Regalos creativos y con un toque especial para el Día de San Valentín

Si a tu pareja le encantan los dulces, tienes la posibilidad de preparar un paquete con tus golosinas favoritas, y darle un toque especial al añadir datos curiosos. Una nota que acompañe a un paquete de M&Ms, por ejemplo, podría explicar cómo se estamparon los dulces con una "m" negra en 1950 —para ayudar a los consumidores a distinguir los auténticos de las imitaciones— antes de cambiar en 1954 a la "m" blanca que se utiliza ahora.

Joyas

Las joyas personalizadas pueden hacer que otro de los regalos más populares del Día de San Valentín sea más significativo. Una pulsera grabada con el nombre de una mascota. Un colgante que guarde las cenizas de un ser querido. Un reloj con un mensaje en la pantalla.

Se trata de "una pieza única que es completamente diferente, que no puedes encontrar en ningún otro sitio", dice Leanne Kolodziej, directora de Jewelry by Johan en Oakdale, Minnesota (e hija del propietario, Johan Rust).

La tienda está especializada en piezas realizadas con materiales atípicos. Entre ellos se encuentran meteoritos (perfectos para los que adoran el dicho de "te quiero de aquí a la luna y de regreso"), cornamenta y 110 tipos diferentes de madera, incluidas variedades exóticas como el jabí o la koa.

La personalización va un paso más allá. Kolodziej dice que algunos clientes han llevado trozos de un bate de béisbol o de un banco de taller para incorporarlos a anillos.

Las opciones personalizadas en línea de minoristas como Eve's Addiction y Oak & Luna incluyen collares con monogramas y anillos con nombres.

Flores y plantas

Los ramos de flores suelen durar entre siete y doce días, si reciben los cuidados adecuados. Por otro lado, una suscripción para recibir flores o plantas puede proporcionar hasta 12 meses de vegetación, y algunas empresas ofrecen varios niveles de servicio.

La empresa en línea UrbanStems, que trabaja con granjas certificadas por Rainforest Alliance, ofrece entregas de ramos de flores semanales, quincenales o mensuales, con tres planes adaptados a diferentes gustos florales. ​

También existen suscripciones para obsequiar plantas. Lively Root, con sede en San Diego, California, ofrece distintas variedades para los destinatarios de regalos con o sin afición por la jardinería. Los planes ofrecen plantas fáciles de cuidar, aptas para mascotas o que son raras y especiales.

Las personas que tienen suficiente con regalar solo una cosa quizás deban pensar en una planta exclusiva, que se pueda disfrutar durante años. Una opción de Lively Root es el anturio, una planta tropical que florece durante todo el año y produce una hoja roja en forma de corazón.

Alinda Drury y su esposo Tom.

Cortesía Rebecca Morse

Regalos caseros

Tienes la posibilidad de crear un regalo hecho en casa, que generalmente tiene más valor porque, supuestamente, le has dedicado tiempo y esfuerzo. Piensa en una carta de amor de tres páginas o en una foto enmarcada de un recuerdo compartido.

En una ocasión, Dana Lam, de 51 años, le regaló a su novio una caja que contenía 101 cosas que le encantaban de él. Escribió a máquina frases como: "me encanta que vivas el momento" y "me encanta tu cuerpo", luego las cortó las en tiras y se las entregó en una cajita.

"Él dice a las personas que es el mejor regalo que le han hecho", comenta Lam, una empresaria de Phoenix. Lam dice que este proyecto puede "causar un gran impacto", incluso con 20 cumplidos en forma de mensajes escritos a mano en cartulina.

Como era una gran cantidad de frases que escribió, acabó buscando ideas para cumplidos en internet porque "a veces no soy supercreativa", dice. "Robo ideas de otras personas de forma descarada".

Las personas ingeniosas pueden utilizar sus destrezas para crear regalos que duren toda la vida. Alinda Drury, de 69 años, dedicó cuatro o cinco horas a coser una bata de felpa para su esposo, Tom, a mediados de los años 80. Eligió un material azul porque era el color favorito de su esposo.

"No es nada especial, pero la hice yo", dice Drury, que vive en Rochester, Nueva York. La pasada Navidad, le ofreció a Tom hacerle una nueva bata porque la original "se estaba poniendo algo raído".

Él no quiso. Recuerda Drury: "me dijo: 'me encanta y la voy a conservar para siempre'".

Robin L. Flanigan es una colaboradora que cubre temas sobre salud mental, educación e interés humano. Su trabajo se ha publicado en People, USA Today y Education Week y es autora del libro infantil M is for Mindful.