Los principales problemas de la piel para las mujeres mayores de 50 años

1. Rosácea. Deja de usar el maquillaje de cobertura total por un tiempo. Robinson dice que primero “investigues qué está causando que la piel se enrojezca o ruborice y produzca erupciones, y que evites provocar brotes. Mantén un diario de las cosas que activan una reacción. Los factores comunes son el clima extremadamente frío o caluroso, la limpieza con agua caliente, la cafeína, la comida picante, el alcohol y la fragancia en el detergente”.

Un dermatólogo puede diagnosticar tu tipo de rosácea (hay cuatro tipos), un tratamiento y la gravedad. Robinson también sugiere conseguir “una receta para la crema tópica Rhofade —un descongestionante— para encoger los vasos sanguíneos dilatados que causan rojez, y usar [la mascarilla] Therapeutic Sulfur Mask de Peter Thomas Roth ($47, sephora.com)” para la rosácea con brotes que parecen acné". Mi consejo de belleza es usar limpiadores no irritantes, humectantes reparadores de barrera con ceramidas o niacinamida y un protector solar mineral de amplio espectro con un FPS de 30 o más. Oculta completamente todo con la base Smooth Liquid Camo Foundation de Dermablend ($38, dermablend.com) o la crema correctora Bye Bye Redness Neutralizing Color-Correcting Cream de IT Cosmetics ($32, sephora.com) para proyectar confianza sin que se vea como una máscara.

2. Brotes en los adultos. Evita los productos para adolescentes. “El truco aquí es recordar que no tienes 15 años y evitar los tratamientos de acné para adolescentes, los cuales aumentan la sequedad de una piel postmenopáusica madura que ya está reseca y delgada”, dice Robinson. Un limpiador diario a base de ácido salicílico “y el uso de un retinoide y un humectante sin aceite pueden ayudar a acelerar la regeneración celular para revelar las células saludables de la piel y evitan que los poros se tapen. También limpia tu teléfono celular diariamente con un pañuelo de Clorox y usa el altavoz del teléfono o audífonos para las llamadas con el fin de mantener la piel limpia y libre de bacterias”.

Para una solución rápida, sugiero un maquillaje sin aceite para adultos con una amplia variedad de tonos para lograr una cobertura auténtica de la piel, como las bases líquidas TruBlend Matte Made Liquid Foundation de CoverGirl ($11, ulta.com) o Fit Me Matte + Poreless Liquid Foundation de Maybelline ($8, ulta.com).

3. Eczema. Los parches irritados de piel inflamada, escamosa y agrietada (también conocidos como dermatitis atópica) causados por comezón pueden competir por atención incluso con el lápiz labial rojo más intenso. “Por cierto, un dermatólogo puede hacer una prueba de parche para identificar los activadores dietéticos o ambientales, pero intenta seguir una dieta de eliminación para encontrar al culpable. Con frecuencia son los lácteos”, dice Robinson. El eczema viene de familia pero también puede ser activado por los huevos, el maní y los mariscos. ¿Qué productos de belleza debes cambiar? Opta por un limpiador suave, lávate el cutis con agua tibia —no caliente— y mantén la piel hidratada con cremas y lociones terapéuticas sin fragancias ni colorantes que se enfoquen en el eczema y reduzcan la incomodidad y la irritación. Los productos de Aveeno, CeraVe, Avène y Eucerin con ingredientes como ceramidas, glicerina y ácido hialurónico ayudan a reparar la barrera humectante de la piel.

4. Piel demasiado seca. Después de años de preocupación por una piel grasosa y brotes, la sequedad extrema llega de sorpresa para muchas mujeres mayores de 50 años. Solamente un médico puede diagnosticar trastornos de piel seca como la psoriasis y el eczema, pero una piel postmenopáusica que se ve seca todos los días también requiere reconsiderar el cuidado de la piel. Robinson sugiere “un régimen de un limpiador suave como CeraVe por las mañanas, seguido por un limpiador con base de alfa hidroxiácidos por las noches para evitar que las células muertas y opacas se queden en la superficie de la piel y creen apariencia y textura secas”. También puedes amplificar esos beneficios con maquillaje humectante. Evita los productos en polvo; los humectantes con color y los rubores en crema pueden ser tus mejores aliados.

5. Cuero cabelludo seco, escamoso y con comezón. Tus blusas negras están cubiertas de escamas, ¿pero es caspa o sequedad? “Hazte una evaluación con un dermatólogo certificado”, sugiere Robinson. “A veces las afecciones como psoriasis o hasta un hongo tópico pueden ser las causantes de escamas y comezón en el cuero cabelludo. La afección también puede ocurrir en las cejas, pero no es contagiosa. La caspa no se te puede pegar”. Es bueno saberlo. Si la causa es el cuero cabelludo seco, hidrátalo con champú suave sin sulfato y evita usar demasiado champú en seco. Robinson dice que “la mayoría contienen alcohol y actúan absorbiendo los aceites naturales del cuero cabelludo, lo que podría causar una acumulación que empeora la caspa”.

