La ley que protege a los adultos mayores necesita dinero y apoyo

La Older Americans Act (OAA) se creó en 1965 junto con sus pares más famosos, Medicare y Medicaid, como parte de un esfuerzo histórico de los legisladores por cuidar de los mayores de 65 años.

Esta ley ha sido una red de seguridad, que llena los vacíos que deja el Seguro Social y Medicare para ayudar a las personas a vivir vidas independientes. Sus siete secciones principales brindan servicios como comidas a domicilio, apoyo para cuidadores familiares, transporte a citas médicas, protección contra el maltrato de personas mayores y capacitación para el trabajo. Este año, la OAA se convierte en el centro de atención cuando el Congreso realice una reautorización periódica. Esta es una oportunidad para que los legisladores perfeccionen los programas para los adultos mayores y establezcan objetivos de financiamiento.

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Alcance de la OAA

• 1.3 millones de personas atendidas por la OAA en el 2016

• 145 millones de comidas entregadas a hogares por programas como Meals on Wheels, y pagadas por la OAA

• 24 millones de viajes proporcionados a lugares como consultorios médicos

• 40 millones de horas financiadas para pagar ayudas de cuidado personal

• 10.6 millones de horas subsidiadas de cuidados diurnos para adultos mayores

¿Cómo nos afecta la OAA?

• Ayuda a los necesitados. Alrededor de 11 millones de personas en Estados Unidos reciben asistencia directa de los programas provistos en virtud de la ley, desde Meals on Wheels hasta el transporte a consultas médicas. "El rango de servicios proporcionados a través de la OAA —junto con Medicare, Medicaid y el Seguro Social— garantiza que la población mayor de nuestra nación no se quede atrás en sus años dorados", señala el representante Bobby Scott (demócrata por Virginia), presidente del Comité de educación y trabajo de la Cámara. La legislación también paga la asistencia para el cuidado personal y el cuidado diurno para adultos. "Esta ley ayuda a tus familiares, amigos y seres queridos", señala Megan O'Reilly, vicepresidenta de salud y familia de AARP. "Si no conoces a alguien que se beneficia de esta ley hoy, lo conocerás mañana".
• Lucha contra el maltrato de personas mayores. La ley proporciona orientación y financiación limitada para proteger a las personas mayores vulnerables del abuso o la negligencia en los hogares de ancianos y otros establecimientos.
• Ayuda a las personas a permanecer en sus hogares. Aproximadamente el 90% de las personas mayores quieren permanecer en sus comunidades, en lugar de pasar a recibir atención institucionalizada. "El temor de tener que ingresar a un hogar de ancianos, y la pérdida de independencia y la amenaza de empobrecimiento que esto conlleva, pesa mucho en la mente de muchas personas mayores y sus cuidadores", señaló la antigua vicepresidenta de AARP, Joyce A. Rogers, en una carta a los legisladores. La financiación de la OAA para programas que apoyan la vida independiente "es una gota en un balde de agua en comparación con el presupuesto nacional", señala Dan Adcock, del National Committee to Preserve Social Security and Medicare. Además de los servicios, la ley financia investigaciones y programas que promueven la independencia.
• Apoya a cuidadores. La ley otorga subvenciones a los estados para cubrir servicios como consejería y capacitación.
• Proporciona empleo para los necesitados. La OAA promueve oportunidades de trabajo a tiempo parcial para adultos de bajos ingresos en lugares como hospitales, escuelas y centros para personas mayores.
• Se enfoca en la población de edad avanzada. La ley establece metas de ingresos durante la jubilación, oportunidades de empleo, acceso a la atención médica y servicios de atención a largo plazo.
• Apoya a las personas en Estados Unidos mayores de 60 años. La OAA establece agencias federales y locales para abogar por los ciudadanos mayores.

¿Qué va a cambiar ?

Quienes apoyan la ley afirman que se necesita más dinero para mantener el ritmo con la creciente población de los mayores de 60. La financiación para la ley ha aumentado un 1.1% anual, en promedio, desde el 2001, a $2,060 millones ($2.06 billion) este año. "Los cambios demográficos de nuestro país son tales que tenemos que dedicar más recursos, ser más innovadores y prestar más atención a los problemas que afectan a la población mayor", señala la senadora Susan Collins (republicana por Maine), presidenta del Comité Especial del Senado sobre Envejecimiento.

Estas son algunas ideas que están bajo consideración

• Abordar la desnutrición Los programas de alimentos ayudan a ahorrar dinero en costos médicos. La OAA podría realizar más exámenes de detección de malnutrición y fortalecer los programas de alimentación que se llevan a los hogares o que se ofrecen en lugares como los centros para personas mayores, donde las comidas comunitarias pueden combatir el aislamiento. "Podemos ayudar a los adultos mayores a lograr mejores resultados de salud si podemos reunirlos", menciona Collins.
• Asistir a cuidadores Más de 40 millones de personas brindan ayuda no remunerada a sus seres queridos. "Hay tan pocos servicios de relevo disponibles para darle un descanso a los cuidadores", señala Collins. "Realmente necesitamos considerar esa opción".
• Combatir la enfermedad de Alzheimer Se espera que la cantidad de personas con la enfermedad casi se triplique a 14 millones para el 2050. Collins espera que haya más recursos.
• Más asistencia para movilidad Collins señala que le gustaría ver programas piloto para mejorar el transporte para la población mayor.