Nuevos créditos tributarios por los vehículos eléctricos

Se aplican muchas condiciones

Estos créditos tributarios se orientan hacia los vehículos eléctricos de menor costo. El crédito solo podrá solicitarse por la compra de camionetas y SUV de $80,000 o menos, así como otros vehículos (como los sedanes) cuyo precio no supere $55,000.

Asimismo, se excluyen los compradores que tengan un alto nivel de ingresos. Para poder recibir el crédito tributario por la compra de un vehículo eléctrico nuevo, un contribuyente soltero debe tener un ingreso inferior a $150,000. En el caso de una pareja casada que presenta conjuntamente la declaración de impuestos, su ingreso debe ser inferior a $300,000. En cuanto al crédito tributario por los vehículos eléctricos usados, los límites de ingresos son más bajos: $75,000 para los contribuyentes solteros y $150,000 para las parejas.

En realidad, este crédito tributario consta de dos créditos distintos, de $3,750 cada uno. El primer crédito corresponde a los vehículos eléctricos ensamblados en América del Norte: es decir, en Estados Unidos, México o Canadá. El otro crédito se aplica a los vehículos eléctricos cuyas baterías contengan materiales procedentes de Norteamérica. Para saber dónde se ensambló tu auto, este dato figura en el número de identificación del vehículo (VIN). Si el VIN empieza con 1, 4 o 5, el vehículo se ensambló en Estados Unidos; si empieza con el número 2, se ensambló en Canadá; y un VIN que empiece con un 3 fue ensamblado en México.

El segundo crédito de $3,750 tiene que ver con la batería del vehículo eléctrico: a saber, si los minerales críticos de la batería proceden de Estados Unidos o de países con los que Estados Unidos tiene acuerdos comerciales vigentes. Los minerales críticos que se emplean típicamente en las baterías de vehículos eléctricos son el litio, el cobalto, el níquel, el grafito y el manganeso. En el 2023, los materiales críticos procedentes de Estados Unidos deben representar un 40% como mínimo. Esta cifra mínima aumentará cada año en 10 puntos porcentuales hasta alcanzar el 80% en el 2027. A partir del 2024, se prohibirá que las baterías contengan componentes procedentes de una "entidad extranjera de preocupación", categoría que incluye a China.

Todas estas disposiciones limitarán en gran medida el número de vehículos eléctricos a los que se podrá otorgar el crédito tributario. "La mayoría de los vehículos actuales probablemente no reunirán los requisitos", afirma Mark Luscombe, analista principal de Wolters Kluwer Tax & Accounting. Entre los 31 autos que podrían cumplir el criterio de haber sido ensamblado en Norteamérica (en inglés) figuran la camioneta Ford F-150 Lightning, el Nissan Leaf y la camioneta GMC Hummer.

Cómo reclamar el crédito tributario por la compra de un vehículo eléctrico

El crédito tributario por la compra de un vehículo eléctrico debe reclamarse al momento de presentar la declaración de impuestos federales. Asegúrate de obtener una carta de certificación del concesionario para que puedas presentarla al IRS al momento de reclamar el crédito en tu declaración de impuestos, aconseja Anderson Advisors, una empresa de planificación y consultoría empresarial. En dicha carta se debe especificar la marca y modelo del vehículo y el año fiscal en que reúnes los requisitos para el crédito tributario por la compra de un vehículo eléctrico.

A partir del 2024, posiblemente se pueda obtener el crédito a través del concesionario al momento de comprar el auto, en vez de tener que esperar hasta presentar la declaración de impuestos. "Creo que tardarán otro año más en resolver cómo funcionará este proceso", dice Luscombe. "Uno de los problemas es que el concesionario tendría que poder, de alguna manera, determinar si el cliente reúne los criterios para recibir el crédito de acuerdo con su nivel de ingresos".

El crédito por la compra de un vehículo eléctrico no excluye otros créditos y deducciones a los que puedas tener derecho. Por ejemplo, si trabajas por cuenta propia y usas el auto para tus actividades profesionales, aún tienes derecho a recibir exenciones impositivas relacionadas con las millas y la depreciación.