En la farmacia, busca un champú anticaspa que tenga piritionato de zinc, como Dermacare Scalp Dandruff Shampoo de Dove ($5, target.com) o Clinical Strength Dandruff Shampoo de Head & Shoulders ($9, target.com), que tienen poderes antibacterianos y antimicóticos; los que tienen alquitrán de hulla como el T/Gel Extra Strength Therapeutic Shampoo de Neutrogena ($8, target.com), que desaceleran el crecimiento de las células de la piel, o los que tienen sulfuro de selenio como Selsun Blue Moisturizing Dandruff Shampoo ($7, target.com), que desaceleran el crecimiento de bacterias y hongos. Después alterna para evitar crear tolerancia a un ingrediente.

6. Herpes labial. ¿Preocupada por los “probadores de lápiz labial" llenos de gérmenes que hay en las tiendas? Deberías estarlo. El lápiz labial es un ambiente cálido y húmedo que puede generar infección y transferirse fácilmente de boca a boca. “Evita compartir cualquier cosa que toque tu boca: lápiz labial, bálsamo labial, utensilios de comer”, dice Robinson. “El virus del herpes tipo 1 causa herpes labial. Una vez que infecta, el virus permanece inactivo hasta que se reactiva con la exposición al sol, el frío extremo, un resfriado o un sistema inmunológico disminuido”. Los productos sin receta aprobados por la FDA, como Abreva, pueden aliviar el dolor, la comezón y el ardor, y un bálsamo labial con FPS de 30, como Herpecin L, puede proteger contra los rayos ultravioleta. Un médico puede recetar un medicamento antiviral como Acyclovir o Valacyclovir para acelerar el proceso de curación de dos semanas.

7. Espinillas y poros dilatados. Los poros dilatados surgen después de la menopausia y le dan a la piel un aspecto sucio y una sensación granulosa, especialmente alrededor de la nariz. Eso se debe a una disminución del colágeno y la elastina que afirman la piel, al daño causado por el sol y a cambios hormonales. Todos esos factores hacen que la piel se afloje y los poros se estiren y debiliten. Se tapan fácilmente con células muertas, aceite y maquillaje, lo que crea la ilusión de espinillas enormes en el espejo de aumento. Una limpieza suave pero minuciosa y una rutina exfoliante pueden ayudar. “La lenta regeneración celular es otra vez la amenaza”, dice Robinson. “Los alfa hidroxiácidos hacen que las células de la piel se sigan cayendo y moviendo. No te esfuerces por resolver esto en casa”. Un tratamiento facial suave en un spa diurno puede ayudar a destapar y exfoliar sin el estrés de hacerlo tú misma.

8. Vello facial. ¿De repente te aparecen vellos en la barbilla o un bigote ligero? Robinson dice que a medida que las “hormonas femeninas bajan, podrías ver algunos vellos por la barbilla o sobre los labios”. No entres en pánico. Estas son cosas normales después de la menopausia porque el exceso de hormonas masculinas (testosterona) activa el vello facial oscuro y grueso. Si tienes unos cuantos vellos al azar, simplemente usa unas pinzas para cejas, o córtalos con tijera o con hilo, o depílalos con cera. Sin embargo, la cera no es buena para quienes tienen la piel delgada y sensible o quienes usan Retin-A. Un dermatólogo certificado puede eliminar el vello con láser de manera segura —no en los salones de belleza o spas diurnos, por favor— o te puede recetar Vaniqa, una crema que inhibe el crecimiento del vello. Consulta a tu médico lo antes posible si notas un crecimiento excesivo de vello facial, ya que esto puede indicar un problema médico subyacente.

9. Piel sensible. Casi la mitad de nosotros pensamos que la tenemos, cualquiera sea nuestro tipo de piel e independientemente de cualquier otro problema de piel que tengamos. La sensibilidad se muestra como una sensación urticante de ardor y manchas, y además la posibilidad de comezón o brotes en otras palabras, una reacción alérgica. A medida que más marcas independientes y productos de belleza orgánicos inundan los estantes de las tiendas, ¿quién no lo piensa dos veces antes de untarse una nueva crema? “Lee las etiquetas con cuidado”, dice Robinson. “Solo porque algo es ‘natural’ no significa que no esté lleno de ingredientes que irritan la piel. La fragancia es un componente perjudicial común, al igual que los aceites botánicos”. Estoy de acuerdo. Prueba todo producto nuevo en la parte interior del codo y espera 24 horas. Para eso es que tienen muestras.

10. Amenazas de cáncer en la piel. Una vez que te haces biopsia de un crecimiento precanceroso o recibes tratamiento para cáncer de células escamosas o basales, esperas que te salgan más. Somos la generación que ha tomado sol durante décadas, así que por supuesto que tenemos miedo. Para tranquilizarte, hazte una prueba de cáncer de piel cada año o con más frecuencia si tu médico lo recomienda. Cuanto más temprano se detecte el cáncer, más tratamiento se le puede dar. Aplícate protector solar todos los días, en días lluviosos o soleados, fríos o nublados. Robinson recomienda protectores solares físicos con los minerales óxido de zinc y dióxido de titanio. “Permanecen en la superficie de la piel como una barrera a los rayos ultravioleta, los cuales rebotan inmediatamente. Incluso los toleran bien quienes tienen piel sensible, ya que no se absorbe ninguna sustancia química que pueda causar irritación o una reacción alérgica".

Para más consejos de belleza y estilo para mujeres mayores de 50 años, lee The Makeup Wakeup: Revitalizing Your look at Any Age, de Lois Joy Johnson y Sandy Linter

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