Javascript is not enabled.

Javascript must be enabled to use this site. Please enable Javascript in your browser and try again.

Skip to content
Content starts here
CLOSE ×

Buscar

Leaving AARP.org Website

You are now leaving AARP.org and going to a website that is not operated by AARP. A different privacy policy and terms of service will apply.

Tu guía para sobrevivir el verano

¿Avispas iracundas, hiedra venenosa, corrientes submarinas? Aprende a enfrentar estas amenazas para disfrutar al sol.


spinner image Hombre al sol
¿Te sientes mareado? Puede que tengas una insolación.
Getty Images

Todos esperamos con ansias el verano: noches sofocantes en el patio, fines de semana largos en el bosque, vacaciones en la playa.

Pero el verano también puede ser tenso, repleto de peligros que podrían arruinarte el día. A medida que envejecemos, somos más susceptibles a la insolación, sin mencionar las torceduras y distenciones que surgen con el aumento en actividad.

spinner image Image Alt Attribute

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP

¿Cuál es la mejor manera de disfrutar de las actividades veraniegas con amigos, hijos y nietos? Estate preparado.

Peligro: avispas iracundas

Plan de acción: las avispas son agresivas, así que deberás marcharte si perturbas un avispero. Si te pica una avispa, retira el aguijón con la uña o con pinzas y aplica un antihistamínico tópico.

Peligro: abejas zumbantes

spinner image Abeja
¡No permitas que las abejas arruinen tu diversión este verano!
Michael Durham/Corbis

Plan de acción: en general, las abejas que revolotean no quieren atacarte; solo protegen a la reina. Pero si te ataca un enjambre, cúbrete la nariz y la boca, y llama al 911. Las picaduras pueden ser mortales.

Peligro: mosquitos sanguinarios

Plan de acción: los repelentes con DEET son los que mejor funcionan. ¿Quieres uno sin químicos? Mantén a raya a los mosquitos con citronela o un ventilador. O intenta ponerte aceite de soja sobre la piel.

Peligro: intoxicación alimentaria

Plan de acción: intenta chupar cubitos de hielo o tomar sorbos de una bebida enriquecida con electrolitos. La deshidratación es un peligro real a medida que envejecemos, en particular si tomamos ciertos medicamentos. Si las náuseas o la diarrea duran más de dos días, consulta al médico.

Peligro: caída de una escalera

Plan de acción: primero, mira hacia arriba. Si no hay riesgo de que una rama se derrumbe, quédate quieto y espera. Los servicios de emergencia deben actuar con rapidez pero con cuidado. "Si hay sangrado evidente, aplica presión directa en el sitio del sangrado y mantén la presión", dice Stephen Cantrill, un médico de emergencias en Denver Health. Y, la próxima vez, pídeles ayuda a tus hijos adultos. En un estudio publicado en Journal of Surgical Research, las personas mayores de 66 años eran 3.4 veces más propensas que las personas más jóvenes a sufrir lesiones en la cabeza al caer de una escalera.

Peligro: una emergencia médica durante una barbacoa

Plan de acción: si no estás seguro de lo que sucede, no dudes en llamar al 911. "A menudo, las personas no quieren causar molestias al equipo de rescate", explica Cantrill. Si organizas eventos con frecuencia o tienes una piscina, considera tomar un curso de primeros auxilios en tu hospital o capítulo de la Cruz Roja locales.

Peligro: una astilla en el dedo

Plan de acción: primero, corta un cuadrado de cáscara de banana y ponlo con la parte blanca hacia abajo sobre la astilla. Cúbrelo con una venda. Las enzimas en la cáscara quitarán la astilla.

¿No tienes banana? Pon goma de pegar Elmer's sobre la astilla, déjala secar y pélala.

Peligro: agotamiento por calor

Plan de acción: tu sistema de refrigeración interno no funciona tan bien a medida que envejeces, así que si te sientes mareado o aturdido y tienes la piel fría y húmeda, esos son signos seguros que te sobrecalentaste. Busca sombra de inmediato y eleva los pies, y luego rehidrátate con agua fría. (Evita el agua con hielo, que no se absorbe con facilidad). Verter agua fría en las muñecas y los pies también puede ayudar a reducir tu temperatura corporal con más rapidez.

Peligro: arena hirviendo

Plan de acción: los pies de las personas mayores son menos sensibles al calor, por lo que es posible que no te des cuenta de lo caliente que está la arena hasta que ya esté hecho el daño. Y la arena caliente puede generar quemaduras de segundo o tercer grado. El riesgo es aún mayor si eres diabético y tienes entumecimiento en los pies. Para evitar quemaduras y cortes, usa zapatos de surf o sandalias, sugiere el Dr. David Greenhalgh, jefe de cirugía de quemaduras en Shriners Hospitals for Children–Northern California.

