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Pensar globalmente y actuar localmente durante la pandemia

Soluciones innovadoras para ayudar a los adultos mayores en la comunidad.

Pareja con máscara recibiendo comida

xavierarnau/GETTY

In English | En todo el mundo, son muchas las comunidades —tanto locales como virtuales— que están innovando, motivadas por la necesidad de ayudar a los adultos mayores y a personas inmunodeprimidas a hacer frente a la pandemia de COVID-19. Las prácticas que se muestran promisorias varían desde tecnología para satisfacer las necesidades básicas y combatir el aislamiento, hasta esfuerzos para incentivar la creatividad individual y derrumbar las prácticas que no propician el intercambio.

Satisfacción de las necesidades básicas

Prácticamente de la noche a la mañana, el mundo virtual de muchas personas se convirtió en su centro de gravedad, y las últimas tecnologías acercan cada vez más a los vecinos. Entre las nuevas comunidades virtuales se cuenta #StudentsAgainstCorona, un punto de reunión para estudiantes que se ofrecen como voluntarios para ayudar a personas mayores con la oferta de servicios esenciales "sin contacto", como hacer compras en el supermercado. Este grupo se fundó en Europa y ahora está en nueve países en todo el mundo. Un servicio de taxi llamado She-Taxi, cuyas dueñas son mujeres, se unió con HelpAge en Kerala, India, para compartir información a través de WhatsApp a fin de entregar gratuitamente medicamentos recetados a adultos mayores. En Carbondale, una zona rural de Colorado, un residente hace visitas diarias al único supermercado de la localidad y toma fotos de los productos disponibles, que luego publica en Facebook para que los vecinos puedan evitarse un viaje innecesario. 

Información y recursos útiles

Durante esta crisis de salud que evoluciona rápidamente, el acceso a información relevante y confiable y a recursos útiles es vital. En www.aarp.org/elcoronavirus, AARP brinda información y recursos para ayudar a las personas mayores y a quienes las cuidan a protegerse del coronavirus y prevenir su propagación. La Cruz Roja Española creó un curso en línea sobre el coronavirus para los residentes, y el Ndlovu Youth Choir en Sudáfrica hizo un video (en inglés) para compartir consejos útiles a través de la canción.

Algunos Gobiernos locales actualizan regularmente las fuentes de información con datos y recursos útiles. Por ejemplo, el sitio web (en inglés) de Natick, Massachusetts, brinda actualizaciones diarias sobre los casos de COVID-19 y la cantidad de casos que salieron de la cuarentena; también contiene un enlace a una herramienta de evaluación (en inglés) en línea las 24 horas que permite que los usuarios verifiquen sus síntomas. En Australia Occidental, un Gobierno local ha expandido el acceso al servicio de wifi en edificios públicos, y otro abrirá parcialmente las bibliotecas para que puedan usarlas quienes no tienen internet en casa.

Para asegurar que las personas se cuiden durante el aislamiento, algunos centros para adultos mayores están creando nuevas actividades virtuales o pasando a internet las actividades existentes. En Washington, D.C., un directorio (en inglés) creciente de actividades en línea incluye programas de acondicionamiento físico, eventos sociales y actividades artísticas. Un participante agradeció al personal por continuar con las clases de ukelele en línea y dijo: "Después me maravillé de que mi ansiedad había desaparecido y estuve con buen ánimo el resto del día”. 


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Innovaciones sistémicas y multisectoriales

Algunas de las iniciativas más innovadoras han derrumbado prácticas divisorias y requirieron la colaboración de diferentes sectores. Activistas en el Reino Unido trabajaron para cambiar el horario de uso gratuito de los pases de autobús para las personas mayores a fin de alinearlos con los horarios tempranos de "compras para mayores" que establecieron los supermercados. En Irlanda, cuando los vehículos de los trabajadores de la salud eran inmovilizados mediante cepos en los hospitales mientras sus dueños estaban trabajando, el ejecutivo de servicios de la salud habló con la policía local para suspender la práctica. El servicio de correos de Irlanda y el Departamento de Protección Social han establecido “agentes temporales” de emergencia que pueden cobrar las pensiones en nombre de las personas que están en cuarentena voluntaria. Y en Israel, la unidad de defensa está creando un plan con los Gobiernos locales para cuidar a la población mayor del país y a otros grupos de alto riesgo.

La lucha contra el aislamiento

En momentos en que las comunidades ponen en práctica el distanciamiento social para detener la propagación del virus, la conexión social se vuelve más importante. La tecnología cumple una función central para que eso se pueda concretar. AARP lanzó un sitio web llamado Mi Comunidad para ayudar a las personas a organizar grupos locales de ayuda y ofrecerse como voluntarias para llamar a los adultos mayores aislados. En Francia, Les Petits Frères des Pauvres  (en francés) adaptó tabletas con una interfaz simplificada que es más fácil de usar para las personas mayores. Una comunidad virtual para jubilados en Singapur, Aspire55 (en inglés), lanzó una academia para ayudar a los adultos mayores a aprender a usar productos y servicios en línea (como las aplicaciones para la entrega a domicilio de compras del supermercado), mientras que la ciudad de Leeds en el Reino Unido ofrece clases telefónicas gratuitas de una hora de duración para que los adultos mayores aprendan a usar los teléfonos móviles y las tabletas para comunicarse por videollamada con sus seres queridos. Y la empresa ZoraBots (en inglés), con sede en Bélgica, está enviando en forma gratuita robots a hogares de ancianos en toda Europa para aliviar la soledad de los residentes.

A pesar de toda la tecnología, algunas de las intervenciones con mayor efecto son soluciones creativas que proporcionan un "toque" humano y trascienden la distancia física y las barreras creadas por la pandemia. En los hogares de ancianos, el personal está permitiendo que los familiares "visiten" a los residentes: a tal fin, acercan a los residentes a ventanas grandes para que puedan ver a sus seres queridos del otro lado mientras se comunican por señas. Help Hub (en inglés) es un servicio gratuito en el Reino Unido creado por un grupo de terapeutas calificados que brinda apoyo profesional individual a las personas aisladas. Y en algunas zonas rurales, los propietarios de establos llevan ponis hasta las ventanas para brindar momentos de alegría a adultos mayores y niños en cuarentena.

Atisbos de luz

Esta crisis de salud pública está demostrando que a veces, en las condiciones más difíciles, surge lo mejor y más innovador de los impulsos humanos. Al canalizar esa creatividad en respuestas impulsadas por la comunidad, se crea el tejido conectivo necesario para llegar a los residentes que tienen una necesidad crítica de apoyo y servicios locales. 

AARP está colaborando con organismos como la Organización Mundial de la Salud y la Federación Internacional sobre el Envejecimiento en una nueva iniciativa para examinar estos tipos de respuestas comunitarias innovadoras; esperamos publicar estas buenas prácticas tan pronto como estén disponibles. AARP International también está creando una página web para compartir estos y otros recursos globales.