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¿En realidad necesitas realizarte un examen físico anual?

5 mitos y realidades que debes saber sobre esa revisión médica.

Médico realizando examen físico a su paciente

Getty Images

Los especialistas médicos no se ponen de acuerdo sobre si los chequeos anuales de verdad benefician a quienes por lo demás están sanos.

In English | El examen físico anual ha sido popular en la medicina de Estados Unidos desde la década de 1940, como una manera de ayudar a tu médico a conocerte y saber tus antecedentes médicos, realizar algunos exámenes de detección y tal vez incluso detectar temprano algunos problemas. Por eso creerías que todos los expertos en salud lo apoyarían.

Y te equivocarías.

Ese es solo uno de los mitos sobre el examen físico anual: que todos piensan que es una buena idea. Hay otras cosas que también debes saber, tales como si Medicare cubre el costo del examen. (Una pista: es complicado).

Ten en cuenta estos cinco mitos:

Por supuesto que un examen físico anual es una buena idea.

Eso depende de a quién le preguntes. Los especialistas médicos no se ponen de acuerdo sobre si de verdad benefician a quienes por lo demás están sanos. Sin embargo, entre las personas en Estados Unidos, la respuesta es evidente: el 92% piensan que es importante que el médico de atención primaria les realice un chequeo anual, según una encuesta realizada en el 2015 por la Kaiser Family Foundation, y el 62% de los encuestados van a ver al médico todos los años.

Pero muchos médicos insisten en que el chequeo médico anual necesita su propio chequeo.

En octubre pasado, la revista New England Journal of Medicine publicó editoriales opuestos escritos por médicos que estaban a favor y en contra del examen anual. Un lado sostuvo que no hay pruebas de que estos exámenes ayudan a las personas en Estados Unidos a permanecer más sanas o disminuyen el número de muertes, y que básicamente desperdician tiempo y dinero que podrían dedicarse a pacientes más enfermos.

El otro lado estuvo en desacuerdo y dijo que los exámenes ayudan a desarrollar la relación médico-paciente y brindan a los médicos la oportunidad de realizar unos exámenes de detección básicos pero importantes.

Otro experto, David Himmelstein, un médico de atención primaria y profesor de la Facultad de Salud Pública de la City University of New York en Hunter College, también está a favor del examen anual, en particular para los mayores de 50 años.

Himmelstein fue coautor de un editorial sobre este tema publicado en enero en la revista Annals of Internal Medicine, donde señaló que los datos que se citan comúnmente contra los exámenes anuales se basan en un análisis que excluyó los estudios acerca de los adultos mayores.

“Visitar a un médico con regularidad es razonable para los adultos mayores”, dijo Himmelstein en una entrevista. “Nos preocupa mucho que estas recomendaciones [contra los exámenes] alejen a los pacientes de los médicos o hagan que los médicos no conozcan a sus pacientes lo suficiente”.

El propósito de un examen anual es asegurarse de que estés sano.

No exactamente. Un examen anual sí da un resumen rápido sobre tu salud, pero su objetivo es concentrarse en prevención y detección comunes y ayudarte a establecer una relación médico-paciente en caso de que eventualmente te enfermes. Hasta los médicos que escribieron el editorial contra un examen anual están de acuerdo en que un chequeo periódico es importante para establecer esta relación, y que los médicos de atención primaria necesitan asegurarse de que sus pacientes reciben cuidado preventivo.

Por ejemplo, durante un chequeo anual el médico debería discutir los antecedentes médicos familiares de un paciente para ver si corre mayor riesgo de ataque al corazón, hipertensión, diabetes o cáncer; auscultar el corazón y el abdomen; medir la presión arterial; y hablar sobre la necesidad de diversos exámenes de detección, como una colonoscopía a los 50 años o una prueba de Papanicolaou para las mujeres, además de las vacunas requeridas. Todos estos son temas que no surgirían durante una consulta médica normal para un problema específico.

