Informes de fideicomisarios del Seguro Social y Medicare muestran problemas financieros

Si las proyecciones de los fideicomisarios son correctas, cuando se agoten los fondos fiduciarios combinados del Seguro Social en el 2035, el programa aún podrá pagar el 79% de sus beneficios actuales.

Específicamente, hay dos fondos fiduciarios del Seguro Social: el fondo fiduciario del seguro para adultos mayores y sobrevivientes (OASI) y el fondo fiduciario de beneficios por discapacidad (DI). Se proyecta que el fondo fiduciario OASI, que paga los beneficios jubilatorios y para sobrevivientes, se agotará en el 2034 —el mismo pronóstico del año pasado—. Después de eso, podrá pagar el 76% de los beneficios programados con ingresos tributarios continuos.

Se estima que el fondo fiduciario DI se agotará en el 2065, una extensión de 13 años de la estimación del año pasado del 2052; se podrá pagar el 92% de los beneficios.

Medicare ofrece acceso esencial al cuidado médico cuando los adultos mayores de 65 años más lo necesitan. El Fondo Fiduciario de Seguro Hospitalario (HI) de la Parte A de Medicare, que paga los gastos de hospital de pacientes ambulatorios, aún podrá pagar el 90% de sus beneficios cuando se agote el dinero en el 2026.

El Fondo Fiduciario de Seguro Médico Complementario (SMI) para la Parte B de Medicare, que paga por los servicios médicos y ambulatorios, y la Parte D, que cubre los beneficios de medicamentos recetados, son solventes indefinidamente, gracias al financiamiento de ingresos generales y las primas de beneficiarios.

"Una manera de proteger a Medicare es reducir el costo del cuidado de la salud y de los medicamentos recetados", dice Jenkins. "AARP agradece la legislación reciente que ayudará a los adultos mayores del país y proveerá estímulo económico a la vez que garantiza que los fondos fiduciarios del Seguro Social y Medicare sean compensados ante la demora de los pagos de impuestos a cargo de los empleadores. Estamos listos para trabajar con el Congreso y la Administración para mejorar la salud y la seguridad financiera de todos en EE.UU.".

El impacto de la pandemia en los fondos fiduciarios es incierto

La pérdida de empleos en el 2020 a causa del brote de coronavirus —y, por consecuencia, la pérdida de los ingresos por impuestos sobre la nómina para el Seguro Social y Medicare— significa que las proyecciones informadas por los fiduciarios pueden ser demasiado optimistas, especialmente a corto plazo.

En EE.UU. se han perdido 22 millones de empleos desde que el brote de coronavirus paralizó una gran porción de la economía hace un mes, y eso implica que 22 millones de trabajadores (y sus empleadores) no contribuirán impuestos sobre la nómina para apoyar al Seguro Social y Medicare.

Y otras personas que han experimentado reducciones de salarios contribuirán menos a los fondos. En Estados Unidos, hasta la fecha, ha habido aproximadamente 800,000 casos confirmados de COVID-19 —la enfermedad causada por el nuevo coronavirus— y casi 45,000 muertes, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

El comisionado del Seguro Social, Andrew Saul, advirtió que la crisis económica de este año podría impactar negativamente al Seguro Social y Medicare. Las proyecciones actuales no reflejan los posibles efectos de la pandemia de COVID-19 en el programa del Seguro Social.

"Dada la incertidumbre asociada con estos impactos, los administradores creen que no es posible ajustar las estimaciones de manera precisa en este momento", indica Saul. "La duración y severidad de la pandemia afectarán las estimaciones presentadas en el informe de este año y el estado financiero del programa, particularmente a corto plazo".

Los administradores advirtieron en una carta al Congreso que el fondo fiduciario HI para la Parte A de Medicare se quedará sin dinero en menos de 10 años, y que el Congreso debe aumentar los impuestos, ajustar los beneficios o aprobar una combinación de cambios para asegurar su solvencia a largo plazo. Los impuestos sobre la nómina para los trabajadores del país y sus empleadores proveen casi todo el dinero para el Seguro Social y financian significativamente el programa de Medicare.