7 consejos para que el horno y los quemadores de la estufa queden brillantes

Elige el limpiador de hornos adecuado

Existen muchos productos comerciales. O puedes preparar tu propio detergente con los productos que ya tienes en tu cocina, utilizando ingredientes naturales como bicarbonato sódico, jabón de fregar, vinagre y limones.

Comienza con la opción más suave y ve aumentando la intensidad de a poco, dice Kait Schulhof, del blog y pódcast A Clean Bee. A ella le gusta usar vinagre blanco destilado porque “es seguro, económico, muy eficaz y relativamente sostenible”.​ Puedes mezclarlo con bicarbonato y un poco de detergente para crear una pasta para una limpieza profunda o para eliminar restos quemados.

Si usas productos comerciales, consulta el sitio web (en inglés) del Environmental Working Group para ver cuáles son los ingredientes potencialmente perjudiciales. Consulta también el manual de la estufa para ver las recomendaciones de limpieza del fabricante. Una limpieza incorrecta podría cancelar la garantía.

Retira las rejillas del horno para limpiarlas por separado

Retira las rejillas y ponlas en remojo durante la noche en una bañera o pila de fregadero llena de agua jabonosa y tibia para ablandar la grasa y la comida quemada. Si usas una bañera, coloca toallas para evitar rayarla. Por la mañana, friega las rejillas para quitar cualquier resto de suciedad que pudiera haber quedado.

Limpia el interior del horno​

Si el interior del horno no está muy sucio, límpialo con una esponja o un paño embebido en vinagre blanco destilado, aconseja Schulhof. Otro método natural consiste en aplicar la pasta de bicarbonato de sodio en las paredes del horno y dejarla reposar de 30 a 60 minutos o toda la noche. Después, limpia con una esponja embebida en vinagre blanco destilado y quita toda la pasta de las ranuras del horno.

Para una limpieza profunda o si el horno está realmente muy sucio, considera utilizar un limpiador de hornos comercial. Hay quienes prefieren la espuma a la forma líquida porque la espuma se adhiere a las superficies, y el líquido rociado puede chorrear. Usa un cepillo de dientes viejo para limpiar las esquinas y las ranuras. Echa un vistazo a Easy-Off Fume Free Oven Cleaner Spray, Goo Gone Oven & Grill Cleaner o Kona Safe/Clean Grill Cleaner.

Evita el jabón porque deja partículas, dice Schulhof, y desconfía de cualquier cosa que no indique claramente que se puede usar en hornos porque puede dejar un residuo que cause humos cuando el horno se calienta.

Utiliza la función de autolimpieza del horno

Si el horno está realmente sucio, usa la función de autolimpieza. Antes de activar la función de autolimpieza, vacía el horno (incluidas las rejillas) y usa una herramienta de silicona o de madera para raspar la comida incrustada a fin de minimizar el humo y reducir el riesgo de incendio. Después del proceso, que dura al menos un par de horas, deja enfriar el horno y, si es necesario, limpia el interior con un paño.

“El calor hace todo el trabajo difícil por ti”, dice Holdefehr. “El horno se limpia con poco esfuerzo y sin muchos productos químicos”.

Cuando Elizabeth Skidmore, de 59 años y residente en San Petersburgo (Florida), se mudó a una nueva casa en el 2022, probó la función de autolimpieza del horno tras intentar limpiarlo ella misma sin éxito. "Tardó varias horas [pero el horno] quedó tan limpio... fue increíble", dice.

El proceso de autolimpieza calentará la cocina y puede producir humos, así que abre las ventanas o enciende un ventilador. Además, asegúrate de que los niños y las mascotas, especialmente los pájaros, están fuera de la habitación, recomienda Holdefehr.

No olvides la puerta del horno

Incluso si usas la función de autolimpieza, la ventana de la puerta del horno puede no verse limpia. Rocía un paño con limpiacristales o extiende una capa gruesa de la mezcla de bicarbonato de sodio sobre el cristal, deja que repose entre 20 minutos y toda la noche y luego pasa un paño.

La mayoría de las puertas de horno se abren, lo que permite limpiar la hendidura entre la puerta y el horno, y facilita el acceso para fregar el interior del horno, señala Holdefehr. Aunque la puerta sea fácil de abrir, puede ser pesada, por lo que es posible que necesites ayuda para quitarla y volverla a poner, añade.

Elije los productos adecuados para limpiar el tope de tu estufa.

El proceso de limpieza y los productos que utilices dependerán del tipo de tope. El agua jabonosa tibia o la pasta de bicarbonato de sodio dan resultado en la mayoría de las superficies, incluidas las bandejas colectoras, las bobinas eléctricas y las rejillas de gas, dice Holdefehr. Limpia bien y asegúrate de que no quede ningún residuo.

Para el acero inoxidable, utiliza vinagre blanco para limpiar y eliminar las huellas, dice Schulhof. Para el cristal, utiliza la pasta de bicarbonato sódico con jabón líquido para las marcas de quemaduras (déjala reposar al menos una hora), la pasta con vinagre para las marcas de agua (déjala reposar dos noches, envuelta en plástico) o un producto especial como Weiman Glass Cook Top Cleaner & Polish, dice Schulhof. Considera también usar Carbona Ceramic Cooktop Cleaner y EZ Brite Glass and Ceramic Cooktop Cleaner & Conditioner.​

Cuando se trata de limpiar, un pequeño esfuerzo rinde mucho. Cuanto más regularmente limpies el horno y el tope de cocina, más tiempo podrá pasar entre las limpiezas profundas. Y el horno y los quemadores limpios hacen que la cocina sea más acogedora, un lugar agradable donde crear platos deliciosos.