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¿Sientes dolor en el bajo vientre? Tal vez se deba a la disfunción del suelo pélvico

Cuatro cosas que los hombres y las mujeres deben saber sobre este trastorno común que a menudo se pasa por alto.


spinner image Una persona lleva su mano al estómago en señal de dolor
SCIENCE PHOTO LIBRARY

 

Si has consultado con un médico por sufrir estreñimiento, dolor durante el acto sexual, molestias al orinar o incontinencia, es posible que te hayan diagnosticado algún trastorno del área ventral: vulvodinia, cistitis intersticial (síndrome de vejiga dolorosa) o síndrome del intestino irritable, por nombrar algunos. Sin embargo, el culpable tal vez sea un trastorno que a menudo se pasa por alto.

La disfunción del suelo pélvico “es sumamente común”, dice la Dra. Sangeeta Mahajan, directora de la División de Medicina Pélvica Femenina y Cirugía Reconstructiva en University Hospitals Cleveland Medical Center. Mayo Clinic estima que hasta el 50% de las personas con estreñimiento crónico tienen disfunción del suelo pélvico. “También es uno de los trastornos que a menudo no se diagnostican correctamente”, dice Mahajan.

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8 señales de advertencia de disfunción del suelo pélvico

La disfunción del suelo pélvico puede causar una variedad de síntomas que incluyen:

  • Necesidad de ir al baño con frecuencia, o interrupción constante e involuntaria del flujo de orina
  • Estreñimiento
  • Hacer mucha fuerza para evacuar
  • Pérdida de materia fecal u orina (incontinencia)
  • Dolor al orinar
  • Dolor lumbar sin ninguna otra causa
  • Malestar o dolor constante en la zona pélvica
  • Dolor durante el acto sexual (en las mujeres)

Fuente: Cleveland Clinic

El suelo pélvico es un conjunto de músculos que soportan la vejiga, el recto y, en las mujeres, el útero y la vagina. En los hombres, soporta la próstata. Cuando esos músculos se tensan demasiado y no pueden relajarse, pueden surgir varios síntomas. Es posible que se escape orina o que resulte difícil evacuar. El acto sexual puede resultar doloroso para las mujeres y puede sobrevenir dolor lumbar.

Eso se debe a que “los órganos, los músculos y los nervios del piso pélvico se comunican entre sí”, explica el Dr. Darren Brenner, un gastroenterólogo en la Facultad de Medicina Feinberg de Northwestern University. Y un problema en un área puede afectar fácilmente a otra área próxima.

Pero con el tratamiento adecuado —por lo general, fisioterapia especializada, pero también acupuntura, meditación e incluso bótox en casos extremos—, la disfunción del suelo pélvico puede ser un trastorno controlable.

Estas son cuatro cosas que debes conocer sobre la disfunción del suelo pélvico, entre ellas cómo saber si sufres este trastorno y cuáles son los tratamientos.

1. Los hombres pueden sufrir de disfunción del suelo pélvico

Mientras que con frecuencia la disfunción del suelo pélvico se asocia con las mujeres (mayormente porque el embarazo es una causa común), los hombres también pueden padecer este trastorno. El problema se presenta en millones de hombres en todo el mundo cada año, dice Cleveland Clinic.

Algunos hombres pueden sentir dolor en el pene o vacilación al orinar, dice Carrie Pagliano, una fisioterapeuta en Arlington, Virginia. Otras veces puede presentarse como dolor en los testículos, explica Alicia Jeffrey-Thomas, una fisioterapeuta de Boston con una cuenta en TikTok (en inglés) en la que con frecuencia aborda problemas del suelo pélvico.

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“La tendencia suele ser evaluar solo los testículos, cuando en realidad muchas veces se trata de un dolor reflejo de los músculos mismos”, dice.

Todo tratamiento de los trastornos del suelo pélvico en los hombres debe comenzar con un examen de próstata para descartar otros problemas, como el cáncer, agrega Pagliano.

2. El dolor durante el acto sexual es un síntoma común

Si bien la disfunción del suelo pélvico puede causar una variada gama de síntomas, “el mayor indicio para mí es el dolor [de las mujeres] durante el acto sexual”, dice Mahajan. Otros síntomas típicos incluyen dolor o presión en la pelvis, dolor al terminar de orinar o dolor durante un examen pélvico, agrega.