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

Peligro: arena en el ojo

Plan de acción: enjuágate el ojo con solución salina si tienes, o con agua corriente si no, dice Jerry Sebag, un oftalmólogo en Huntington Beach, California. Enjuágalo durante tres minutos y después aplica gotas para los ojos. Cierra los ojos y cúbrelos con una compresa fresca durante diez minutos para reducir la inflamación. Advertencia: no te frotes los ojos, porque podrías ulcerarte la córnea, una afección dolorosa.

Peligro: problemas con los niños en el agua

spinner image Persona bajo el agua
Mantén la vista en tus nietos en la playa para evitar que se ahoguen.
Getty Images

Plan de acción: mantén siempre la vista en tus nietos y sus amigos cuando están en el agua; los niños que se ahogan a menudo no gesticulan ni gritan. Por el contrario, presionarán los brazos hacia abajo para mantener la boca fuera del agua. Hay que llevar al médico al niño que se hunde pero después parece estar bien y observarlo el resto del día; el agua en los pulmones puede persistir por mucho tiempo después del incidente y la persona se puede ahogar incluso horas después del terrible episodio.

Peligro: ¡tiburón!

Plan de acción: si lees las noticias, puedes pensar que los tiburones están subiendo a la playa para arrastrar a la gente al agua. Lo cierto es que los ataques son poco frecuentes, un promedio de 45 al año en Estados Unidos. Para reducir las probabilidades, nada en grupos, evita el agua turbia y permanece sobre tu toalla, en la arena, después del crepúsculo. Si te ataca, golpea al tiburón en las zonas sensibles: la nariz y las branquias.

Peligro: mareos

Plan de acción: cuando te dan náuseas por mareos, recuéstate, estate quieto y mira hacia el horizonte. Un estómago vacío puede hacer que te sientas peor, por lo que beber sorbos de agua y comer algunas galletas saladas —un viejo truco de marineros— puede ayudar, dice Thomas Stoffregen, profesor de kinesiología en University of Minnesota. Si tienes problemas de equilibrio o en el oído interno, evita los viajes de pesca.

Peligro: un nieto extraviado

Plan de acción: no pierdas minutos preciosos buscándolo. Dirígete al salvavidas de turno y dale una descripción que pueda compartir con los demás salvavidas. "Si acabas de ver al niño cavando en la arena con su cubo, es probable que todavía esté en la playa, en algún lugar", dice B. Chris Brewster, presidente de la USLA (Asociación de Salvamento de Estados Unidos) que, en 22 años como guardavidas, no recuerda un caso de ahogamiento cuando el niño fue visto por última vez en la playa. De todas maneras, designa siempre a un adulto para ser el "vigilante del agua". Brewster aconseja decirles a los niños que "los salvavidas son como oficiales de la policía. Si necesitas algo, si te pierdes, pueden ayudarte".

Peligro: picaduras de medusas

Plan de acción: si los tentáculos están pegados a la piel, enjuaga con agua salada y raspa las púas con un palito de paleta o una tarjeta de crédito. En función del tipo de medusa, el vinagre puede evitar que los aguijones sigan quemando, explica Joseph Burnett, profesor emérito de la Facultad de Medicina de University of Maryland. No confíes en el viejo mito de que la orina puede aliviar el dolor de las picaduras de medusas. No ayuda.

Peligro: una fuerte corriente superficial

spinner image Aviso en una playa
Se puede usar vinagre para tratar las picaduras de medusas.
Getty Images

Plan de acción: las corrientes superficiales no te hunden ni te llevan por todo el océano. "Solo te llevan a dar un paseo", dice Robert Brander, un especialista en geomorfología costera en University of New South Wales en Sídney. No entres en pánico. (Más fácil decirlo que hacerlo, ya sabemos). La corriente no te hundirá, pero si usas tu energía para gesticular, es posible que termines en problemas. Por el contrario, pide ayuda agitando un brazo. Para escapar, nada paralelamente a la costa hasta que la corriente te deje ir. Si nadar no es tu fuerte o tienes mala salud, escanea el océano antes de nadar: las corrientes superficiales parecen senderos oscuros de agua tranquila. Evítalas.

Peligro: dolor en el pecho mientras haces una caminata

Plan de acción: probablemente se trate de una distensión muscular o de acidez, pero no corras riesgos. Deja de moverte y siéntate a la sombra. Si el dolor disminuye después de un momento, levántate y comienza a regresar al auto, no te adentres más en el bosque. Si el dolor regresa, llama al 911 y permite que el personal de emergencia vaya a ti. ¿No hay recepción en el celular? Si hay más de una persona contigo, envía a alguien a pedir ayuda.

spinner image Carro atascando en un hoyo durante una aguacero
No trates de conducir por un camino inundado.
Marnie Burkhart/Corbis

Peligro: una tormenta

Plan de acción: cuenta los segundos entre un relámpago y un trueno. Si son menos de 30, corres el riesgo de ser una de las 300 personas al año alcanzadas por un rayo o una de las alrededor de 70 que mueren, según el Servicio Meteorológico Nacional. Cuando se acercan las nubes negras, evita los campos abiertos, los árboles aislados, los refugios de picnic, las gradas de metal y el agua. Si no puedes encontrar un refugio grande pero puedes regresar al auto, no hay problema. Solo mantén las manos alejadas de cualquier artículo de metal, como la manija de la puerta, hasta que pase la tormenta, aconseja Richard Kithil, presidente del NLSI (Instituto Nacional de Seguridad en caso de Rayos).

