Kate Del Castillo: “Quiero papeles que me hagan morir de miedo”

La capacidad histriónica de Kate del Castillo es tan indiscutible como camaleónica. Poco tiempo después de mudarse a Los Ángeles y estrenar su filme Julia (2008), Los Angeles Times la perfiló como una “posible” contendiente para un Oscar. En 2015, se estrenan dos de sus películas: Los 33, drama basado en la historia de los mineros chilenos atrapados tras un derrumbe en el 2010, y el largometraje animado El americano. El pasado diciembre, se estrenó la cinta de terror, Visitantes. Todo esto sin descuidar la televisión, en donde da vida a Anastasia Cardona, la férrea narcotraficante de Dueños del paraíso, telenovela que se transmite actualmente por Telemundo.

Desde su casa en Los Ángeles, la actriz mexicana nos concedió una entrevista telefónica.  Mientras nos habla, su voz es serena y cordial, incluso cuando su perra Lola ladra de fondo. Tan relajada está, que hasta comienza nuestra conversación con una broma…

¿Cómo te preparaste para tu personaje de Anastasia Cardona en Dueños del paraíso?

¡Pues digamos que ya tengo experiencia! (risas). Digo, me refiero a mi personaje en La reina del sur (risas). Lo que quiero decir, ahora sí en serio, es que aunque este personaje se parece al de mi telenovela anterior, son diferentes; tuve que ir aprendiendo esas diferencias. Mi personaje de Anastasia requiere mucha preparación física y sicológica, porque ella ha sufrido abusos sexuales y eso necesita un desarrollo diferente: instruirme un poco al respecto, al uso de armas, a tener mucha agilidad en las escenas de acción.

De todo esto, ¿cuál fue el desafío más grande?

Creo que el mayor desafío fue lograr que Anastasia fuera completamente diferente a Teresa Mendoza, a quien interpreté en La reina del sur. Tenía que distanciarla no solo físicamente, pero también en temperamento. El problema es que las dos se dedican a lo mismo, pero tenía que demostrar que eran distintas. Creo que lo logré.

La telenovela alcanzó una cifra record de 3 millones de televidentes en su lanzamiento, sin embargo hay quienes critican que el tema del narcotráfico siga explotándose en la televisión. ¿Cómo recibes esas críticas?

Es que, ¿quién dice qué es lo que se puede hacer o no en la pantalla? Nosotros somos actores y damos entretenimiento. Mientras a la gente le guste y es algo que esté sucediendo, no podemos hacerle oídos sordos a esos proyectos. Sería como decirle a Arnold Schwarzenegger que no haga otra película de acción porque algunos prefieren los dramas. Hay gustos para todos y sería tonto solo complacer a unos y a otros no.  

En vista de las escenas violentas a las que das vida al encarnar a estos personajes, ¿qué tan difícil es desconectarte de esa energía una vez el director grita “¡Corte!”?

Hay actores que se quedan clavados en su personaje y les cuesta distanciarse de ellos inmediatamente, pero yo, aunque soy una actriz muy intensa, trabajo de manera muy orgánica y espontánea, no lo hago bajo el “método”. Lo que quiero decir es que cuando actúo, siento lo que estoy haciendo en el momento, pero cuando dicen “¡Corte!”, vuelvo en seguida a mi vida normal.

Para relajarte, recurres a hobbies también llenos de acción, como andar en motocicleta…

¡Si! Me gusta todo lo que esté lleno de acción, como las motocicletas. Quizás sea porque, como yo no practico la meditación ni hago yoga, tengo que expulsar mi adrenalina en la velocidad de una moto o haciendo ejercicio. Eso es lo que me relaja y, de paso, me ayuda a mantenerme en forma. Me gusta especialmente el functional training, que abarca un poco de todo: cardio y tonificación, con ejercicios que involucran más de un músculo a la vez, sin parar en una hora para nada.

Leí una vez que te gustaba cocinar huevos y ensaladas, ¿has ampliado el menú?

La verdad es que muy rara vez cocino; sólo cocino cuando me pica la onda de halagar a mis amigos, cuando quiero compartir con ellos algo de mi cultura mexicana, sobre todo cuando estoy recibiendo en casa a amigos extranjeros. Entonces cocino taquitos dorados o chiles rellenos, que son mi especialidad.

También has dicho que te gusta mucho ir al cine. ¿Qué tipo de temas te gustaría ver representados en Hollywood?

¡Uy! Me encantaría que en Hollywood se tratara algo la Revolución Mexicana, cómo fue… Hay muchas historias maravillosas que me encantaría ver en el cine, como la de la periodista Lydia Cacho o de hechos increíbles que han pasado en México, como la noche de Tlatelolco, que fue cuando en 1968 se mató a tantos estudiantes en mi país. ¡Hay tantas historias que me han impactado! Son hechos claros y fuertes que pasaron en México, pero con las que se identificaría mucha gente porque también han pasado cosas similares en otros lados.

¿Tu sueño como actriz sería estar en una de esas películas?

Mi sueño como actriz es encontrar personajes que me hagan temblar y sufrir, no porque sean trágicos, sino porque representen un reto; quiero papeles que me hagan morir de miedo por el desafío de lo que tengo que hacer.

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