El estreñimiento también puede recibir un diagnóstico incorrecto. “Veo a muchos pacientes que dicen: ‘Obviamente, tengo el síndrome del intestino irritable y no respondo a ningún otro tratamiento’”, dice Brenner. “Y yo les digo: ‘Tal vez no sea el síndrome del intestino irritable. Tal vez se trate de un problema con sus músculos del suelo pélvico’”. 

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La incontinencia —pérdida de orina cuando te ríes o estornudas, o la necesidad de correr al baño para no mojar la ropa interior— puede ser otra señal de problemas del suelo pélvico, dice la Dra. Erin T. Carey, una ginecóloga especializada en trastornos del suelo pélvico en la Facultad de Medicina de University of North Carolina.

Sin embargo, no son muchos los médicos que acostumbran a evaluar los músculos del suelo pélvico durante un examen pélvico, por lo que no identifican la causa del dolor o la molestia. “Simplemente piensan que [los pacientes] están reaccionando en forma exagerada”, dice Mahajan.

Si le pides a tu médico que te haga un examen del suelo pélvico, debería poder evaluar el tono muscular empujando con los dedos los músculos vaginales, dice Carey. Para los hombres, el examen se realiza en el recto. “Incluso una buena cantidad de presión no debería causar dolor”, dice Carey.

3. Tratarse uno mismo puede empeorar el problema

No intentes tratar la disfunción del suelo pélvico por tu cuenta, dice Jeffrey-Thomas. Podrías terminar, por ejemplo, fortaleciendo músculos que ya están contraídos si intentas tratar la incontinencia con ejercicios de Kegel.

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“Para algunas personas, los ejercicios de Kegel pueden ser beneficiosos para mejorar la coordinación y la conciencia corporal y la resistencia, pero en otras personas, pueden empeorar el problema”, dice.

Tampoco debes comprar una vara vaginal u otro tipo de objeto de venta libre sin la instrucción de un fisioterapeuta, dice Carey. Podría exacerbar el problema.

Tu mejor opción es hallar un fisioterapeuta que se especialice en salud pélvica. La Asociación Estadounidense de Fisioterapia (APTA) tiene un buscador en línea (en inglés) que te ayudará a encontrar a alguien cerca de ti. Incluso si solo puedes costear una o dos citas, vale la pena, dice Carey. “Lo que quieres es asegurarte de que haces los ejercicios correctamente”, agrega.

Otros tratamientos incluyen meditación, yoga, “cualquier tipo de relajación en la que [los pacientes] relajan los músculos del suelo pélvico”, dice Mahajan. Algunos de sus pacientes hacen acupuntura para el suelo pélvico; a otros les prescriben relajantes musculares. En los casos extremos, se pueden utilizar inyecciones de bótox, dice.

4. La disfunción del suelo pélvico a menudo es consecuencia de un trauma

¿Te preguntas cómo desarrollaste este trastorno? A menudo, la disfunción del suelo pélvico es consecuencia de un trauma, ya sea un trauma físico a los músculos o un trauma emocional, con frecuencia en la niñez.

No es inusual que las mujeres experimenten disfunción del suelo pélvico después de dar a luz, dice Carey. Otras causas físicas incluyen una operación quirúrgica del suelo pélvico, estreñimiento crónico (empujar constantemente puede crear problemas en el suelo pélvico, lo cual puede empeorar el estreñimiento), lesiones en la zona del suelo pélvico (como resultado de un accidente de auto, por ejemplo), obesidad y el paso de los años. El trastorno también puede ser hereditario.

Brenner, el gastroenterólogo, dice que cuando un paciente se queja de estreñimiento y él sospecha que podría haber disfunción del suelo pélvico, le pregunta si ha sufrido algún trauma. Si los músculos del suelo pélvico están contraídos a causa de reacciones emocionales subconscientes, los pacientes también deben seguir un tratamiento clínico especializado, explica. “Si alguien tiene antecedentes de trauma o abuso y no los aborda, la fisioterapia para el suelo pélvico es ineficaz en todos los casos”, agrega.

Trastornos del suelo pélvico vs. disfunción del suelo pélvico

Ambos problemas son comunes, afectan a la zona pélvica y tienen síntomas y causas similares. Pero los trastornos del suelo pélvico son diferentes a la disfunción del suelo pélvico. Un trastorno del suelo pélvico, como el colapso de un órgano pélvico, se produce cuando los músculos o el tejido conectivo de la zona pélvica se debilitan o dañan. La disfunción del suelo pélvico es el resultado de músculos contraídos que no se relajan. La buena noticia: ambos problemas pueden tratarse una vez que se confirma el diagnóstico.

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