Peligro: conducir en una lluvia fuerte

Plan de acción: si la lluvia hace que sea difícil ver, detente y espera a que pase la tormenta, idealmente en un lugar alejado de árboles que puedan caer sobre el auto o de barandas que conducen la electricidad, explica Julie Lee, exdirectora del programa AARP Driver Safety. Las inundaciones repentinas son la primera causa de muertes relacionadas con tormentas eléctricas. De 50 a 60% de las muertes por inundaciones ocurren cuando los autos son arrastrados por el agua en movimiento. Así que no conduzcas por un camino inundado. "Tan solo dos pies de agua pueden llevarse tu auto", agrega Lee. Si quedas atrapado y ves que el agua sube, sal del vehículo por una puerta o ventana y ve a un terreno más alto.

Peligro: garrapatas

Plan de acción: las garrapatas pueden transmitir enfermedades y son muy difíciles de evitar, pero meter los pantalones largos dentro de los calcetines y usar camisas de manga larga son una buena primera defensa. Además, considera plantar Callicarpa americana (beautyberry). Machaca las hojas y frótalas sobre la piel para liberar las sustancias químicas que repelen las garrapatas y los mosquitos también, aconsejan los científicos del Servicio de Investigación Agrícola de Estados Unidos. Si encuentras una garrapata, usa unas pinzas para agarrarla lo más cerca posible de la piel y tira hacia arriba con presión constante y pareja, asegurándote de quitar el insecto entero. Limpia la herida y lávate las manos con alcohol isopropílico o agua y jabón. Si la zona muestra una erupción en forma de diana, consulta a tu médico, ya que podría ser un signo de la enfermedad de Lyme.

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.

Peligro: un caimán hambriento

Plan de acción: los floridanos con frecuencia aconsejan a los turistas correr en zigzag si son perseguidos por un caimán, pero Juan Brüggen, gerente general de la St. Augustine Alligator Farm, dice que no es necesario si eres sensato. "El mayor error que puedes hacer es esperar a la orilla del agua", dice Brueggen. "Va a embestir y o bien te agarra o bien no te agarra". El crepúsculo es especialmente peligroso, porque es cuando los caimanes nos ven mejor que lo que los vemos a ellos. Si eres atacado en el agua, pega fuerte con el codo en la zona carnosa alrededor de la garganta o los ojos del animal, y grita para pedir auxilio.

Trabajo y empleos

Lista de empleos, de AARP

Busca oportunidades de empleo para trabajadores con experiencia

See more Trabajo y empleos offers >

Peligro: una fogata explosiva

Plan de acción: hacer una fogata es uno de los placeres primordiales de estar al aire libre, pero evita rodear las llamas con rocas de la costa, dice Cliff Jacobson, un consultor especializado en espacios silvestres afincado en River Falls, Wisconsin. La arenisca y otras rocas porosas absorben más agua, que forma vapor cuando se calienta y hace que las piedras exploten como granadas. Por el contrario, rodea el fuego con rocas secas o no las uses para nada, ya que no harán que tu fogata sea más segura.

Peligro: gas de hiedra venenosa proviniente de tu fogata

Plan de acción: ya sabes que no hay que tocar las "hojas de tres", pero es aún más importante mantener la hiedra venenosa y a sus primos, el roble venenoso y el zumaque, alejados de tu pila de troncos. Para las personas que son alérgicas al aceite de urushiol en la hiedra venenosa —o aquellas con problemas respiratorios como el asma o la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica)— el humo puede ser especialmente peligroso, ya que una erupción puede lesionar el revestimiento de los pulmones, causando dolor extremo y problemas respiratorios.

Peligro: una víbora en el camino

spinner image Hombre haciendo una caminata por el bosque y una serpiente
Si ves una víbora mientras haces una caminata, apártate lentamente.
National Geographic Creative/Getty Images

Plan de acción: solo una de cada seis especies son venenosas, y quieren evitarte tanto como tú quieres evitarlas a ellas. Sencillamente, mira por donde caminas y apártate lentamente de la distancia de ataque. Si te muerden —aunque creas que la víbora no es venenosa— llama de inmediato al 911. No te apliques hielo, calor ni un torniquete, ni intentes aspirar el veneno. Estos remedios tradicionales causan más daño. Sácate los anillos o la ropa restrictiva, y lava la picadura mientras esperas ayuda.

