Luego de llegar a un punto máximo del 9.1% en junio del 2022, la inflación está comenzando finalmente a bajar un poco. Sin embargo, eso no significa que todo será más barato en el 2023. El índice de precios al consumidor —la principal medida de la inflación que utiliza el Gobierno— subió un 6.5% en los 12 meses que concluyeron en diciembre, según la Oficina de Estadísticas Laborales. El panorama parece indicar que este año habrá un poco de todo: los precios de algunos productos de consumo seguirán subiendo, mientras que los de otros comenzarán a bajar.
Mucho de ello tiene que ver con acciones que están fuera del control de los consumidores. Los problemas en la cadena de suministro, las condiciones climáticas adversas y los brotes de COVID-19 en China continúan afectando la producción. La Reserva Federal está tratando de controlar la inflación con aumentos de las tasas de interés, pero estos esfuerzos también están aumentando el costo de pedir dinero prestado, ya sea para comprar una casa, un auto o un artículo costoso a crédito.

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Teniendo eso en mente, aquí te presentamos cuatro productos que podrías considerar comprar en el 2023, cuando se espera que bajen los precios, y otros cuatro cuya compra deberías pensar dos veces, ya que los costos son altos y se pronostica que subirán aún más.
QUÉ COMPRAR
1. Vehículos
La demanda récord alimentada por la pandemia y el efecto negativo que las demoras en la cadena de suministro tuvieron en la producción hicieron que los precios se dispararan en el 2022. Esa situación está mejorando, lo cual hará que los precios vuelvan a bajar. ¿Cuánto? Según un pronóstico de J.P. Morgan, se anticipa que el precio de los autos nuevos bajará entre un 2.5 y un 5%, mientras que los autos usados verán una reducción de entre el 10 y el 20% este año. Sin embargo, hay una salvedad: si bien el precio de los autos nuevos está comenzando a bajar, las tasas de interés están aumentando. Si vas a financiar la compra, el interés que pagarás sobre el préstamo será más alto. Si puedes, compra el auto en efectivo, o al menos trata de hacer un pago inicial más alto para financiar una cantidad menor.