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Un brindis por una mejor jubilación

Un empresario trabajó con AARP para obtener seguridad para los trabajadores de Oregón.

Saleem Noorani abre una botella de vino espumoso.

Patricia Mahoney

"Me encanta haber ayudado a AARP a cuidar a un segmento de la población que a menudo pasa desapercibido", dice Saleem Noorani.

In English | Como dueño de una empresa pequeña, Saleem Noorani estaba preocupado por el futuro de sus empleados. ¿Estaban ahorrando para su jubilación? Con solo una docena de trabajadores en sus tres licorerías de Oregón, Noorani sabía que sería demasiado costoso contratar una empresa de inversión para establecer un plan 401(k). 

Hace unos dos años descubrió que en la oficina estatal de AARP en Oregón tenían la misma preocupación, y que habían estado luchando por un programa de ahorros jubilatorios para los empleados de empresas pequeñas. AARP recientemente había ayudado a persuadir al Gobierno estatal a establecer un plan de inversión. Noorani, de 60 años, quien ya era voluntario del Consejo Ejecutivo de AARP Oregón, se unió a esta iniciativa. "La población de Oregón es de más de 4 millones de personas, y medio millón son socios de AARP", comentó. "Los funcionarios de Gobierno escuchan cuando llamamos porque saben que nuestros problemas son importantes para sus constituyentes".

Él se concentró por completo en su trabajo como voluntario y ofreció su empresa como conejillo de indias para el programa de ahorros. Además, brindó asesoramiento a los creadores del plan. 

Sus esfuerzos rindieron frutos. El año pasado, Oregón fue el primer estado del país en ofrecer seguridad financiera para los empleados de empresas pequeñas por medio de un plan de ahorros a nivel estatal. Desde entonces, otros siete estados han aprobado programas similares.  

Noorani dice que está agradecido por haber participado en el lanzamiento de OregonSaves: "Me encanta haber ayudado a AARP a cuidar de una parte de la población que a menudo se pasa por alto".

—Noorani ha sido socio de AARP desde el 2008.


El impulso para comenzar su propio negocio

Un taller motivó a Eva Bonilla a crear su empresa de excursiones turísticas.

Tarde en la mañana, de camino a Cowtown, Eva Bonilla guiaba a un grupo de turistas en el Fort Worth Stockyards National Historic District, y observaban a un rebaño de ganado de cuernos largos salir de su corral. Cuatro años atrás, Bonilla se sentía entusiasmada por iniciar su próxima aventura. La residente de Fort Worth de cuarta generación participó en grupos comunitarios, organizaciones culturales y asociaciones educativas. También administró la oficina y los registros del personal de una compañía farmacéutica. Pero Bonilla, quien es casada y tiene tres hijas, nunca había dirigido su propio negocio. ¿Sería ese el momento correcto? Buscó respuestas en un taller de AARP. 

Basado en el libro Life Reimagined: Discovering Your New Life Possibilities, el propósito del taller era ayudar a los participantes de 50 años o más a reflexionar sobre su etapa actual en la vida, y a crear planes detallados sobre qué rumbo tomar.

Bonilla descubrió que su experiencia laboral le servía para dirigir una compañía de turismo en el futuro. Dentro de un año obtuvo su certificación como profesional en hospitalidad, y a los 66 años lanzó Vamos DFW Tours, donde ofrece servicios en inglés y español a turistas. 

"Me encanta presumir de mi ciudad", comenta. Y le va bastante bien: "Si quisiera, podría trabajar todos los días, incluso los sábados y domingos, pero organizo mi propio horario". 

Los beneficios de la empresa van más allá de lo financiero, agrega Bonilla. "Dirigir un negocio me ayuda a mantenerme conectada, energética y a progresar. Si no hubiera sido por ese taller, no sé si hubiera creado Vamos. AARP me dio el impulso que tanto necesitaba".

—Eva Bonilla, de 69 años, ha sido socia desde 1999.

SIGUIENTE: Nuestra historia

Muchos de nuestros programas y actividades más populares y perdurables se remontan directamente a las experiencias de nuestra fundadora, la Dra. Ethel Percy Andrus.