Me siento bien. No necesito un examen físico anual.

Tal vez no necesites someterte a un examen todos los años, pero “es importante mantener el contacto periódico con el médico, en particular después de los 50 años”, dijo el Dr. Marvin Lipman, asesor médico principal de Consumer Reports.

Además, quizás ni siquiera sepas que tienes síntomas. Algunas enfermedades graves, como hipertensión, colesterol alto, diabetes, cáncer de colon y cáncer de cuello uterino, no presentan síntomas obvios, en especial durante las etapas tempranas cuando son más fáciles de tratar. El chequeo rutinario que realiza el médico puede incluir exámenes de detección básicos para estas enfermedades. Los médicos además pueden verificar que te han administrado las vacunas importantes para los adultos mayores, entre ellas las vacunas contra culebrilla y neumonía, y la vacuna antigripal.

Medicare cubrirá el costo de un examen físico anual.

No exactamente. Medicare cubre dos tipos de exámenes físicos: un examen de “bienvenida a Medicare” cuando te acabas de inscribir, y lo que se conoce como una consulta anual de rutina o bienestar. En el consultorio del médico, debes pedir específicamente la consulta gratuita de bienestar de Medicare, para que se incluya el código correcto en la factura. No solicites simplemente un chequeo médico. Si prefieres un chequeo médico, tendrás que pagar tú mismo los cargos del médico, a menos que tengas un plan Medicare Advantage o un seguro secundario (tal como el de un empleador previo) que lo cubra. Pero debes estar al tanto de que el seguro complementario de Medicare, conocido como Medigap, no cubre este costo.

Durante la consulta de bienestar de Medicare, el médico te mide la estatura, el peso, la masa corporal y la presión arterial, y te ausculta el corazón. Ni siquiera tienes que desvestirte. El resto de la consulta es una conversación sobre los antecedentes médicos y familiares del paciente, cualquier discapacidad física o mental y los factores de riesgo de posibles enfermedades como diabetes o depresión. El médico puede enviar al paciente a realizarse otras pruebas y exámenes de detección.

Si un examen es gratuito, no hay desventajas.

Algunos piensan que sí las hay. Para el paciente, tienen que ver con el tiempo y el transporte para ver al médico, así como la posibilidad de un resultado “positivo falso” en las pruebas de laboratorio que podría sugerir un problema cuando no lo hay, causar preocupaciones y llevar a pruebas adicionales, según Ateev Mehrotra, médico de Harvard, y Allan Prochazka de la University of Colorado, autores del editorial contra los exámenes anuales en la New England Journal of Medicine. Ellos además calculan que los exámenes anuales le cuestan al sistema de atención médica $10,000 millones ($10 billion) anuales y ocupan el tiempo de los médicos. “Aproximadamente el 10% de todas las consultas con médicos de atención primaria son para exámenes físicos anuales, lo cual podría desplazar consultas para problemas de salud más urgentes”, escribieron.

Por otra parte, los chequeos periódicos gratuitos podrían ayudar a más personas a obtener servicios preventivos recomendados, según mencionó Himmelstein en su editorial, y motivar a más individuos con alto riesgo y bajos ingresos a ver al médico.

¿Quién debería realizarse un examen físico anual?

Las recomendaciones varían, pero si estás sano —es decir, no tienes una enfermedad crónica ni tomas medicamentos recetados— la mejor solución podría ser preguntarle al médico con cuánta frecuencia desea verte. Y si no tienes un proveedor de cuidados primarios habitual, un examen físico “para conocerse” sería bueno como el punto de partida para una relación médico-paciente en caso de que te enfermes.

De lo contrario, un examen anual podría valer la pena basado en tu edad y el riesgo de ciertas enfermedades debido a tus antecedentes familiares. Y si tomas medicamentos para una enfermedad crónica, incluso si esta enfermedad está controlada, los chequeos periódicos podrían justificarse.

El mejor consejo: consulta a tu médico.