El (lento) retorno de tu cine local

“Estamos exhibiendo Willy Wonka and the Chocolate Factory”, indica Fred Mills, gerente del Kentucky Theater en Lexington, Kentucky, un cine independiente que reabrió sus puertas el 1.º de junio con una proyección del clásico de Gene Wilder de 1971. “Queríamos hacer la prueba para ver cómo iba a reaccionar el público a lo que estábamos haciendo y si habría algún problema”.

Lejos de ser una solución única para todos

Una fila de asientos bloqueados en un cine de Nueva Orleans, Luisiana.

BRYAN TARNOWSKI/BLOOMBERG VIA GETTY IMAGES

Cada estado tiene diferentes normas para la reapertura, pero en Kentucky estas normas disponen que los cines pueden ocupar solo un 33% de su capacidad. Para cumplir con esta norma, Mills señala que su cine de 800 butacas bloqueará las hileras con cinta de precaución y se asegurará de que haya por lo menos seis pies de distanciamiento social entre los espectadores, aunque las familias se pueden sentar en grupos de menos de diez personas. Otras medidas de seguridad incluyen la limpieza profunda de los baños entre cada presentación, el control frecuente de temperatura del personal y la disposición de que los empleados usen mascarillas y guantes en todo momento. “Definitivamente estamos siendo precavidos”, señala Mills. “Cuando reabrimos, sabíamos que muchas personas todavía no están listas para volver a un cine. Son un poco reacias. Por eso tenemos que demostrarles que es seguro”.

La cadena de cines EVO Entertainment, de Texas, abrió algunas de sus 71 salas (en el área de San Antonio) que proyectan películas como The Goonies, de 1985. Además del distanciamiento social entre los asientos, y las mascarillas que usará el personal, se tomará la temperatura de cada persona antes de que entre al cine. Dado que Texas está limitando la audiencia al 25% de su capacidad, que es el mismo límite que se propone para las reaperturas a mediados de junio en California, el control de temperatura no retrasa mucho las líneas. Sin embargo, eso puede cambiar cuando el límite de capacidad suba al 50%, que se espera que suceda en las próximas semanas. De todos modos, Mitchell Roberts, el director ejecutivo de EVO, no está demasiado preocupado. Insiste en que “es un proceso rápido. Tenemos unos termómetros en forma de pistola que leen la temperatura en 0.5 segundos”.

La cadena Santikos, también de San Antonio, Texas, reabrió cuatro de sus nueve cines en mayo, pero no les toma la temperatura a los miembros del público. Sin embargo, sus salas (donde se exhiben las viejas películas de Harry Potter) están estrenando un nuevo sistema para que el público pueda ir a cine sin tener ningún tipo de contacto. “Estamos eliminando todos los puntos de contacto”, señala el director ejecutivo de mercadeo Andrew Brooks. “Alguien te abrirá la puerta cuando llegues. Cuando compres algo en los puestos de venta, te lo entregará el personal porque no hay autoservicio. No deberías tener que tocar nada hasta que te sientes en tu butaca”.

Cadenas de cines: un lento retorno

Las grandes cadenas nacionales de cines han anunciado sus planes para la reapertura: AMC y Regal reabrirán los cines en julio y Cinemark abrirá cinco salas en Dallas el 19 de junio. Proyectarán películas clásicas con entradas de $5 y reabrirán todos sus cines el 10 de julio (a precios regulares). Sin embargo, cuando finalmente vuelvan a abrir los cines, aún no se sabe cuántas películas nuevas tendrán para proyectar. “Calculamos que para fines de junio o principios de julio se abrirán todos los mercados en el país”, señala Corcoran. “Ese es nuestro objetivo. Pero todo depende del progreso que hagamos”.

La primera película en los cines este verano será...

El primer estreno del verano podría ser Unhinged, un drama de furia en las carreteras, protagonizado por Russell Crowe, que por ahora está programado para el 1.º de julio. Unas semanas más tarde, el 17 de julio, Warner Bros. espera debutar su primer estreno de la temporada, la película de espionaje Tenet dirigida por Christopher Nolan con un costo de $200 millones, pero solo si hay suficientes cines abiertos como para que valga la pena. “Las películas de mucho presupuesto, como Tenet, se deben proyectar en varios cines para que su estreno tenga sentido para los estudios desde el punto de vista económico”, señala Corcoran.

De otro modo, siempre contamos con Netflix.