no es la única preocupación: el daño acumulado del sol puede causar arrugas, manchas, flacidez y otras señales de envejecimiento de la piel, dicen los dermatólogos.

4. Los suplementos son bastante seguros

Manson es la investigadora principal en un estudio de casi 26,000 adultos mayores saludables, la mitad de los cuales tomaron suplementos de 2,000 UI de vitamina D durante un promedio de 5.3 años. “No hubo efectos secundarios notables”, dice. Si bien las conclusiones sobre los beneficios han sido variadas (ver recuadro), los suplementos son tan inocuos que las personas pueden sentirse seguras tomando entre 1,000 y 2,000 UI de vitamina D diarias “a modo preventivo”, dice. Las personas que sufren ciertos trastornos podrían necesitar dosis más altas, pero deberían tomarlas bajo supervisión médica, agrega.  

Los complejos multivitamínicos con 1,000 UI de vitamina D son una manera económica y fácil de obtener suficiente, dice Lim.

5. Las camas de bronceado son siempre una mala idea

Las lámparas bronceadoras de uso en interiores aumentan los riesgos de cáncer de piel, pero no elevan la cantidad de vitamina D porque emiten muy pocos rayos UVB, dicen Lim y Hale. “El bronceado en interiores tiene un efecto carcinógeno directo”, dice Hale.

6. Nadie te pide que seas un ermitaño

Pittas dice que muchas personas “le tienen miedo al sol” y llevan una vida sedentaria, sin salir al aire libre.

Nadie está a favor de eso. “Yo aliento a todos, en particular a los adultos mayores, a realizar actividad física regularmente y pasar tiempo al aire libre”, dice Manson. “Considero que eso es sumamente importante para la buena salud cardíaca, cognitiva y emocional”. El uso de un protector solar no reduce esos beneficios, agrega.

¿Por qué es importante la vitamina D?

La vitamina D ayuda a que el organismo absorba el calcio y es fundamental para la fortaleza de los huesos, la salud del sistema inmunitario y el buen funcionamiento de músculos y nervios, dicen los Institutos Nacionales de la Salud. Existe cierta controversia sobre los niveles ideales de vitamina D, pero la Academia Nacional de Medicina dice que la mayoría de los adultos en el país tienen niveles adecuados para la salud ósea y pueden mantenerlos si consumen entre 600 y 800 UI diarias.

Los estudios de suplementos con dosis más altas de vitamina D han arrojado resultados dispares. Un amplio ensayo realizado en Estados Unidos halló que, en general, no hubo una disminución de casos de cáncer, enfermedades cardíacas ni fracturas óseas cuando adultos mayores sanos tomaron 2,000 UI diarias, dice la doctora investigadora JoAnn Manson. Pero quienes tomaron los suplementos fueron menos propensos a sufrir cánceres avanzados, morir de cáncer o adquirir enfermedades autoinmunitarias, como la artritis reumatoide o la psoriasis. Los investigadores están estudiando si la vitamina D puede tratar o prevenir la COVID-19.

Pittas dice que los estudios enfocados en personas con alto riesgo de ciertos trastornos podrían producir los resultados más promisorios. Él encabezó recientemente un estudio que sugirió que las altas dosis de vitamina D reducen el riesgo de diabetes en las personas con prediabetes.

Discover AARP Members Only Access

Join AARP to Continue

Already a Member?

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.