Peligro: una canoa volcada con los nietos a bordo

Plan de acción: si tú y los nietos usan chalecos salvavidas —y deberías insistir que lo hagan— toma la línea de la embarcación y nada hasta la orilla, dice Jacobson, el consultor de espacios silvestres. Si eso es imposible y puedes divisar la costa, deja la embarcación y nada hasta la orilla, con los más pequeños siempre delante de ti. Si se vuelcan en agua con corrientes fuertes, no intentes ponerte de pie; la fuerza del agua podría hundirte.

Peligro: ampollas en los pies

Plan de acción: evita reventar las ampollas, porque el saco lleno de líquido sirve como un escudo contra los gérmenes. Para aliviar el dolor y acelerar la curación, remoja el área en té verde frío bien fuerte. Y ya que estás en eso, tómate un vaso. El té verde es un potente antinflamatorio.

Y luego hay ciertas actividades de verano que deberías dominar para tu seguridad y la de quienes te rodean. Este verano, aprende a...

Encender "fuegos artificiales" en el patio, ¡sin quemarte!

A nosotros también nos encantan las velas romanas, pero teniendo en cuenta que la pirotecnia envió a más de 11,000 personas a la sala de emergencias en el 2013, es mejor limitarse a las lucecitas de bengala (y usarlas con precaución). Una opción aún más segura: haz tus propios "fuegos artificiales" con una botella de 2 litros de gaseosa y un paquete de Mentos. Desenvuelve el paquete, deja caer los caramelos en la botella y mira cómo hace erupción el géiser.

Tírate de bomba sin dolor

La clave para tirarse de bomba a la piscina es el compromiso, dice Summer Sanders, una medallista de oro olímpico de 1992, que claramente se quedaba después de la práctica de natación para desarrollar el zambullido perfecto: "Si no te comprometes con el salto, te dolerá y, ciertamente, salpicarás menos". Lánzate desde la parte más profunda y hacia el centro de la piscina, metiendo las piernas y las rodillas contra el pecho. Una vez que estés en el agua, extiéndelas y sal a la superficie para comprobar el resultado.

Juega voleibol de playa sin torcerte un tobillo

La arena es una superficie de juego más clemente que ofrece a las caderas, rodillas y hombros más protección que la hierba o una cancha bajo techo. Sin embargo, los esguinces de tobillo son comunes debido a los clavados y los saltos hacia los lados. El Dr. Jonathan Reeser, un especialista en rehabilitación en Marshfield, Wisconsin, y autor de Handbook of Sports Medicine and Science: Volleyball, dice que las personas a menudo se lesionan durante un partido de voleibol porque se caen una sobre la otra. ¿Cuál es la mejor manera de proteger tus articulaciones? Corre tras la pelota, y salta derecho cuando remates o bloquees.

Enciende la parrilla a gas y conserva tus cejas

Las parrillas a gas se han vuelto más grandes y más potentes, lo que es genial si planeas una gran barbacoa en el patio. Pero con ese poder existe la posibilidad de llamaradas repentinas. Si estás cocinando y notas que las llaman se salen de control, cierra la tapa para quitarle el oxígeno al fuego. Para evitar un incendio en el primer lugar, enciende tu parrilla (y apágala) en el orden correcto: con la tapa levantada, primero abre el tanque de propano, luego enciende las perillas de los quemadores y pulsa el encendido. Cuando hayas terminado, apaga el tanque de propano y luego las perillas de los quemadores, dice Guy Colona de la Asociación Nacional de Protección contra Incendios.

Encuentra el camino de salida del bosque... sin una brújula

Haz un poco de trabajo de reconocimiento antes de llegar a la ruta. Toma nota mental de dónde se pueden cruzar los arroyos y la ubicación de las curvas cerradas en caso de tener que dar marcha atrás, dice Rebecca Jensen, una instructora de navegación en Northwest Trail Runs en Seattle. O usa el sol y un reloj para encontrar tu camino. Primero, alinea la aguja de las horas con el sol. (O pon una rama en la tierra y alinea la aguja de las horas con su sombra). Divide en dos el ángulo entre la aguja de las horas y la marca de las 12 horas. Ese será el sur; el norte se encuentra en el lado opuesto. Si has estado deambulando un rato y todavía no tienes idea de dónde te encuentras, no te muevas del sitio. Será más fácil encontrarte.

Discover AARP Members Only Access

Join AARP to Continue

Already a Member?

spinner image membership-card-w-shadow-192x134

Membresía de AARP: $12 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso instantáneo a productos y a cientos de descuentos exclusivos para socios, una segunda membresía gratis y una suscripción a la revista AARP The Magazine.